El asesor económico de la Casa Blanca, Larry Kudlow, dijo que los estadounidenses ya no necesitan los 600 dólares extra en pagos semanales por desempleo ya que esos beneficios expiran a finales de julio.
«La forma de cualquier tipo de paquete está todavía en el aire», dijo Kudlow a Bloomberg News sobre el tan esperado próximo paquete de estímulo. Dijo que los 600 dólares extra probablemente no se incluirán en el proyecto de ley, diciendo que «ese momento ha pasado».
Los pagos adicionales se incluyeron en la Ley CARES de 2.2 billones de dólares, que fue aprobada por el Congreso y firmada en marzo. El proyecto de ley estipula que deben expirar el 31 de julio, aunque en algunos estados, los pagos expiran aproximadamente una semana antes de eso.
«Los beneficios por reempleo probablemente ayudarán a completar el proyecto de ley», dijo Kudlow.
En otra entrevista, Kudlow dijo que otro pago directo en efectivo está todavía en negociaciones en el próximo paquete.
«Es un paquete a gran escala», dijo a Fox News Business el jueves. «Los cheques directos probablemente formen parte de él, en lo que respecta al presidente en este momento».
Un día antes, el presidente Donald Trump dijo que apoya la idea de enviar pagos superiores a 1200 dólares, que era lo máximo que se podía recibir según la Ley CARES.
«Apoyo en realidad números más grandes que los demócratas, pero tiene que hacerse correctamente», dijo en una entrevista el miércoles. «Quiero que el dinero que llegue a la gente sea mayor para que puedan gastarlo. Quiero que el dinero llegue rápido y sin complicaciones».
Los comentarios de Kudlow y Trump se producen cuando el Departamento de Trabajo reveló que se añadieron más de 4.8 millones de puestos de trabajo en el mes de junio, lo que supone el mayor aumento en la historia de EE. UU., mientras que la tasa de desempleo cayó a cerca de 11.1 por ciento.
Decenas de millones de empleos se perdieron durante el brote del virus del PCCh (Partido Comunista Chino), con los gobernadores emitiendo órdenes de permanecer en casa y de distanciamiento social que obligaron a algunas empresas a cerrar y despedir trabajadores.
Los republicanos han dicho que no esperan que se aprueben más medidas de ayuda hasta el final del receso de julio, que está previsto que termine el 20 de julio.
Según datos de la Universidad Johns Hopkins, Estados Unidos registró más de 50,000 casos de virus del PCCh el miércoles, aunque otros rastreadores han señalado que el número de muertes diarias ha sido relativamente bajo en las últimas semanas.
El jueves, el vicepresidente Mike Pence dijo a la CNBC que no cree que haya necesidad de un «mandato nacional» para usar mascarillas.
«La verdad es que estamos monitoreando en este momento 12 estados que tienen un aumento de casos y una creciente positividad, y estamos apoyando plenamente los esfuerzos que los gobernadores están tomando y los funcionarios locales de salud están tomando para alentar a la gente a practicar una buena higiene, el distanciamiento social, usar una mascarilla donde el distanciamiento social no es posible», dijo.
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