El año fiscal 2019 de la Oficina de Asuntos Consulares de EE.UU. cerró con un aumento del 40 por ciento en la entrega de visas americanas para intercambios culturales y visitas familiares a solicitantes cubanos, también aumentó la entrega de visas por invitaciones profesionales y de negocios.
En un análisis de las estadísticas publicadas por la oficina de Asuntos Consulares del Departamento de Estado, se reportan las cifras de los incrementos en las otorgaciones.
A pesar del desmonte de los intercambios con Cuba, promovidos por el gobierno de Barak Obama, los visados por invitaciones profesionales y de negocios se han duplicado en el recientemente concluido año fiscal 2019.
Las visas de inmigrante tuvieron un leve incremento, pasando de 6292 el año anterior a 7783 el presente año, a pesar del incumplimiento en la entrega de 20,000 visas de este tipo por parte del gobierno.
Un incremento relevante en las entregas de visados se dio en las categorías B1 y B2, que se corresponden a las invitaciones culturales y de negocios por un lado y a las visitas familiares respectivamente.
Sobre ambas categorías se registraron unas 6959 entregas de visas, correspondientes al periodo anterior. En contraste, el presente periodo registró unas 10,191 entregas. Un aumento de 3232 visas adicionales.
Las entregas de los visados contrastan con las sanciones impuestas por el gobierno de Estados Unidos al régimen castrista debido al apoyo otorgado al régimen de Nicolás Maduro, al papel desestabilizador que tiene en América Latina y al apoyo que brinda al dictador nicaragüense, Daniel Ortega.
Desde la llegada del presidente Donald Trump las sanciones se han endurecido. Una de estas abre la puerta a leyes que permiten demandas en tribunales estadounidenses por bienes expropiados tras la revolución.
No obstante, las restricciones de ingreso a Cuba son uno de los componentes más contundentes en la política contra Miguel Díaz Canel.
El departamento del tesoro comunicó que EE.UU. no permitirá los viajes culturales y educativos de contacto con el pueblo cubano. También se restringieron las visitas a la isla a través de cruceros y yates, así como de aviones privados y corporativos.
Las exportaciones de aviones y barcos, tanto privados o pertenecientes a empresas, también están bloqueadas.
Sin embargo, aún existen algunas categorías que permiten el ingreso de ciudadanos estadounidenses a la isla, tales como visitas médicas o religiosas, visitas gubernamentales, de trabajos de investigación o proyectos educativos, entre otras.
De hecho, recientemente el gobierno estadounidense prohibió el uso de fondos federales para promover programas de intercambios culturales con Cuba y otras naciones, por su incumplimiento en los requisitos básicos para combatir el tráfico humano.
El documento firmado a mediados de octubre dice, “Estados Unidos no proporcionará asistencia no humanitaria ni relacionada con el comercio ni permitirá que los funcionarios o empleados de los Gobiernos de Cuba, la República Popular Democrática de Corea (RPDC), y Rusia participen en programas de intercambio educativo y cultural, y Siria para el año fiscal 2020 hasta que dichos gobiernos cumplan con los estándares mínimos de la Ley para la eliminación del tráfico o hagan esfuerzos significativos para cumplir con los estándares mínimos”.
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