Australia proporcionará 68 millones de dólares a Fiji para ayudar con las mejoras de su aeropuerto en medio de las acciones en la región del Pacífico Sur contra la hegemonía invasora de Beijing.
El Fondo Australiano de Financiamiento de Infraestructura para el Pacífico (AIFFP), respaldado por el gobierno, se asociará con ANZ Bank para respaldar las mejoras estructurales en el Aeropuerto Internacional de Nadi, con el fin de aumentar la capacidad de pasajeros y ayudar a la nación a recuperarse del COVID-19.
Zed Seselja, ministro del Pacífico, dijo que Australia estaba comprometida en apoyar al Pacífico Sur con proyectos de infraestructura «de alta calidad y asequibles».
«Este proyecto es un gran ejemplo de por qué Australia estableció el AIFFP», dijo Seselja en un comunicado a The Epoch Times.
«El paquete de préstamos y garantías de Australia permitirá que los aeropuertos de Fiji continúen desarrollándose en medio de la pandemia, frente a la próxima reapertura de la frontera internacional de Fiji».
La directora ejecutiva de ANZ Bank, Shayne Elliott, dijo: «ANZ desempeña un papel importante al conectar a los clientes con las crecientes oportunidades comerciales y de inversión en toda la región».
«Invertir en infraestructura que aumente la capacidad de pasajeros una vez que se reanuden los viajes internacionales es fundamental para impulsar el futuro crecimiento de Fiji», dijo en un comunicado (pdf).
La financiación al aeropuerto será el cuarto proyecto apoyado por la AIFFP, que depende del Departamento de Relaciones Exteriores y Comercio de Australia. Hasta ahora, el organismo ha financiado cinco proyectos en la región, incluida una granja solar en Papúa Nueva Guinea, un cable submarino para Palau y un sistema de energía hidroeléctrica en las Islas Salomón.
El AIFFP fue establecido en 2018 bajo el mandato del primer ministro Scott Morrison, es parte del Pacific Step-up, que se estableció tras las preocupaciones generadas por la influencia de Beijing en la región del Pacífico Sur al otorgar préstamos de bajo costo a las naciones insulares.
El último anuncio se produce después que se supiera, en julio, que el gobierno australiano y el gigante de las telecomunicaciones Telstra estaban trabajando juntos en una posible oferta para comprar las redes móviles de Digicel, una empresa de telecomunicaciones global con intereses principalmente en la región del Pacífico y el Caribe.
Los expertos le dijeron a The Epoch Times que a pesar de que el acuerdo no era comercialmente viable, el gobierno todavía estaba dispuesto a financiar una posible adquisición de la compañía para evitar cualquier posible oferta de Beijing.
La región del Pacífico Sur ha sido el centro de una competencia territorial entre los aliados democráticos y Beijing. El Partido Comunista Chino (PCCh) ha utilizado iniciativas como La Franja y la Ruta (BRI), donaciones de vacunas e influencia diplomática para obtener el apoyo de los líderes de las islas del Pacífico.
La respuesta de las naciones del Pacífico ha variado, con algunas naciones abrazando los lazos con Beijing y otras rechazándolo rotundamente.
El fin de semana, la nueva primera ministra de Samoa, Fiame Naomi Mata’afa, se mantuvo firme en su promesa de desechar un desarrollo portuario de USD 100 millones promovido por Beijing, mediante el BRI, cerca de la capital del país.
La postura de la primera ministra supuso un cambio importante con respecto al actual líder de Samoa, Tuilaepa Sailele Malielegaoi, quien, durante la mayor parte de sus dos décadas de gobierno, ha mantenido estrechos vínculos con el PCCh.
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