El fiscal general de Estados Unidos, William Barr, reiteró el jueves la importancia de apoyar a los hombres y mujeres estadounidenses vestidos de azul en medio de un aumento de los ataques a policías y muertes por suicidio.
Barr dijo dirigiéndose a los oficiales en cumplimiento de la ley, que Estados Unidos tiene la «obligación moral» de apoyar el bienestar de las fuerzas del orden quienes han estado enfrentando un aumento de desafíos en los últimos años para mantener a los estadounidenses seguros. Además señaló que la administración Trump está comprometida a contrarrestar y superar estos problemas.
El fiscal subrayó que el papel de un oficial de policía conlleva un gran grado de peligro, que se ve exacerbado por el «surgimiento de una actitud profundamente perturbadora hacia la policía», en la que la gente «trata de utilizar a los oficiales de policía como chivo expiatorio y faltarles el respeto» o «menospreciar el rol vital» que los oficiales de policía desempeñan en la sociedad.
Los agentes de policía se están enfrentando a un aumento de las agresiones en los últimos años, incluidas las agresiones físicas, resaltó Barr, destacando que estas agresiones contra los agentes han aumentado alrededor del 20% hasta llegar a unas 60,000 por año. Además dijo que 106 oficiales murieron en incidentes en cumplimiento del deber en 2018, según datos del FBI y el número de incidentes del año pasado aumentó a 134 muertes de oficiales.
Junto con los ataques, los oficiales también deben combatir una serie de incidentes que se derivan de una serie de patologías sociales, incluyendo enfermedades mentales, hogares rotos y abuso de drogas, que podrían infligir en ellos graves traumas así como conducir a problemas de salud física basados en el estrés, como la presión arterial alta.
«Los oficiales están viendo el peor lado de la sociedad. Lo que están viendo hoy es peor que nunca, y lo están viendo cada vez más», declaró el fiscal general durante el Simposio de la Asociación Internacional de Jefes de Policía para la Seguridad y el Bienestar de los Oficiales.
A su vez repitió su preocupación por el aumento de las muertes de los policías por suicidio, diciendo que el índice de suicidios entre las fuerzas del orden y los bomberos es de un 40 por ciento más alto que el promedio nacional. En todo el país, el riesgo de suicidio entre los agentes de policía es un 54 por ciento mayor que el de otros trabajadores (pdf), según un análisis de 2019 de los datos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) presentado por el Dr. John Violanti, quien investiga el estrés y el suicidio de los policías.
Violanti señaló que al menos 228 agentes se habían quitado la vida en 2019, lo que significa un aumento del 44 por ciento con respecto al año anterior.
«Estas son estadísticas asombrosas. Hay que hacer mucho más. Nuestros hombres y mujeres que llevan la placa son algunos de los más fuertes y valientes de nuestro país. Además, como el resto de nosotros, hay momentos en sus vidas en los que necesitan apoyo», dijo el investigador. «Tenemos la obligación moral de hacer todo lo que podamos para apoyar a los hombres y mujeres que nos mantienen a salvo».
En enero, Barr puso en marcha una comisión nacional destinada a abordar los problemas de la aplicación de la ley que afectan a su capacidad para vigilar la comunidad, conocida como la Comisión Presidencial de Aplicación de la Ley y Administración de Justicia, bajo la dirección del presidente Donald Trump. Uno de los objetivos de la comisión sería estudiar los problemas a que se enfrentan los agentes de represión en relación con su salud mental y física, como el suicidio de los agentes de policía.
La administración también ha tomado otras medidas para abordar la cuestión del suicidio de la policía, incluida la firma de la Ley bipartidista de Apoyo y Tratamiento de Oficiales en Crisis (STOIC), que proporciona financiación para programas de prevención de suicidios y servicios de salud mental para los oficiales de policía.
Mientras expresaba sus preocupaciones sobre el suicidio policial, Barr compartió una historia personal sobre una trabajadora social que ayudó a su familia durante la batalla contra el cáncer de su hija, alentando a las fuerzas del orden y a los veteranos a buscar ayuda cuando la necesiten.
«Todo el mundo pasa por un período en el que tiene alguna dificultad y podría necesitar apoyo», dijo.
Su descripción se refirió a sus propias experiencias en las que la trabajadora social fue asignada por un hospital de Boston para ayudar a su hija menor Meg y a su familia a superar los momentos difíciles.
«Mi impulso inmediato fue: ‘Oye, somos una familia fuerte, no necesitamos un trabajador social'», recordó, y confesó que «ella fue una de las cosas más grandes que nos pasó durante este período de seis meses cuando estábamos en Boston».
«Ella era solo una bendición», añadió. «Así que entiendo el instinto de decir que no necesitamos ayuda, pero es una de las cosas que tenemos que trabajar en la comunidad» para superarlo, «para hacer frente a este problema».
Sobre el apoyo a la aplicación de la ley añadió además que este debe provenir del pueblo estadounidense, lo que sugiere que es necesario mostrar más respeto por los oficiales.
«Deberíamos mostrar a nuestros oficiales de policía la misma gratitud que mostramos a nuestros soldados», dijo. «Los soldados protegen a nuestro pueblo luchando contra nuestros enemigos en el extranjero, mientras que la policía cuida a nuestro pueblo protegiéndolo aquí en casa».
Barr, quien es conocido por su enfoque duro contra el crimen, ha defendido repetidamente a los oficiales de policía en discursos y artículos de opinión.
***
Descubra
El macabro negocio multimillonario que está financiando al régimen comunista en China
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.
