El presidente Joe Biden reconoció el martes que los precios de la gasolina en EE.UU. pueden seguir aumentando debido a sus sanciones a los activos rusos y dijo que “defender la libertad tendrá costos”.
“Como dije la semana pasada, defender la libertad tendrá costos también para nosotros y aquí en casa. Necesitamos ser honestos al respecto”, dijo Biden en la Casa Blanca. “Pero mientras hacemos esto, tomaré medidas enérgicas para asegurarme de que el dolor de nuestras sanciones esté dirigido a [la] economía rusa, no a la nuestra”, continuó.
Desde que Biden asumió el cargo el año pasado, los precios de la gasolina han aumentado constantemente en Estados Unidos, alcanzando cerca de USD 5 por galón en algunas áreas. Sus críticos han dicho que la afluencia de precios se debe, en parte, a que cerró el oleoducto Keystone XL y no renovaría los arrendamientos de perforación ya que la administración ha presionado por los vehículos eléctricos.
El presidente dijo que intentará idear un plan para “limitar el dolor” que sienten los estadounidenses en las bombas de gasolina tras las sanciones contra Rusia, uno de los principales productores mundiales de petróleo y gas natural. Rusia es un importante proveedor de petróleo a los Estados Unidos, ocupando el puesto número 2 entre los proveedores extranjeros de petróleo el año pasado.
“Estamos monitoreando de cerca los suministros de energía para detectar cualquier interrupción. Estamos ejecutando un plan en coordinación con los principales consumidores y productores de petróleo hacia una inversión colectiva para asegurar la estabilidad en los suministros energéticos globales”, comentó Biden el martes. “Esto reducirá los precios de la gasolina”.
El ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Sergei Lavrov, descartó anteriormente la amenaza de sanciones.
“Nuestros colegas europeos, estadounidenses, británicos no se detendrán y no se calmarán hasta que hayan agotado todas sus posibilidades para el llamado castigo a Rusia”, dijo.
Anteriormente, Biden dijo que sancionaría la deuda soberana rusa y a algunas élites rusas, así como el banco ruso VEB y un banco militar. Esas sanciones se emitieron después de que el presidente ruso Vladimir Putin reconoció formalmente a dos regiones disidentes de Ucrania como naciones independientes y firmó una orden para enviar tropas rusas al área.
Biden también firmó el lunes una orden ejecutiva que bloquea el flujo de nuevas inversiones, comercio y financiamiento estadounidenses hacia las llamadas repúblicas populares de Donetsk y Lugansk, que han estado en manos de separatistas prorrusos desde 2014. Las áreas separatistas se separaron poco después de que Rusia anexó la península de Crimea, una medida que también provocó sanciones bajo la administración de Obama.
El presidente reiteró que no enviará tropas estadounidenses a Ucrania, pero prometió nuevos movimientos de tropas en los estados miembros de la OTAN.
“He autorizado movimientos adicionales de fuerzas y equipos estadounidenses ya estacionados en Europa para fortalecer a nuestros aliados bálticos, Estonia, Letonia y Lituania. Permítanme ser claro, estos son movimientos totalmente defensivos de nuestra parte. No tenemos intención de luchar contra Rusia”, dijo Biden.
Con información de Reuters.
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