El presidente Joe Biden condenó el 24 de junio un incidente antisemita ocurrido en una sinagoga de Los Ángeles durante el fin de semana.
Los vídeos difundidos en las redes sociales mostraban enfrentamientos entre manifestantes pro-palestinos antisemitas y contramanifestantes el 23 de junio ante la sinagoga Adas Torah, en el barrio de Pico-Robertson, de gran densidad judía. La policía tuvo que intervenir para poner fin a los disturbios.
«Estoy consternado por las escenas en el exterior de la sinagoga Adas Torah de Los Ángeles. Intimidar a los fieles judíos es peligroso, inconcebible, antisemita y antiamericano», publicó el presidente Biden en X, el 24 de junio.
«Los estadounidenses tienen derecho a protestar pacíficamente. Pero bloquear el acceso a un lugar de culto —e incurrir en violencia— nunca es aceptable», escribió.
Otros políticos también condenaron la violencia.
«Los violentos enfrentamientos frente a la sinagoga Adas Torah de Los Ángeles son terribles. No hay excusa para atacar un lugar de culto. Semejante odio antisemita no tiene cabida en California», publicó el gobernador de California, Gavin Newsom, en X.
La alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass, calificó lo ocurrido de «aborrecible» e «inaceptable». Dijo que le dijo al Departamento de Policía de Los Ángeles que aumentara su presencia en el barrio de Pico-Robertson y fuera de los lugares de culto en toda la ciudad.
«Quiero dejar claro que Los Ángeles no será un refugio para el antisemitismo y la violencia. Los responsables de cualquiera de ellos serán encontrados y rendirán cuentas», publicó en X.
Bass señaló que se estará «uniendo a la concejala Katy Yaroslavsky, al director ejecutivo de la Federación Judía de Los Ángeles, el rabino Noah Farkas, y a otros líderes religiosos y de las fuerzas del orden en una reunión comunitaria esta semana para hablar de los pasos que debemos dar juntos».
«No hay lugar para el antisemitismo ni la violencia en Los Ángeles, ni en ningún sitio. Condeno enérgicamente a los manifestantes que atacaron el templo Adas Torah y a sus miembros este fin de semana», publicó el senador Alex Padilla (D-California) en X, señalando que «no hay justificación para atacar una casa de culto o a su comunidad».
«Atacar una sinagoga, o atacar a los miembros de una sinagoga, es antisemita. Condeno enérgicamente a los manifestantes propalestinos que cometieron actos de antisemitismo al atacar la sinagoga Adas Torah y/o a sus fieles», publicó en X el vicepresidente del grupo demócrata de la Cámara de Representantes, Ted Lieu (D-Calif.), pidiendo que se procese a los implicados.
Se ha producido un repunte del antisemitismo desde que Hamás atacó Israel el 7 de octubre de 2023, en lo que fue el ataque más mortífero contra judíos en un solo día desde el Holocausto, según la Liga Antidifamación.
En noviembre, un manifestante judío, Paul Kessler, de 69 años, murió en un hospital tras un enfrentamiento con un manifestante propalestino por la guerra entre Israel y Hamás, en Thousand Oaks, un suburbio al noroeste de Los Ángeles.
Según el fiscal de distrito del condado de Ventura, Erik Nasarenko, Loay Abdelfattah Alnaji infligió personalmente «lesiones corporales graves» al Sr. Kessler, y fue acusado de homicidio involuntario y lesiones. Se ha declarado inocente.
Con información de The Associated Press.
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