El presidente Joe Biden aprobó una declaración de desastre grave para California luego de tormentas que han dejado al menos 19 personas muertas debido a inundaciones generalizadas, deslizamientos de tierra y otros incidentes meteorológicos adversos.
Se emitió una declaración similar en Alabama luego de que severas tormentas, vientos en línea recta y tornados azotaran Alabama el 12 de enero, según la Casa Blanca.
El sábado, Biden emitió una orden para proporcionar ayuda federal para complementar los esfuerzos de recuperación estatales, tribales y locales después de que olas de tormentas azotaran el estado a fines de diciembre como parte de lo que dijo el Servicio Meteorológico Nacional (NWS, por sus siglas en inglés) es un “río atmosférico”.
“La acción del presidente pone fondos federales a disposición de las personas afectadas en los condados de Merced, Sacramento y Santa Cruz”, dijo la Casa Blanca en un comunicado. “Los fondos federales también están disponibles para los gobiernos estatales, tribales y locales que reúnan los requisitos y ciertas organizaciones privadas sin fines de lucro sobre una base de gastos compartidos para el trabajo de emergencia en los condados de Merced, Sacramento y Santa Cruz».
El NWS dijo que se esperan más lluvias el domingo y el lunes en algunas partes de California, según un boletín del domingo. Sin embargo, después de ello, se anticipa un clima más seco en gran parte del estado.
“La lluvia costera/valle de menor elevación y la fuerte nevada de montaña de gran altura continúan expandiéndose por el oeste a medida que múltiples sistemas de tormentas afectan la región”, dijo la agencia. “El primer sistema que trajo más lluvias intensas e inundaciones en California el sábado se está desplazando a través de la Gran Cuenca y hacia las Montañas Rocosas hoy por delante de otro sistema que se mueve en el Pacífico a principios del lunes».
Se pronosticaron hasta dos pulgadas de lluvia para el ya empapado Valle de Sacramento, donde se ordenó la evacuación de los residentes de la zona semirrural de Wilton, hogar de unas 5000 personas, mientras el río Cosumnes seguía creciendo. Se esperaban otras tres pulgadas de nieve y ráfagas de viento en Sierra Nevada. La Interestatal 80, una carretera clave desde el Área de la Bahía de San Francisco hasta las estaciones de esquí de Lake Tahoe, reabrió luego de haber estado cerrada la mayor parte del sábado debido a las carreteras resbaladizas, la nieve y las condiciones de tormenta blanca.
El laboratorio de nieve de la Sierra Central de la Universidad de California en Berkeley publicó en las redes sociales el domingo por la mañana que había recibido 21.5 pulgadas de nieve en 24 horas. Se esperaba que su capa de nieve de unos 3 metros creciera varios metros más para el lunes.
Los informes dicen que al menos 19 personas han muerto por incidentes relacionados con la tormenta en las últimas tres semanas. Algunos murieron en desprendimientos de rocas, árboles caídos o inundaciones, según los informes.
Más de 68,000 clientes de servicios públicos se encontraban sin electricidad hasta el sábado por la mañana, un número que se redujo a más de la mitad durante la tarde, según Poweroutage.us. Ese número se redujo a unos 12,000 el domingo por la tarde, según muestra el sitio web.
El sábado, la crecida del río Salinas inundó tierras de cultivo en el condado de Monterey y, al este, había alertas de inundación en el condado de Merced, en el Valle Central agrícola, donde el gobernador Gavin Newsom visitó para hacer balance de los problemas causados por la tormenta.
“La realidad es que esto es solo la octava parte de lo que anticipamos serán nueve ríos atmosféricos—no hemos terminado”, dijo Newsom en una sesión informativa con líderes locales donde instó a las personas a estar atentas a la seguridad durante las próximas 24 a 48 horas.
En una visita a Montecito el viernes, Newsom pidió a los residentes que tuvieran cuidado y que prestaran atención a las advertencias de los funcionarios de seguridad pública. «Sé lo cansados que están todos», dijo Newsom. “Solo mantengan un poco más de vigilancia en el transcurso del próximo fin de semana».
Sequía
Las olas de tormentas y lluvias han reducido la intensidad de la sequía en California, según el último informe del Monitor de sequía de EE. UU. Gran parte del estado está catalogado como en una sequía moderada o severa, ya que algunas partes del estado se consideraron «extremas» hace dos semanas.
“La buena noticia es que [los embalses] están fuera de los mínimos históricos”, dijo Michael Anderson, funcionario del Departamento de Recursos Hídricos del estado, el miércoles a los periodistas. «El reto es que aún tienen mucho que recuperar antes de volver a las condiciones normales de funcionamiento—así que hay que tenerlo en cuenta».
Mientras tanto, un funcionario dijo que había una gran diferencia entre lo que el Centro de Predicción Climática de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica había pronosticado para el invierno y lo que realmente sucedió. La agencia pronosticó lluvias y nevadas por debajo de lo normal en el sur de California y dijo que el norte de California vería niveles de precipitación promedio.
«No se tenía ni idea de cómo va a ser el invierno el 1 de diciembre porque nuestras previsiones estacionales son muy malas», dijo Jeffrey Mount, miembro principal del Centro de Políticas del Agua del Instituto de Políticas Públicas de California al Washington Post. “Simplemente no son lo suficientemente confiables para tomar decisiones definitivas sobre el suministro de agua”.
Con información de The Associated Press.
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