La Casa Blanca enviará varios funcionarios a la frontera entre Estados Unidos y México debido al aumento de inmigrantes ilegales en las últimas semanas. El incremento de inmigrantes en la frontera provocó advertencias de funcionarios locales y miembros de la Cámara sobre una inminente crisis humanitaria.
“El presidente Biden les ha pedido a miembros de alto rango de su equipo que viajen a la región fronteriza para que le brinden información completa sobre la respuesta del gobierno a la afluencia de menores no acompañados, y para que hagan una evaluación de los pasos adicionales que se pueden tomar para garantizar la seguridad y cuidado de estos niños”, dijo el jueves el portavoz de la administración Biden, Vedant Patel, en un comunicado a los medios.
Patel no dijo quién viajará a la zona, a qué parte especifica se dirigirán o cuándo se llevará a cabo. El portavoz dijo que, por cuestiones de seguridad, no se brindarían detalles específicos.
Según la oficina del representante Henry Cuellar (D-Texas), solo en el sector de la Patrulla Fronteriza de Del Rio, más de 10,000 inmigrantes ilegales han sido detenidos por agentes en la última semana.
El aumento llevó al equipo del presidente Joe Biden a reabrir una instalación de Texas para albergar a jóvenes inmigrantes ilegales, la cual se utilizó durante la administración Trump, lo que provocó una reacción violenta de los grupos de izquierda.
El secretario de Estado Antony Blinken y otros funcionarios de la administración Biden han instado a los inmigrantes ilegales centroamericanos a no venir a la frontera sur. Los republicanos y los halcones de la inmigración han dicho que la anulación, por cuenta de Biden, a políticas de la era Trump ha fomentado una mayor inmigración ilegal.
Mientras tanto, Biden le dijo a la prensa que lo que está ocurriendo en la frontera no es una crisis.
«No, seremos capaces de manejarlo, si Dios quiere», comentó Biden.
«Lo que estamos viendo ahora en la frontera es el resultado inmediato del desmantelamiento del sistema [anterior] y del tiempo que lleva reconstruirlo virtualmente desde cero», dijo a la prensa el secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, sugiriendo que la administración anterior tuvo la culpa.
Los agentes de la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos capturaron a más de 4500 inmigrantes ilegales que cruzaban la frontera entre Estados Unidos y México el miércoles, según cifras del gobierno compartidas con Reuters. La elevada cifra de inmigrantes capturados ese día ocurre cuando están aumentando los temores de que las entradas ilegales puedan aumentar en las próximas semanas.
Mientras tanto, Cuéllar dijo que hay inmigrantes ilegales retenidos que no reciben pruebas de COVID-19, la enfermedad causada por el virus del PCCh. Un portavoz de la oficina del alcalde, en la ciudad fronteriza de Brownsville, en Texas, dijo que más de 100 inmigrantes ilegales fueron liberados de la custodia federal a pesar de haber sido diagnosticados como portadores del virus del PCCh. Algunos de los inmigrantes que fueron liberados y que tenían el virus le dijeron a un noticiero de Telemundo que planeaban dirigirse a otros estados, como Nueva Jersey o Carolina del Norte.
Reuters contribuyó a este artículo.
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