WASHINGTON— El presidente Joe Biden viajó este domingo para inspeccionar la devastación causada en la costa del Golfo de Florida por el huracán Milton, mientras instaba al Congreso a aprobar fondos adicionales de emergencia para desastres.
La visita de Biden a Florida le ofrece otra oportunidad de presionar al presidente de la Cámara de Representantes, el republicano Mike Johnson, para que los legisladores le den más fondos antes de las elecciones del 5 de noviembre. Johnson dijo que el tema se tratará después de las elecciones.
«Yo creo que el presidente Johnson va a recibir el mensaje de que tiene que dar un paso adelante, en particular para las pequeñas empresas», dijo Biden a los periodistas mientras él y la candidata presidencial demócrata, la vicepresidenta Kamala Harris, se reunían el viernes con sus ayudantes para hablar de la respuesta federal a los huracanes Milton y Helene. Biden y Johnson aún no han hablado directamente del asunto.
En Florida, Biden tenía previsto anunciar 612 millones de dólares para seis proyectos del Departamento de Energía en zonas afectadas por los huracanes para mejorar la resistencia de la red eléctrica de la región, informó la Casa Blanca. La financiación incluye 94 millones de dólares para dos proyectos en Florida, que incluyen 47 millones a Gainesville Regional Utilities y 47 millones a Switched Source, para asociarse con Florida Power and Light.
Harris visitó Raleigh el sábado para reunirse con los líderes negros electos, y los religiosos, y para ayudar a los voluntarios a empaquetar artículos de cuidado personal destinado a las víctimas de Helene en el oeste del estado.
La vicepresidenta pasó el domingo en Greenville, donde tenía previsto pronunciar un discurso durante un servicio religioso en el marco de su campaña «Souls to the Polls» (Las almas a las urnas), destinada a ayudar a los fieles negros a acudir a las iglesias antes del día de las elecciones. También tenía previsto celebrar un mitin para hablar de sus planes económicos y destacar el inicio, el día jueves, de la votación anticipada en el estado, dijo su campaña.
El presidente Biden está presionando para que el Congreso actúe rápidamente y se asegure de que la Administración de Pequeñas Empresas y la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA) tengan el dinero que necesitan para superar la temporada de huracanes, que termina el 30 de noviembre en el Atlántico. El viernes dijo que sólo Milton había causado unos daños estimados en 50,000 millones de dólares.
El secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, declaró la semana pasada que la FEMA podrá hacer frente a las «necesidades inmediatas» causadas por las dos tormentas. Pero advirtió tras el paso de Helene que la agencia no dispone de fondos suficientes para superar la temporada de huracanes.
Sin embargo, Johnson se opuso, afirmando que las agencias tienen suficiente dinero por el momento y que los legisladores abordarán la cuestión de la financiación durante la sesión de lame-duck después de las elecciones.
También están latentes las tensiones entre Harris y el gobernador de Florida, Ron DeSantis. La semana pasada, cuando Helene se dirigía hacia Florida, la vicepresidenta y el gobernador intercambiaron acusaciones de que el otro estaba tratando de politizar la respuesta federal a la tormenta.
La oficina de Harris sugirió la semana pasada que DeSantis estaba esquivando sus llamadas telefónicas. DeSantis respondió que no sabía que ella había llamado y se quejó de que ella no había participado en la respuesta del gobierno federal antes de convertirse en la candidata presidencial demócrata.
El presidente, por su parte, declaró que esperaba ver a DeSantis el domingo si la agenda del gobernador lo permitía.
«Él ha sido muy cooperativo», dijo Biden sobre DeSantis. «Nos llevamos muy, muy bien», agregó el presidente.
El gobernador DeSantis declaró el sábado que no tenía detalles sobre la visita del presidente.
El presidente Biden tenía previsto inspeccionar los daños durante un recorrido aéreo entre Tampa y St. Pete Beach, donde será informado sobre la tormenta por funcionarios federales, estatales y locales. También se reunirá con residentes y equipos de primera intervención.
El huracán Milton tocó tierra en Florida como tormenta de categoría 3 la noche del 9 de octubre. Al menos 10 personas murieron y cientos de miles de residentes siguen sin suministro eléctrico.
Las autoridades afirman que el número de muertos podría haber sido peor de no ser por las evacuaciones generalizadas. La devastación aún reciente causada por Helene apenas dos semanas antes probablemente ayudó a obligar a muchas personas a huir.
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