LAS VEGAS —El presidente Joe Biden tiene el claro objetivo de reforzar su apoyo entre los negros, los latinos y los trabajadores sindicalizados en Nevada, un estado clave indeciso.
En un momento en que las encuestas sugieren que su apoyo está disminuyendo entre los votantes de las minorías, unas 400 personas —muchas de ellas representantes de esos grupos— vitorearon y aplaudieron con entusiasmo al presidente Biden mientras pronunciaba un discurso de 30 minutos el 4 de febrero.
El presidente instó a la multitud a votar por él en las primarias demócratas del 6 de febrero. Pero no se enfrenta a ningún contrincante importante del partido, lo que hace que esa contienda sea en gran medida simbólica.
Así que el presidente Biden atacó a su presunto oponente republicano, el expresidente Donald Trump.
«Ustedes son la razón por la que Donald Trump es un expresidente… ¡y ustedes son la razón por la que haremos que Donald Trump vuelva a ser un perdedor!».
En 2020, el entonces candidato Joe Biden ganó Nevada por menos del 3%. El presidente Trump ha estado tratando de volcar el Estado de Plata a su favor.
Al mismo tiempo, el candidato independiente Robert F. Kennedy Jr. aspira a quitarles votos.
Los negros, los hispanos y los trabajadores sindicalizados son grupos a los que tanto el presidente Trump como el presidente Biden han estado cortejando más a medida que la esperada revancha entre ellos se ha ido haciendo cada vez más probable.
Esos grupos podrían ayudar a determinar qué candidato gana los seis votos del Colegio Electoral de Nevada. Aunque no parecen contar mucho para los 270 votos electorales necesarios para ganar la presidencia, incluso un pequeño número de votos electorales puede marcar la diferencia entre la victoria y la derrota en una carrera reñida.
El 4 de febrero, el presidente Biden apareció en un barrio predominantemente negro del histórico West Side de Las Vegas.
La zona es emblemática del espíritu empresarial negro, explicó el representante Steven Horsford (D-Nev.), antes de que el presidente subiera al escenario del Pearson Community Center.
El Sr. Horsford dijo que nació cerca de ese lugar, en el West Side, por lo que conoce bien la «historia histórica» de la zona.
En la década de 1950, cuando el famoso Strip de Las Vegas estaba en sus inicios, «la mayoría de los negros que se habían trasladado aquí venían experimentando los vestigios de la segregación de la que huían en el Sur», dijo.
«Como respuesta, el West Side se unió y creó su propio barrio comercial en Jackson Street, a pocas millas de donde estamos ahora», explicó Horsford a los asistentes.
La zona se convirtió en la cuna de casinos, hoteles y clubes sociales de propietarios negros que formaron el «West Side Strip».
«El histórico West Side también era conocido por gente trabajadora y servidores públicos, maestros y pastores, los primeros médicos negros y, por supuesto, propietarios de negocios», dijo el Sr. Horsford.
Instó al público a reelegir al presidente Biden, en quien confía para preservar y hacer avanzar ese legado.
Atribuyen a Biden el mérito de impulsar a las minorías
Magnolia Magat, copropietaria de Truffles N Bacon Cafe, que sirve comida estadounidense-filipina, ofreció un testimonio.
Elogió al presidente Biden por apoyar a pequeñas empresas como la suya. Afirmó que se aseguró de que recibieran financiación para mantenerse a flote durante la pandemia de coronavirus, y señaló que su negocio ha crecido de forma espectacular.
«El presidente Biden estuvo con nosotros», dijo la Sra. Magat, y añadió: «El presidente Biden siempre ha sido un defensor de las pequeñas empresas como Truffles N Bacon».
Durante su intervención, el presidente Biden se atribuyó el mérito de ofrecer incentivos a las pequeñas empresas negras y latinas, ayudándolas a crecer más rápido de lo que lo habían hecho en muchos años.
El presidente también dijo que había cumplido sus promesas de nombrar a minorías para puestos importantes.
Nombró a la primera mujer negra para la Corte Suprema de Estados Unidos, la jueza Ketanji Brown Jackson. También dijo que «nombró a más mujeres negras para los tribunales federales de apelación que todos los demás presidentes de la historia de Estados Unidos juntos».
Por ejemplo, entre los 175 jueces federales confirmados bajo la Administración Biden, dos tercios de ellos son «personas de color», dijo el presidente Biden.
Carolyn Salvador Avila, que es hispana, elogió al presidente Biden durante un discurso que precedió a sus declaraciones.
La Sra. Avila es una estudiante de la Universidad de Nevada Las Vegas que se desempeña como presidenta nacional de College Democrats of America.
«El historial de Trump no podría ser más diferente al de nuestro presidente [Biden] que lucha por los latinos y por los jóvenes de todo el país, ¿no es así?», preguntó. El público vitoreó su aprobación.
«Donald Trump pasó su tiempo en la Casa Blanca atacándonos», dijo la Sra. Avila, censurando los recortes de impuestos de Trump que, según ella, beneficiaron a los ricos «en lugar de a las familias trabajadoras de nuestra comunidad».
El «derecho a decidir», un tema de gran interés
El aborto también fue un tema importante que la Sra. Avila, el presidente Biden y otros abordaron en el evento.
«Él [Trump] ayudó a anular Roe vs Wade y poner en peligro los derechos de todas las mujeres. Eso no está bien», dijo Avila, mientras el público abucheaba.
Roe contra Wade fue una decisión judicial histórica que declaró legales la mayoría de los abortos. Pero bajo la administración del presidente Trump, la Corte Suprema de Estados Unidos anuló esa decisión, devolviendo la autoridad reguladora del aborto a los 50 estados individuales.
«Gracias, Joe —Joe Biden y [la vicepresidenta] Kamala Harris, por defender el derecho a elegir, el derecho de la mujer a proteger su cuerpo», dijo Ávila.
El presidente Biden reprendió al presidente Trump por «jactarse de anular otra libertad básica… el derecho de la mujer a elegir», refiriéndose al aborto.
Los jueces nombrados por Trump desempeñaron un papel fundamental en la decisión del caso Dobbs contra Jackson de 2022, que revocó el caso Roe contra Wade. Él se ha atribuido el mérito de ese fallo, calificándolo de victoria para el movimiento provida.
Los demócratas se han opuesto desde entonces. Pero algunos republicanos han abogado por una prohibición nacional del aborto. Si el Congreso aprobara una medida así, el presidente Biden declaró: «La vetaré».
El público aplaudió y vitoreó con fuerza cuando dijo eso. La multitud también respondió con entusiasmo cuando prometió: «Voy a traer de vuelta Roe contra Wade».
Promociona el empleo y evita la frontera
En un guiño a los trabajadores sindicados presentes en el acto de campaña, el presidente Biden también promocionó su apoyo a sus causas y sus esfuerzos de creación de empleo.
Afirmó que su administración impulsó la creación de unos 15 millones de nuevos puestos de trabajo, una cifra que, según los críticos, está inflada artificialmente. Dicen que los empleadores se vieron obligados a eliminar muchos puestos de trabajo durante el apogeo de la pandemia de coronavirus en 2020-21, por lo que los «nuevos» empleos son sólo para reemplazar a los que se perdieron.
Durante su discurso, el presidente Biden no hizo ninguna mención a la crisis fronteriza entre Estados Unidos y México, uno de los temas principales de la campaña presidencial de 2024.
El presidente Biden ha instado al Congreso a que le otorgue autoridad adicional para reprimir a los inmigrantes ilegales; se ha estado trabajando en un controvertido acuerdo.
Pero el presidente Trump dice que no se necesita tal acuerdo. Señala los datos que muestran que los cruces fronterizos ilegales disminuyeron durante su presidencia, lo que dice que es el resultado de una ofensiva que implementó usando los poderes presidenciales existentes.
El presidente Biden repitió su afirmación de que el presidente Trump está poniendo en riesgo la democracia con algunas de sus acciones, incluyendo «negarse a aceptar los resultados de una elección legítima».
El presidente Trump y muchos de sus partidarios afirman que creen que el presidente Biden ganó la presidencia mediante unas elecciones «robadas» o «amañadas» en 2020.
También replican que el presidente Biden y sus aliados demócratas son quienes amenazan la democracia al trabajar con las grandes empresas tecnológicas para censurar la libertad de expresión de los estadounidenses y perseguir a sus enemigos políticos, incluido el presidente Trump.
Este se enfrenta a 91 cargos penales; otros estadounidenses también han sido injustamente perseguidos, ha alegado.
El presidente Biden, que se ha distanciado de esos procesamientos pero dice que parecen justificados, dijo que los votantes deberían rechazar «la pesadilla de Donald Trump».
El portavoz de la campaña de Trump, Steven Cheung, dijo que el presidente Biden «ha sido una pesadilla para este país en sólo tres cortos años en la Casa Blanca».
«Ninguna cantidad de gaslighting hará que los estadounidenses se olviden de toda la miseria y la destrucción que ha traído», dijo a The Associated Press.
El presidente Trump ha afirmado que la economía fue mejor bajo sus políticas y que los estadounidenses disfrutaron de precios más bajos para comestibles, gasolina y otros productos esenciales.
Pero el presidente Biden ha hecho alarde de la «Bidenomía», afirmando que sus políticas crearon puestos de trabajo y ayudaron a la nación a recuperarse de la pandemia.
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