El presidente Joe Biden invitó el viernes a visitar la Casa Blanca a los tres demócratas de Tennessee que se enfrentaron a la expulsión por realizar una manifestación en la sala de la Cámara estatal.
Tras varias horas de debate el jueves, dos de los tres demócratas del estado fueron expulsados de la Asamblea General de Tennessee por la Cámara de Representantes, controlada por los republicanos.
Los legisladores fueron acusados de participar en un «comportamiento desordenado» que trajo «desorden y deshonor a la Cámara de Representantes», según una resolución presentada por los republicanos de Tennessee.
Los representantes estatales Justin Jones, de Nashville, y Justin Pearson, de Memphis, fueron expulsados. Gloria Johnson, del condado de Knox, fue la única diputada que participó en la protesta y se libró de la expulsión, después de que ocho republicanos traspasaran la línea partidista para salvarla.
Durante una videoconferencia desde Camp David el viernes, Biden agradeció a los legisladores su acto de protesta. El presidente también expresó su decepción por su expulsión de la Asamblea de Tennessee.
«Más temprano, hablé con los representantes Jones, Pearson y Johnson para agradecerles su liderazgo y valentía ante un flagrante desprecio de los valores democráticos de nuestra nación», escribió Biden en Twitter. «Nuestro país necesita tomar medidas contra la violencia armada —para ello necesitamos más voces como la suya».
La Casa Blanca dijo en una declaración que el trío de demócratas agradeció al presidente su «liderazgo en la búsqueda de la prohibición de las armas de asalto y la defensa de nuestros valores democráticos» y por su apoyo mientras se enfrentaban a «ataques sin precedentes» por sus acciones.
No se ha dado ninguna fecha oficial para la visita a la Casa Blanca.
Los dos demócratas expulsados pueden ser nombrados por funcionarios de sus respectivos condados para ocupar sus escaños nuevamente. Ambos miembros representan bastiones demócratas en Nashville y Memphis. No pueden ser expulsados de nuevo por las mismas ofensas, dijeron los miembros durante el debate del jueves.
Protesta por la restricción de armas
En otra declaración difundida por la Casa Blanca, Biden afirmó que la mayoría de los estadounidenses quieren un control más estricto de las armas.
«La expulsión de hoy de los legisladores que participaron en una protesta pacífica es chocante, antidemocrática y sin precedentes», dijo Biden en la declaración. «En lugar de debatir los méritos de la cuestión, estos legisladores republicanos han optado por castigar, silenciar y expulsar a representantes debidamente elegidos por el pueblo de Tennessee».
Biden también acudió a Twitter para expresar su apoyo a los legisladores.
«Nuestro país tiene que tomar medidas contra la violencia armada, y para ello necesitamos más voces como la suya», escribió Biden. Además, condenó la expulsión de los legisladores como «escandalosa, antidemocrática y sin precedentes».
Solo otros dos legisladores del estado de Tennessee han sido expulsados de forma similar desde la Guerra Civil. Sin embargo, esas votaciones fueron mayoritariamente bipartidistas, mientras que la votación del jueves siguió mayoritariamente la línea de los partidos.
El 3 de abril, Jones, Pearson y Johnson fueron oficialmente censurados por sus manifestaciones y despojados de sus cargos en las comisiones. Esto se produjo después de que cientos de manifestantes abarrotaran el Capitolio estatal y su galería el 30 de marzo.
Los manifestantes pedían restricciones más estrictas del derecho a las armas tras el tiroteo de la Covenant School de Nashville, donde Audrey Elizabeth Hale, de 28 años, que según la policía se identificaba como transexual, abrió fuego en la escuela, matando a tiros a tres niños de 9 años y a tres adultos.
Los tres demócratas desafiaron las convenciones al dirigirse a la parte delantera de la Cámara de Representantes con un megáfono, donde animaron a la multitud en la tribuna y dirigieron cánticos, lo que supuso una infracción de las normas de la Cámara, ya que no habían sido invitados a hablar.
En su declaración, Biden instó al Congreso a prohibir las «armas de asalto» y los cargadores de gran capacidad, exigir el almacenamiento seguro de las armas de fuego, eliminar la inmunidad de responsabilidad de los fabricantes de armas y exigir la comprobación de antecedentes para todas las ventas de armas. También pidió a las autoridades estatales que hagan lo mismo.
El presidente argumentó que la mayoría de los estadounidenses quieren que los legisladores promulguen más restricciones sobre los derechos de armas y acusó a los funcionarios republicanos de Estados Unidos de repetir proyectos de ley que, según él, hacen que las escuelas, los lugares de culto y las comunidades sean menos seguros.
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