WASHINGTON—Los legisladores demócratas, que regresaban de su receso por el feriado del 4 de julio, se encontraron el 8 de julio con una contundente carta del presidente Joe Biden, que afirmaba inequívocamente que no tiene intención de hacerse a un lado y que está “corriendo esta carrera hasta el final”.
Esa misma mañana, el presidente llamó al programa “Morning Joe” de MSNBC y reafirmó su postura.
“No me voy a ninguna parte”, dijo el presidente Biden.
Los comentarios del presidente se produjeron después de los esfuerzos muy publicitados de un puñado de legisladores y expertos de los medios para sacarlo de la carrera presidencial tras su debate del 27 de junio con el expresidente Donald Trump.
“No me postularía si no creyera absolutamente que soy el mejor candidato para vencer a Donald Trump en 2024”, dijo durante la entrevista de MSNBC.
“No me importa lo que piensen esos peces gordos”, dijo el presidente, refiriéndose a los medios de comunicación y expertos que recientemente le han pedido que abandone la carrera.
El presidente Biden criticó a los medios de comunicación por subestimar su desempeño y afirmó: “Se equivocaron en 2020. Se equivocaron en 2022 sobre la ola roja”.
Pidió a los expertos de los medios de comunicación que lo siguieran de cerca y observaran cómo los votantes reaccionan a él durante las campañas y se formaran una opinión después.
El gobernador de Maryland, Wes Moore, quien ha expresado su continuo apoyo al presidente Biden, criticó los recientes llamados de los medios y los legisladores para que el presidente se haga a un lado y los calificó como “antidemocráticos”.
“El pueblo estadounidense se ha pronunciado. Él es el candidato, y cualquier intento de sacarlo es, en realidad, una falta de respeto al proceso democrático”, le dijo a The Epoch Times.
Desde el primer debate, el presidente Biden ha estado buscando activamente apoyo. Como parte de este esfuerzo, el presidente participó en una llamada con el Comité Nacional de Finanzas del Fondo de Victoria de Biden el 8 de julio, junto con Moore, según la campaña de Biden.
El objetivo de la llamada era centrarse en el futuro y escuchar la visión del presidente, dijo Moore.
“Creo que las personas en la llamada apreciaron su honestidad sobre el hecho de que no tuvo una buena noche”, dijo, refiriéndose a la actuación del presidente en el debate del 27 de junio.
David Carlucci, estratega demócrata y exsenador del estado de Nueva York, estuvo de acuerdo con el llamado del presidente a la unidad y señaló que “la única dirección para los demócratas es hacia adelante”.
Advirtió que empezar desde cero con un nuevo candidato dañaría el impulso del partido, particularmente en estados clave.
“A algunos medios de comunicación les encanta presentar esto como un escenario apocalíptico en el que todo el partido se volvería contra el presidente”, dijo Carlucci a The Epoch Times.
“Sí, algunos legisladores han expresado sus preocupaciones, pero no son voces influyentes como las del líder de la minoría de la Cámara de Representantes Jeffries, el líder de la mayoría del Senado Schumer o la expresidenta Pelosi”.
“Desafíame en la Convención”
Tras el primer debate en los estudios de la CNN en Atlanta, un pequeño número de demócratas de la Cámara de Representantes, tanto en privado como en público, han estado instando al presidente a que abandone la carrera. El representante Lloyd Doggett (D-Texas) fue el primero en adoptar esta postura.
Aunque los demócratas del Senado en general han guardado silencio sobre el asunto, hubo informes de que el senador Mark Warner (D-Va.) estaba intentando organizar un grupo de senadores para persuadir al presidente de que se retirara de la carrera.
“Me siento muy frustrado por las élites… en el partido”, dijo el presidente Biden durante su entrevista con MSNBC, diciendo que creen que “saben mucho más”.
Los invitó a “desafiarme en la convención” en agosto en Chicago si querían eliminarme de la carrera presidencial.
El representante Jerry Nadler (D-N.Y.), el demócrata de mayor rango en el Comité Judicial de la Cámara de Representantes, quien fue citado entre los legisladores que pidieron al presidente que pusiera fin a su candidatura, les dijo a los periodistas el 9 de julio que las preocupaciones sobre el presidente están “fuera de lugar”.
“Él será nuestro candidato y todos tenemos que apoyarlo”, dijo antes de una crucial reunión a puertas cerradas en el Capitolio.
El presidente también se dirigió a los donantes en su carta, diciendo: “No me importa lo que piensen los millonarios”.
Varios megadonantes del Partido Demócrata han apoyado los esfuerzos para pedirle al presidente Biden que abandone su intento de reelección. Entre estos donantes se encuentran Abigail Disney, heredera del gigante del entretenimiento Disney; Ari Emanuel, un destacado agente de talentos de Hollywood; y Reed Hastings, cofundador de Netflix.
Otros continúan apoyando su campaña de reelección, incluido el cofundador de LinkedIn, Reid Hoffman, la heredera inmobiliaria Amy Goldman Fowler, el multimillonario Mark Cuban y Alex Soros, hijo del multimillonario George Soros.
En la carta a los demócratas del Congreso, el presidente Biden los instó a unirse y avanzar como un partido unificado.
“Faltan 42 días para la Convención Demócrata y 119 días para las elecciones generales. Cualquier debilitamiento de la determinación o falta de claridad sobre la tarea que tenemos por delante solo beneficia a Trump y nos perjudica a nosotros”, escribió el presidente en la carta, distribuida por su campaña.
El estratega político Christopher Bruce estuvo de acuerdo y dijo que el presidente Biden ha presentado argumentos convincentes de por qué es el mejor candidato para ganar las elecciones de 2024.
“Su carta describe el proceso de las primarias; él ganó los votos y se merece ser el candidato presunto de aquí en adelante”, le dijo a The Epoch Times. “En mi opinión, él es como la mayoría de los estadounidenses, que están listos para dejar atrás este capítulo”.
Mientras tanto, la estratega demócrata Christy Setzer describió la situación como “complicada”.
“Hay buenos argumentos para que el presidente Biden mantenga su postura y dé un paso al costado en favor de la vicepresidenta Harris”, dijo Setzer a The Epoch Times en un correo electrónico.
“Sin embargo, hay una dinámica a su favor: a los votantes no les gusta cuando perciben un efecto de avalancha; a menudo, cuando eso sucede, se unen en torno al candidato [avalado]”, escribió Setzer.
“Quizás hayan pensado que la actuación de Biden en el debate fue mala, pero después de 10 días de una cobertura mediática brutal, hay una sensación de ‘ya es suficiente’”.
En respuesta a las consultas de los medios, el médico del presidente Biden, Kevin O’Connor, emitió una carta detallada el 8 de julio, explicando los motivos de las frecuentes visitas del Dr. Kevin Cannard a la Casa Blanca durante el último año. El Dr. Cannard es neurólogo en el Centro Médico Militar Nacional Walter Reed.
“Como he escrito en cada uno de los informes médicos del Presidente, como parte de su examen físico anual, el Presidente visita a un equipo de especialistas que incluye optometría, odontología, ortopedia (pie y tobillo), ortopedia (columna vertebral), fisioterapia, neurología, medicina del sueño, cardiología, radiología y dermatología”, escribió el Dr. O’Connor.
“El Dr. Cannard fue el especialista en neurología que examinó al presidente Biden en cada uno de sus exámenes físicos anuales. Sus hallazgos se han hecho públicos cada vez que he publicado los resultados del examen físico anual del presidente”, escribió.
El Dr. O’Connor se refirió a su examen más reciente descrito en su carta de febrero, confirmando que el presidente no tiene síntomas de un trastorno neurológico, incluido el Parkinson.
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