El presidente electo Joe Biden, su esposa Jill Biden, la vicepresidenta electa Kamala Harris y su esposo Douglas Emhoff asistieron a una misa el Día de la Inauguración.
También asistieron junto con ellos a la Catedral de San Mateo el Apóstol los líderes de la Cámara de Representantes y del Senado, los representantes Kevin McCarthy (R-Calif.) y Nancy Pelosi (D-Calif.) y los senadores Chuck Schumer (D-N.Y.) y Mitch McConnell (R-Ky.).
La catedral es la sede del Arzobispo de la Arquidiócesis Católica Romana de Washington.
Está programado que Biden y Harris presten juramento alrededor del mediodía. Él se supone que dará un discurso inaugural a la pequeña audiencia que asiste a la ceremonia, mientras unos 25,000 soldados de la Guardia Nacional están situados en la capital de la nación en un intento de prevenir que se repitan los disturbios del 6 de enero en el Capitolio.
La secretaria de prensa entrante de la Casa Blanca, Jen Psaki, dijo a CNN el miércoles pasado que el discurso inaugural de Biden sería «mirando hacia el futuro».
«Así que va a hablar de los problemas que estamos enfrentando, la decisión del público de unirse, el poder de unirse y unificarse», dijo.
Después, Biden y Harris recorrerán las tropas en las afueras del Capitolio de EE.UU. y visitarán el Cementerio Nacional de Arlington en Virginia. Biden también planea firmar una serie de órdenes ejecutivas antes de terminar el día.
El presidente Donald Trump salió de Washington el miércoles por la mañana. Predijo que la administración de Biden tendría éxito, diciendo: «Tienen los cimientos para hacer algo realmente espectacular». No se espera que Trump ni el vicepresidente Mike Pence asistan a las ceremonias de inauguración.
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