El presidente Joe Biden afirmó el lunes que «ya no habrá gasoducto Nord Stream 2» hacia Europa si Rusia invade Ucrania.
En una conferencia de prensa conjunta con el canciller alemán, Olaf Scholz, el 7 de febrero, los dos líderes mostraron un frente unido al plantear la amenaza de sanciones «de gran alcance y severas» contra Rusia si ésta se moviliza para invadir Ucrania.
Tanto Biden como Scholz describieron un enfoque de doble vía: pedir una vía diplomática con Rusia y, al mismo tiempo, preparar sanciones para imponerlas rápidamente contra Rusia en caso de invasión.
«Si Rusia invade, eso significa que los tanques o las tropas cruzan la frontera de Ucrania. Entonces ya no habrá Nord Stream 2», dijo Biden. «Le pondremos fin».
Al preguntársele sobre cómo se hará esto cuando el gasoducto esté bajo control alemán, Biden dijo: «Les prometo que seremos capaces de hacerlo».
Los funcionarios estadounidenses han hecho esta amenaza en repetidas ocasiones, pero sin un compromiso firme por parte de Alemania.
Tanto Biden como Scholz optaron por dejar cierta ambigüedad en cuanto al alcance de las sanciones acordadas.
«Es parte de este proceso que no lo expliquemos todo en público, porque Rusia podría entender que es posible que haya aún más», explicó Scholz.
El proceso de aprobación del gasoducto Nord Stream 2 ha sido retrasado por Alemania. Si se aprueba, transportaría 55,000 millones de metros cúbicos de gas natural de Rusia a Alemania cada año.
En las últimas semanas, Rusia ha acumulado decenas de miles de tropas en su frontera con Ucrania y en Crimea y Bielorrusia, anexadas a Rusia.
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