Brandon Johnson, del partido demócrata progresista, prestó juramento el 15 de mayo como el alcalde número 57 de Chicago.
Johnson, de 47 años, sucede a la demócrata Lori Lightfoot, quien perdió en las primarias del 28 de febrero después de años de críticas a su gestión en temas que van desde COVID-19 hasta la seguridad pública. Tras una segunda vuelta, el 4 de abril Johnson derrotó a Paul Vallas, un demócrata moderado de 69 años.
El nuevo alcalde prestó juramento ante el juez principal de la Corte de Circuito del Condado de Cook, Timothy C. Evans, en una ceremonia de inauguración en el Credit Union 1 Arena de la Universidad de Illinois en Chicago. Además del Juramento de Lealtad y el himno nacional, la ceremonia incluyó el Himno Nacional Negro y un reconocimiento de que la tierra en la que se encuentra la arena fue robada a los nativos americanos.
La invocación estuvo a cargo del reverendo Dr. Otis Moss III, quien incluyó tonos políticos. Avery R. Young, poeta laureado de Chicago, recitó un poema esperanzador sobre la ciudad conocida como Ciudad de los Vientos. El rabino Shoshanah Conover del Templo Sholom de Chicago hizo una oración por Johnson, comparándolo con el personaje bíblico José. El imán Hassan Aly, del Consejo de Organizaciones Islámicas del Gran Chicago, hizo una oración de orientación para el alcalde.
Los funcionarios electos, incluidos los 50 concejales de Chicago, prestaron juramento antes que Johnson, quien fue abrazado por Lightfoot después de realizar sus actos finales como alcaldesa.
Johnson comenzó su día recorriendo el vecindario de Austin en el West Side de Chicago, donde él vive con su familia. Después de la ceremonia, tenía organizada una jornada de puertas abiertas en el ayuntamiento, donde los habitantes de Chicago podían conocerlo y saludarlo. Por la noche, Johnson asistirá a una gala en la arena para celebrar su toma de posesión.
Dos de los temas más importantes en la elección de alcalde fueron la educación y la seguridad pública.
Johnson se postuló con una plataforma firmemente a favor de las escuelas públicas, por lo que fue respaldado por el sindicato de Maestros de Chicago, mientras que Vallas se postuló con una agenda a favor de la elección de escuelas.
El alcalde ingresa al ayuntamiento con un sistema escolar público decepcionante en Windy City.
La tasa de graduación de la escuela secundaria en Chicago es solo del 78.4%, ya que los estudiantes han tenido dificultades para demostrar competencia en matemáticas y lectura. En el nivel de la escuela primaria, el puntaje de la prueba de competencia en matemáticas es del 21% y del 25% en lectura. En el nivel de la escuela intermedia, el puntaje de la prueba de competencia en matemáticas es del 21% y del 24% en lectura. En el nivel de la escuela secundaria, el puntaje de la prueba de competencia en matemáticas es del 23% y del 21% en lectura.
Johnson expresó su oposición a recortar los fondos de la ciudad para las escuelas.
En términos de lucha contra el crimen, fue criticado, incluso por parte de Vallas, por su apoyo anterior al movimiento «Defund the Police» (Desfinanciar a al Policía), al que Johnson en 2020 llamó un «objetivo político actual y concreto».
Como candidato buscó distanciarse de esa causa durante su carrera. En marzo, declaró a Laura Washington, analista política de la filial de ABC en Chicago, que «dijo que era un objetivo político. Nunca dije que era mío”.
“En cuanto a mi visión de la seguridad pública, no voy a desfinanciar a la policía”.
En el sitio web de su campaña, Johnson prometió “trabajar con la policía y los socorristas para invertir en intervenciones comunitarias que disminuyan el conflicto, reduzcan la violencia y hagan que nuestros vecindarios sean más seguros”. También prometió “crear una Oficina de Seguridad Comunitaria, reabrir las clínicas de salud mental de la ciudad, financiar completamente el empleo juvenil durante todo el año y fomentar asociaciones entre las comunidades y las fuerzas del orden público para realizar inversiones críticas para prevenir el crimen antes de que suceda”.
También se comprometió a “dirigir más fondos a programas de prevención de la violencia y seguridad comunitaria que aborden las causas fundamentales de la violencia comunitaria” y “atacar estas causas fundamentales del crimen y la pobreza, invirtiendo en lo básico: buenas escuelas, buenos trabajos, vivienda y salud mental».
Fiscalmente, Johnson quiere recaudar USD 800 millones en nuevos impuestos, aunque no impuestos a la propiedad, que ya son altos en Chicago.
El alcalde tendrá que lidiar con una afluencia de inmigrantes que cruzaron ilegalmente la frontera sur y han sido enviados por gobernadores republicanos, incluso de parte de Greg Abbott de Texas, a ciudades lideradas por demócratas como Chicago.
El 3 de mayo, criticó a los gobernadores que han estado enviando inmigrantes ilegales a las ciudades lideradas por los demócratas, incluida Chicago, una ciudad que él se comprometió a mantener como santuario para los inmigrantes ilegales.
“Tenemos, ya saben, gobernadores en la frontera que han demostrado que no están dispuestos a colaborar de una manera real, y eso es, por supuesto, muy decepcionante”, dijo Johnson en una conferencia de prensa para presentar al jefe de policía interino entrante de la ciudad.
También señaló que está «preparado para tener conversaciones con todos, en particular, con aquellos que pueden usar esto como un arma contra las ciudades».
A la vez, acusó a los gobernadores de utilizar a los inmigrantes ilegales como un “fútbol político”, algo que calificó de “inconcebible”.
Los senadores John Cornyn (R-Texas) y Ted Cruz (R-Texas), que representan a un estado invadido en medio de la crisis migratoria, respondieron a Johnson el 3 de mayo.
“Me gustaría preguntarle, ‘¿Qué se supone que deben hacer los gobernadores de los estados fronterizos como Texas y estas comunidades fronterizas que están siendo sobrepasadas?’”, dijo Cornyn a The Epoch Times.
“Yo creo que el gobernador Abbott y el gobernador [de Florida] [Ron] DeSantis y otros que han transportado a inmigrantes en autobuses y básicamente han facilitado su viaje a algunas de estas ciudades como Nueva York, Washington y Chicago, lo han hecho desesperados, tratando de llamar la atención del presidente, pensando: ‘Bueno, él no escuchará a los republicanos. Tal vez escuche a los demócratas y tal vez escuche a estos alcaldes de las grandes ciudades’”.
Cruz llamó hipócrita a Johnson.
“Aquí no faltan alcaldes demócratas hipócritas que están perfectamente felices de que Estados Unidos tenga fronteras abiertas y que 6 millones de personas crucen ilegalmente, la gran mayoría de las cuales cruzaron al estado de Texas; para luego decir: ‘No es mi problema'», declaró Cruz a The Epoch Times.
“Sin embargo, cuando los inmigrantes ilegales llegan a su ciudad, histéricamente e hipócritamente declaran una emergencia. Esto es una emergencia. Esto es una crisis, pero una crisis causada por los demócratas deliberadamente».
Cruz ridiculizó a los demócratas, incluido Johnson, por derramar “lágrimas de cocodrilo”.
Luego ofreció un remedio a los alcaldes demócratas, a cuyo círculo se acaba de unir Johnson.
“Por cada alcalde demócrata que grita y aúlla cuando llegan inmigrantes ilegales a sus ciudades, tiene una solución fácil: tome el teléfono y llame a la Casa Blanca. Joe Biden podría resolver este problema hoy”, dijo Cruz. «Él no lo quiere hacer».
Mientras que Johnson, padre de tres hijos, será el tercer alcalde negro en la historia de Chicago, con su esposa, Stacie, la ciudad tendrá por primera vez una primera dama negra.
A pesar de postularse como progresista, Johnson ha prometido ser alcalde para todos los habitantes de Chicago.
Justo antes de ingresar a su vehículo después de emitir su voto temprano en la mañana en las elecciones del 4 de abril, Johnson le dijo a The Epoch Times: “Espero liderar la ciudad de Chicago para todos”.
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