Después de los boicots de nivel nacional y de sufrir una significativa disminución en la valorización de mercado, Bud Light ya no se encuentra entre las 10 cervezas más populares de Estados Unidos, según una destacada encuesta en que las mujeres valorizaron la marca por debajo de los hombres.
Bud Light ocupó el puesto 15 en la lista de las cervezas más populares de Estados Unidos en el segundo trimestre de 2023, según una encuesta de YouGov. En el segundo trimestre de 2022, Bud Light ocupaba el noveno lugar. En la encuesta reciente, solo el 42 por ciento de los encuestados dijeron que les gustaba Bud Light, empatando la marca con Miller Lite, Miller Genuine Draft y Pabst Blue Ribbon, que también recibieron el mismo puntaje de popularidad. Entre los hombres, Bud Light ocupó el puesto 13. Entre las mujeres, Bud Light ocupó un rango más bajo, de 17.
Los tres primeros lugares fueron ocupados por Guinness, Corona y Heineken, todos los cuales obtuvieron más del 50% de simpatía.
También se han visto resultados similares en otras encuestas. El informe de marca E-Score de 2023 de E-Poll Market Research (pdf) indicó que «la popularidad de Bud Light cayó entre los adultos en todos los ámbitos después de la campaña polarizadora» con el influencer transgénero Dylan Mulvaney.
La mayor baja de la valorización de la marca se observó entre los republicanos. Entre este grupo demográfico, «Bud Light experimentó las mayores caídas en métricas importantes como Atracción, Lealtad a la marca y Asociación a la marca».
La puntuación de Buzz negativa de la marca aumentó 45 puntos entre los republicanos, con una disminución de la lealtad de 31 puntos y una caída del atractivo de 18 puntos.
Para la semana que finalizó el 24 de junio, las ventas de Bud Light habían disminuido en un 28%, mientras que los competidores vieron un aumento en las ventas, según datos de Bump Williams Consulting. Las ventas de Yuengling Lager aumentaron un 22%, Coors Light un 19% y Miller Lite un 16%.
La firma de seguimiento Circana estimó que esta disminución representó una pérdida de ventas de USD 26.3 millones para Bud Light en comparación con el año anterior.
Pérdida de negocios
Bud Light se convirtió en un objetivo de boicot después de asociarse con Mulvaney en una campaña promocional en abril y enviar latas de cerveza personalizadas al influencer con la cara del activista trans. Esto irritó a numerosos estadounidenses que sintieron que la compañía estaba impulsando una agenda transgénero, lo que desencadenó las llamadas de boicot.
Algunos expertos ven que el rechazo continuo hacia Bud Light tendrá un efecto a largo plazo en las finanzas de la compañía. En una nota de investigación el mes pasado, el analista de Deutsche Bank, Mitch Collett, dijo que el fabricante de Bud Light, Anheuser-Busch, sufriría una «reducción permanente» en sus negocios en Estados Unidos dado el bajo rendimiento reciente, según Barron’s.
Collett señaló que el 24 por ciento de los clientes de Bud Light ya no compran la cerveza, mientras que otro 18 por ciento compra menos.
A mediados de mayo, un analista de HSBC rebajó la calificación de las acciones de Anheuser-Busch debido a la «crisis de Bud Light» y sugirió que pueden haber «problemas más profundos» a nivel de gestión.
“La forma en que se produjo esta crisis de Bud Light hace un mes, la respuesta de la gerencia y la pérdida de un volumen sin precedentes y la relevancia de la marca plantea muchas preguntas”, afirmó el analista.
Administración deficiente
A pesar de la reacción violenta, Bud Light aún no se ha disculpado por impulsar una agenda transgénero. Durante una entrevista en CBS, se le preguntó al CEO de Anheuser Busch, Brendan Whitworth, si la promoción de Mulvaney fue un error. El Sr. Whitworth se negó a llamar al incidente un error.
“Bud Light ha apoyado a LGBTQ desde 1998. Son 25 años, y como hemos dicho desde el principio, continuaremos apoyando a las comunidades y organizaciones que hemos apoyado durante décadas”, respondió el Sr. Whitworth.
En una entrevista con Fox News, el expresidente de Anheuser-Busch, Anson Frericks, criticó a Whitworth por no resolver el problema y le pidió que renunciara.
“Este abismo que estamos viendo entre Bud Light y sus consumidores solo se intensificará porque cada vez que ustedes salgan con una de esas declaraciones débiles o algunos de estas trivialidades (…) eso no es abordar el problema. Mientras no aborde el problema, no veo que los consumidores regresen y vuelvan a esta marca”, dijo Frericks.
“Estamos en el cuarto mes de esto en este momento (…) Esto es algo que debería haberse abordado hace tres o cuatro meses al decir claramente: hey, Bud Light históricamente siempre fue una marca que no se involucró en la política”, agregó el expresidente.
A diferencia de años anteriores, el boicot de consumidores de Bud Light, que fue muy efectivo, hizo que otras marcas desconfiaran de ofender a sus bases de clientes principales, y esto abrió un camino para que las empresas tradicionales reafirmen su alianza con los valores conservadores.
La mayoría de los clientes están hartos de la promoción descarada de temas sexuales y transexualidad, especialmente hacia menores.
Han aparecido mercados en línea alternativos, y uno de los más destacados es PublicSq, una plataforma que se está haciendo pública y que ofrece una «solución para una economía paralela emergente llena de consumidores patriotas que están dispuestos a gastar su dinero con empresas que respetan y comparten sus valores».
La popular marca de helados Ben and Jerry’s también ha estado en el centro de atención desde que la marca publicó un tuit divisivo el 4 de julio en conmemoración al Día de la Independencia. Queda por ver cómo resultará esta situación, ya que algunas personalidades han comenzado a pedir su boicot. Desde entonces, la empresa matriz de la marca ha sufrido una pérdida de USD 2000 millones en capitalización de mercado.
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