Los legisladores de California aprobaron el jueves el primer plan de ingresos garantizados financiado por el Estado, que distribuirá 35 millones de dólares en pagos mensuales en efectivo a las personas embarazadas y a los jóvenes adultos que hayan salido recientemente del sistema de acogida.
El plan, financiado por los contribuyentes, fue aprobado por unanimidad en ambas cámaras —36-0 en el Senado y 64-0 en la Asamblea— y ahora se dirige a la mesa del gobernador Gavin Newsom para que lo convierta en ley.
No habrá restricciones en la forma en que las personas elegibles gastan el dinero. El plan tiene como objetivo ayudar a los beneficiarios a la transición a una vida por su cuenta.
«Si usted mira las estadísticas de nuestros jóvenes de acogida, que son devastadores», dijo el líder republicano del Senado Scott Wilk en un comunicado. «Deberíamos hacer todo lo posible para ayudar a estos jóvenes».
Los gobiernos y organizaciones locales solicitarán el dinero y gestionarán sus programas. El Departamento de Servicios Sociales del estado decidirá quién recibe la financiación. Los legisladores californianos dejaron en manos de los funcionarios locales la determinación de la cuantía de los pagos mensuales, que suelen oscilar entre 500 y 1000 dólares en los programas existentes en todo el país.
Los programas de ingresos garantizados se remontan al siglo XVIII. El gobierno estadounidense incluso experimentó con ellos en los años 60 y 70 durante la administración Nixon, antes de que cayeran en desgracia.
Pero recientemente, los programas de ingresos garantizados han vuelto a aparecer. Se han anunciado programas en Nueva Orleans, Oakland, California, Tacoma, Washington, Gainesville, Florida, y Los Ángeles, la segunda ciudad más grande del país, que tiene un plan para dar 1000 dólares al mes a 2000 familias necesitadas.
Los críticos de estos planes, como el asambleísta republicano Vince Fong, de Bakersfield, argumentan que podrían «socavar los incentivos para trabajar y aumentar la dependencia del gobierno».
«Deberíamos impulsar políticas que fomenten el valor del trabajo», dijo Fong, que se abstuvo en la votación del jueves. «Los ingresos garantizados no proporcionan la formación laboral y las habilidades necesarias para la movilidad ascendente».
La aprobación del plan se produce pocos días después de que el gobernador demócrata firmara un paquete presupuestario de 100,000 millones de dólares del «Plan de Recuperación» que incluye desgravaciones fiscales y cheques de estímulo para ayudar a los residentes del estado a recuperarse de la pandemia y los cierres resultantes.
Newsom, que se enfrenta a una elección de revocación el 14 de septiembre, calificó el SB 139 como el mayor plan de recuperación del país.
Proporciona un alivio inmediato en efectivo a las familias de clase media y a las empresas más afectadas por la pandemia y los cierres, creando el mayor reembolso de impuestos del estado en la historia de EE.UU. y el mayor paquete de ayuda a las pequeñas empresas en la nación, dijo la oficina de Newsom en un comunicado.
Con información de Associated Press.
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