El proyecto de ley presentado por un senador republicano y destinado a acelerar las autorizaciones oficiales para la construcción de nuevas fábricas de semiconductores en Estados Unidos, fue aprobado el viernes por la Cámara de Representantes y se dirige ahora al escritorio del presidente Joe Biden para su firma. En enero había sido aprobado por el Senado.
Con una votación de 303 -89 preferencias, la Cámara aprobó el proyecto de ley inusualmente corto, de menos de una página y sin título (pdf), que fue presentado por primera vez por el senador Bill Hagerty (R-Tenn.) con sus copatrocinadores, el senador Rob Portman (R-Ohio) y el senador Angus King (I-Maine). Los votos a favor en la Cámara incluyeron a 175 republicanos (29 no votaron) y 121 demócratas, de los cuales solo 10 no votaron. Los 89 votos en contra fueron emitidos por los demócratas.
El Senado aprobó la propuesta por unanimidad el 14 de enero. La aprobación de la Cámara se retrasó temporalmente por los grupos ecologistas que intentaron eliminar la legislatura protestando en virtud de una suspensión del reglamento.
La Cámara de Representantes inicia después de hoy su receso de agosto para regresar en septiembre cuando las campañas de las elecciones legislativas de 2022 estarán en pleno apogeo. El Congreso rara vez aprueba proyectos de ley importantes entre agosto y noviembre de los años electorales.
El nuevo proyecto de ley modifica la ley Fixing America’s Surface Transportation Act (FAST) de 2015 para incluir en su sección 41 disposiciones de autorización para reducir la burocracia federal en la aprobación de nuevos proyectos para la fabricación de una serie de productos digitales críticos para la seguridad nacional y el consumo, sobre todo para cubrir la construcción de nuevas fábricas para producir semiconductores en Estados Unidos.
Hagerty calcula que su plan reduciría a unos 18 meses el proceso de aprobación reglamentaria, que actualmente puede durar hasta cinco años.
«Yo lo presenté al Senado para aumentar las oportunidades y la prosperidad de las familias estadounidenses y para garantizar que Estados Unidos gane la competencia con el Partido Comunista Chino que definirá este siglo», declaró Hagerty a The Epoch Times tras la votación en la Cámara.
«Nosotros debemos poner fin a nuestra dependencia de China y reafirmar nuestra independencia manufacturera; nuestra seguridad nacional depende de ello. La reducción de la burocracia gubernamental dará rienda suelta a la competitividad y la innovación estadounidenses al promover una construcción y un funcionamiento más rápidos de las instalaciones de fabricación de productos críticos que debemos hacer en Estados Unidos», dijo Hagerty.
China produce actualmente el 24 por ciento de todos los semiconductores, seguida de Taiwán con el 21 por ciento y Corea del Sur con el 19 por ciento. Empresas con sede en Estados Unidos, como Intel y Texas Instruments, representan el 10 por ciento de la fabricación mundial de semiconductores, según la Asociación de la Industria de Semiconductores.
Se calcula que el 90 por ciento de los semiconductores más avanzados los fabrica Taiwan Semiconductor Manufacturing Co (TSM).
Además de los semiconductores, la medida también abarca productos relacionados con «la inteligencia artificial y el aprendizaje automático, la informática de alto rendimiento y el hardware y software informático avanzado».
Si, como se espera, Biden promulga el proyecto de ley de Hagerty, será el primer caso de la actual presidencia de un senador republicano novato, que además consiguió que se apruebe una medida tanto en el Senado como en la Cámara de Representantes, ambos controlados por los demócratas.
Antes de la votación en la Cámara de Representantes, la oficina de Hagerty hizo circular una hoja informativa con algunas citas de apoyo de un exexperto en comercio de la administración Trump y de altos ejecutivos de la industria automotriz.
«Reducir nuestra dependencia económica de China y otras naciones extranjeras es fundamental ya que Estados Unidos se enfrenta a amenazas estratégicas económicas y de seguridad nacional debido a esta dependencia. Yo aplaudo el liderazgo y los esfuerzos del senador Hagerty para fortalecer nuestra seguridad nacional, crear puestos de trabajo estadounidenses y hacer que nuestra nación vuelva a ser competitiva», dijo Robert Lighthizer, quien fue el representante comercial de Estados Unidos durante la administración Trump.
Los ejecutivos de la industria automotriz representan a algunas de las firmas extranjeras que han establecido grandes instalaciones de fabricación en Estados Unidos.
«Nissan está comprometida a apoyar las medidas que ayudarán a aliviar las interrupciones de la cadena de suministro y la escasez de chips de semiconductores y apreciamos el liderazgo del senador Hagerty en cuestiones de seguridad nacional y económica que abordarán estos desafíos”, dijo Andrew Tavi, vicepresidente senior de Asuntos Externos de Nissan Américas, quien fue citado respecto a la nueva legislatura. “El apoyo del senador Hagerty ayudará a garantizar que las economías de Tennessee y de Estados Unidos sigan siendo fuertes y crezcan más independientes a través de inversiones en plantas de semiconductores y tecnología avanzada en EE. UU.».
El proyecto de ley de Hagerty ayudará al «éxito de su empresa en este mercado, trayendo nuevos productos de última generación ensamblados en Tennessee a los consumidores de Estados Unidos que requieren una cadena de suministro nacional robusta y segura», dijo Ana María Schneider, vicepresidenta senior del Grupo Volkswagen of America.
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