La Cámara de Representantes de Pensilvania votó este jueves para aprobar una resolución que establece una auditoría no partidista de las elecciones generales de 2020, en un intento por restaurar la fe del pueblo en las futuras elecciones del estado.
La resolución fue aprobada en una votación mayoritariamente partidista de 112-90, informó Pittsburgh Post-Gazette. Esta permite al Comité Legislativo de Presupuesto y Finanzas (LBFC), el cual está integrado por un número igual de republicanos y demócratas de la Cámara y del Senado del estado, examinar los procedimientos electorales para confirmar la exactitud de los resultados y brindar recomendaciones de mejora.
Los republicanos en general votaron a favor de la auditoría, argumentando que es necesaria una revisión del sistema electoral del estado, especialmente después de la confusión y el caos que se derivaron de las elecciones de este año con alta participación y votaciones por correo a gran escala.
El representante estatal Jesse Topper (R), el principal promotor de la resolución, señaló que la auditoría no se trata de cuestionar los resultados de las elecciones 2020, sino de escudriñar el proceso para garantizar la integridad en futuras elecciones.
«Las elecciones son la base de nuestra forma de gobierno», dijo Topper en un comunicado. “Creo firmemente que esta auditoría de limitación de riesgos del LBFC, al igual que las auditorías similares que se llevan a cabo en otros estados, proporcionará un nivel estadístico de confianza no solo en el resultado de estas elecciones pasadas, sino que garantizará la confianza en todas las elecciones futuras aquí en la Mancomunidad», agregó.
Si bien el Departamento de Estado de Pensilvania realiza su propia auditoría de cada elección, que se basa en tamaños de muestra pequeños, la auditoría de limitación de riesgo del LBFC incluiría muestras mucho más grandes, según el representante estatal Bryan Cutler (R).
«Los votantes de Pensilvania percibieron unas elecciones muy diferentes cuando completaron las boletas en noviembre», dijo Cutler en un comunicado. “Cada condado utilizó nuevas máquinas de votación luego de que el gobernador [Tom] Wolf descertificó a todas las máquinas en el estado por motivos de seguridad, o millones de personas votaron por correo por primera vez. Una auditoría exhaustiva prueba los supuestos, confirma la precisión y restaura la fe en nuestro proceso para todos los residentes de Pensilvania».
La mayoría de los demócratas rechazaron la propuesta, argumentando que el LBFC no tiene la autoridad para realizar tal auditoría.
“El Comité Legislativo de Presupuesto y Finanzas no tiene experiencia ni función en la administración electoral y no tiene autoridad legal fuera del ámbito fiscal, y es inapropiado pretender que sí”, dijo el gobernador demócrata Tom Wolf en un comunicado. «Una auditoría del LBFC sería incompleta, repetitiva y no fidedigna».
“La interferencia de legisladores partidistas en Harrisburg está mal. Crea caos y confusión y debe ser rechazada. Una auditoría confiable realizada por expertos electorales es la mejor manera para que todos los residentes de Pensilvania confíen en los resultados de estas elecciones”, dijo Wolf.
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