En una votación celebrada el miércoles, la Cámara decidió censurar al congresista Paul Gosar (R-Ariz.) por un video animado que el congresista posteó en su página de Twitter a principios de mes y que ya ha sido retirado.
La moción de la Cámara de Representantes para censurar a Gosar despoja al congresista de sus dos asignaciones en el Comité de Supervisión y Reforma y en el Comité de Recursos Naturales de la Cámara.
El video, que supuestamente mostraba a Gosar matando a la congresista Alexandria Ocasio-Cortez y atacando al presidente Joe Biden, recibió inmediatamente una etiqueta de advertencia por parte de Twitter diciendo que el posteo constituía una conducta de odio.
El video era una edición de la popular serie de anime «Ataque a los titanes» que mostraba a Gosar matando a un «Titán» —monstruos gigantes devoradores de humanos en la serie— que fue editado para tener la cara de Ocasio-Cortez.
Ocasio-Cortez respondió al video en un tuit propio, llamando a Gosar «un miembro espeluznante con el que trabajo que recauda fondos para grupos neonazis compartió un video de fantasía de él matándome». Añadió que «no tendrá consecuencias porque [el líder de la minoría, Kevin McCarthy (R-Calif.)] lo anima con excusas».
Sin embargo, Gosar se defendió de las acusaciones.
«No soy partidario de la violencia hacia nadie. Nunca lo he hecho», insistió Gosar en el pleno de la Cámara.
«La caricatura representa la naturaleza simbólica de una batalla entre políticas legales e ilegales y de ninguna manera pretende ser un ataque dirigido contra la representante Cortez o el Sr. Biden», dijo Gosar en una declaración separada. «Es una caricatura simbólica. No es la vida real. El congresista Gosar no puede volar. El héroe de la caricatura va tras el monstruo, el monstruo político de las fronteras abiertas».
McCarthy dijo que había llamado a Gosar después de enterarse del video, señalando que «le llamé cuando me enteré del video, y él hizo una declaración de que no apoya la violencia, y retiró el video». McCarthy, satisfecho por la insistencia de Gosar en que no pretendía hacer un daño real, no presionó para que el congresista fuera censurado.
Los líderes republicanos no trataron de conseguir apoyos contra la resolución, que tenía prácticamente garantizada su aprobación en la Cámara de Representantes demócrata. Sin embargo, los líderes sí recomendaron a los miembros de su bancada que votaran en contra de la moción.
Sin embargo, la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi (D-Calif.), fue menos indulgente con la caricatura, que argumentó que era un ejemplo de «acoso laboral y violencia contra las mujeres».
Pelosi dijo que Gosar «hizo amenazas, sugerencias sobre dañar a un miembro del Congreso».
«Eso es un insulto, no solo poner en peligro a ese miembro del Congreso, sino un insulto a la institución de la Cámara de Representantes», dijo Pelosi a los periodistas.
«No podemos tener a miembros bromeando sobre asesinarse unos a otros, así como amenazando al presidente de Estados Unidos», añadió.
Pelosi también indicó que cree que Gosar debería enfrentarse a un proceso penal. «Creo que amenazar la vida de cualquier persona, no solo de un miembro del Congreso y ciertamente del presidente de Estados Unidos, debería merecer la atención de las fuerzas policiales», dijo Pelosi.
El líder de la mayoría de la Cámara de Representantes, Steny Hoyer (D-Md.), insistió en que la medida no estaba motivada por lealtades partidistas.
«Si un demócrata hace lo que hizo Gosar, apoyaré la censura», dijo Hoyer. «Se trata de una amenaza y una representación visual de un miembro matando a otro. Si un demócrata hiciera eso, debería recibir el mismo trato».
Pero McCarthy argumentó en un discurso en la Cámara que la censura era un «abuso de poder».
«Los demócratas se están preparando una vez más para romper otro precedente de la Cámara de Representantes de Estados Unidos», dijo McCarthy antes de la votación. «La presidenta está incendiando la Cámara en su camino de salida».
La verdadera intención de los demócratas al censurar a Gosar, dijo McCarthy, es «silenciar la disidencia y acomodar las cosas para su agenda radical».
McCarthy señaló que los demócratas estaban poco dispuestos a censurar a su propia representante Ilhan Omar (D-Minn.) después de que ella fuera a Minneapolis durante los disturbios del verano de 2020 para animar a los alborotadores a «permanecer en las calles» y «mostrarles que hablamos en serio».
«Este lado del pasillo no pidió que [Omar] perdiera su comité», dijo McCarthy. «Simplemente pedimos una disculpa».
En un indicio de que los republicanos podrían seguir el precedente sentado por la moción de censura, McCarthy dijo que «lo que [los demócratas] han empezado no puede deshacerse fácilmente».
Omar y otros, añadió McCarthy, «necesitarán la aprobación de la mayoría para mantener [sus puestos en el comité] en el futuro».
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