Los legisladores republicanos de la Cámara de Carolina del Norte votaron a favor de anular el veto del gobernador Roy Cooper a un proyecto de ley que obliga a los sheriffs a cooperar con las autoridades federales cuando arresten a inmigrantes ilegales.
También amplía el plan de vales escolares.
El proyecto de ley 10 fue aprobado 72 a 44 en la Cámara el 19 de noviembre, principalmente con voto partidista.
La ley pasará al Senado el 20 de noviembre, donde se espera que los republicanos también voten para anular el veto.
Los republicanos tienen una supermayoría en ambas cámaras, lo que probablemente les permitirá anular el veto de Cooper firmado a finales de septiembre.
Una supermayoría significa que tres quintas partes de los escaños tanto en el Senado como en la Cámara de Representantes del estado están controlados por un partido, una situación de la que actualmente disfrutan los republicanos en Carolina del Norte.
Esto significa que el caucus por sí solo puede anular un veto ejecutivo, por lo que el proyecto de ley puede convertirse en ley.
El proyecto de ley obliga a los sheriffs a alertar al Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) cuando una persona bajo su custodia acusada de un crimen violento o delito grave sea sospechosa de estar en el país ilegalmente.
Esto obliga a los funcionarios judiciales a ordenar a las fuerzas del orden que retengan al recluso en cuestión durante 48 horas.
La ley también financia más vales escolares, medida que los demócratas impugnaron acaloradamente.
Según la legislación, se asignarán unos 463 millones de dólares al programa Opportunity Scholarship. La medida también incluye 160 millones de dólares para hacer frente al crecimiento de la matrícula en los colegios comunitarios y las escuelas públicas K-12.
Los defensores de la parte de la ley sobre inmigración ilegal, dijeron que la medida legislativa era necesaria porque algunos sheriffs en los condados predominantemente demócratas han hecho caso omiso de las órdenes de retención del ICE en el pasado.
El republicano del condado de Caldwell y patrocinador del proyecto de ley, el representante Destin Hall, dijo que algunos departamentos de alguaciles en el estado estaban liberando a los presos sin alertar a ICE.
«Además, hemos visto a gente volver a delinquir como resultado de eso», dijo Hall antes de la votación.
La legislación se aprobó tras la victoria del presidente electo, Donald Trump, el 5 de noviembre, para quien detener la inmigración ilegal fue una parte clave de su campaña.
Trump prometió deportaciones masivas durante su segundo mandato, a lo que Hall se refirió durante el debate en la Cámara como una razón para apoyar el proyecto de ley.
Los críticos del proyecto de ley dicen que obligar a los alguaciles a retener a los reclusos crea una carga innecesaria.
Abe Jones, un demócrata que representa al condado de Wake, dijo que el sheriff de su condado ya estaba bajo de recursos y no debería tener que coordinar con el ICE.
«ICE es una ley federal, y el gobierno federal recibe mucho dinero de nuestros impuestos para contratar a quien sea necesario para hacer cumplir esas leyes», dijo Jones.
«Yo digo, dile a ICE que haga el trabajo de ICE».
En cuanto a los vales escolares, la representante demócrata Julie von Haefen criticó a los republicanos por destinar dinero a los vales en lugar de utilizarlo para ayudar a las víctimas del huracán Helene.
«La gente en el oeste de Carolina del Norte acaba de conseguir agua para beber», dijo Von Haefan. «Tenemos el dinero para ayudarles a sobrevivir, pero en lugar de eso, se lo estamos regalando a las familias más ricas de nuestro estado».
Por su parte, la representante republicana, Tricia Cotham, calificó el escenario, que pinta el programa de vales como quitar dinero del alivio de huracanes, como una «opción falsa».
Cotham dijo que el programa de vales permite a los padres con hijos atrapados en escuelas que fracasan darles una mejor educación.
Con información de The Associated Press
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