La campaña de Hillary Clinton y el Comité Nacional Demócrata (DNC) probablemente violaron la ley federal al no describir con precisión los pagos realizados a un bufete de abogados que canalizó el dinero al exespía británico Christopher Steele, dictaminaron funcionarios federales.
La Comisión Federal de Elecciones (FEC, por sus siglas en inglés) determinó que había una causa probable para creer que la campaña de Clinton y su tesorera, Elizabeth Jones, y el DNC y su tesorera, Virginia McGregor, informaron erróneamente el propósito de ciertos gastos y violaron la ley federal, según documentos presentados al público el 30 de marzo.
Las probables violaciones se refieren al pago de USD 1 millón que la firma de abogados Perkins Coie, contratada por las partes para brindar servicios legales antes de las elecciones de 2016, hizo en 2016 a una empresa llamada Fusion GPS.
La campaña de Clinton pagó USD 175,000 a Perkins Coie a mediados de 2016 por lo que describió en los informes de divulgación como «servicios legales». El DNC pagó USD 849,407 al bufete de abogados casi al mismo tiempo por lo que describió como una “consultoría legal y de cumplimiento”.
La ley federal exige que las campañas políticas informen el nombre y la dirección de cada persona a la que le paguen más de USD 200 por año y definan el propósito del pago.
Las quejas presentadas ante la FEC informaron que la campaña de Clinton (HFA) y el DNC en 2018 dijeron que los partidos se aseguraron de contratar operativos a través de Perkins Coie para proteger su conducta de cualquier escrutinio.
“Al ocultar intencionalmente sus pagos a través de Perkins Coie y al no revelar públicamente el verdadero propósito de esos pagos, HFA y el DNC pudieron evitar informar públicamente en sus formularios de divulgación de FEC, requeridos por ley, el hecho de que le estaban pagando a Fusion GPS para realizar investigaciones de oposición sobre Trump con la intención de influir en el resultado de las elecciones presidenciales de 2016”, dijo la Fundación Coolidge Reagan en una denuncia.
La fundación publicó la determinación de la FEC el miércoles antes de la publicación de los documentos por parte de la propia agencia. Un portavoz de la FEC no cuestionó la autenticidad de los documentos.
“La FEC tiene hasta 30 días después de la notificación a las partes de un asunto de cumplimiento para preparar y colocar los documentos relevantes en el registro público”, dijo el portavoz a The Epoch Times en un correo electrónico. “Hasta entonces, no podemos proporcionar comentarios ni divulgar ninguna información”.
En lugar de destinarse a los propósitos enumerados en los formularios de divulgación, los pagos en realidad se destinaron a financiar la creación del infame expediente compilado por Steele, un ferviente oponente del rival de Clinton, Donald Trump, con la ayuda de los agentes de Fusion.
Perkins Coie reconoció el acuerdo en una carta (pdf) enviada a Fusion en 2017 y publicada por los medios de comunicación.
El expediente estaba plagado de afirmaciones lascivas y sin fundamento, muchas de las cuales han sido desacreditadas desde entonces por funcionarios federales, incluido el inspector general del Departamento de Justicia, Michael Horowitz.
La FEC encontró una causa probable de que los pagos fueron informados incorrectamente.
Eso llevó a la campaña de Clinton y al DNC a aceptar entrar en acuerdos de conciliación con la FEC.
Los acuerdos estipulan que las partes pagarán multas –USD 8000 para la campaña de Clinton y USD 105,000 para el DNC- y no violarán en el futuro las leyes que parecían haber violado.
Además, la comisión, a petición de cualquier persona que presente una queja adecuada sobre los asuntos en cuestión, podrá revisar el cumplimiento de las leyes. Si se cree que se está violando alguna de las leyes, se puede iniciar una acción civil en un tribunal federal.
Trump demandó a Clinton y a otras personas involucradas en el expediente el 24 de marzo.
La campaña y el Comité Nacional Demócrata no admitieron haber actuado mal. Las partes no respondieron a las solicitudes de comentarios.
Los funcionarios del DNC han dicho antes que el partido no sabía sobre el arreglo entre Perkins Coie y Fusion. Brian Fallon, antiguo portavoz de la campaña de Clinton, ha dicho que ojalá hubiera sabido lo de los pagos a Steele, porque se habría ofrecido como voluntario para ir a ayudarle. Fallon también ha dicho que Clinton «puede haber sabido» sobre la investigación, pero «el grado de lo que sabía exactamente está más allá de mi conocimiento».
La FEC también determinó que otras personas, naturales y jurídicas, no violaron las leyes federales: Steele, Marc Elias, un antiguo abogado de Perkins Coie; Perkins Coie; y Fusion.
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