La viceprimera ministra, Chrystia Freeland, afirmó que el gobierno canadiense tiene «serias preocupaciones» sobre las recientes elecciones en Venezuela, en las que tanto el presidente en ejercicio como el partido de la oposición se adjudicaron la victoria.
«Canadá, al igual que muchos de nuestros otros aliados y muchas de las democracias del mundo, tiene serias preocupaciones acerca de las elecciones de Venezuela, y estamos trabajando en estrecha colaboración con nuestros socios», dijo Freeland durante una conferencia de prensa el 29 de julio.
La ministra de Finanzas también expresó su apoyo a los venezolanos que luchan por la democracia bajo un «régimen autoritario cada vez más severo».
«Quiero que el pueblo de Venezuela, los demócratas de Venezuela, sepan que Canadá está con ellos y reconoce que están luchando duro por la democracia y la libertad y que se lo merecen, al igual que todos nosotros», dijo.
El 28 de julio, el presidente venezolano Nicolás Maduro y su rival de la oposición Edmundo González proclamaron su victoria tras las elecciones presidenciales.
Aunque Maduro fue declarado oficialmente ganador, varios países como Estados Unidos, Chile, Perú, Italia y Canadá expresaron su preocupación por la legitimidad de los resultados.
Según la autoridad electoral de Venezuela, Maduro ganó un tercer mandato de seis años con el 51 por ciento de los votos, en comparación con González, que ganó con el 44 por ciento de los votos. Varias encuestas de salida indican que González estaba a la cabeza.
Los resultados de las elecciones también fueron rechazados por la líder opositora venezolana María Corina Machado, a quien el Contralor General de Venezuela le prohibió postularse a la presidencia en 2023, una decisión que, según ella, fue injusta.
Si bien Venezuela era una de las economías más desarrolladas de América del Sur gracias, en parte a sus grandes reservas de petróleo, cuando el Partido Socialista Unido de Maduro tomó el poder en 2013, el país experimentó desde entonces una contracción de su PIB y una hiperinflación masiva, mientras que más de 7.7 millones de personas huyeron del país. El gobierno venezolano también fue acusado de acosar e intimidar a periodistas, defensores de los derechos humanos, organizaciones de la sociedad civil y opositores políticos, según Human Rights Watch.
Sanciones contra Venezuela
Las relaciones entre Canadá y Venezuela son tensas desde la crisis electoral de 2019, cuando la Asamblea Nacional declaró a Maduro presidente ilegítimo y juramentó a Juan Guaidó como presidente interino.
La Sra. Freeland emitió una declaración el 12 de enero de 2019 respaldando al Sr. Guaidó como líder y rechazando el «reclamo ilegítimo de poder» del Sr. Maduro.
En respuesta, Canadá también anunció el 2 de junio de 2019 que los diplomáticos en Venezuela ya no podrían obtener acreditación diplomática y que se suspenderían las operaciones en la Embajada de Canadá en Venezuela. El gobierno canadiense sancionó a un total de 113 funcionarios venezolanos desde 2017 y, en colaboración con varios países, remitió la situación en Venezuela a la Corte Penal Internacional.
El líder conservador Pierre Poilievre dijo en la plataforma X que los venezolanos habían votado recientemente para «poner fin a la opresión socialista» en su país, pero que Maduro había «amañado los resultados para mantenerse en el poder».
«Trudeau debería negarse inmediatamente a reconocer esta farsa electoral y apoyar la lucha del pueblo venezolano por la libertad y la democracia», añadió Poilievre.
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