Un cartero de Kent fue despedido de su trabajo después de llegar un minuto tarde con una entrega especial. El Tribunal de Empleo que analizó su historial de trabajo confirmó la decisión del empleador y ahora un Sindicato anuncia que realizará una causa legal.
Robert Lockyer, de Ashford, trabajó por 28 años en la entrega de correspondencia en Tannery Lane y sus empleadores, Royal Mail, decidieron despedirlo luego que en septiembre pasado acudiera tarde a un Banco y se atrasara por un minuto en la entrega del tiempo acordado, informó el medio Kent.
El empleado fue despedido por «mala conducta grave», porque tenía registradas faltas previas y había sido definido como un empleado que desafiaba las normas.
El Sindicato de Trabajadores de la Comunicación (CWU) dijo el 20 de septiembre que hizo una apelación al empleador Royal Mail, pero fue desestimada por lo que el problema se trasladó a un Tribunal de Empleo, que en agosto confirmó el despido.
Robert Lockyer had worked at Royal Mail for 28 years before his dismissal ?https://t.co/9LqnuqZDn1
— KentLive (@kentlivenews) September 21, 2019
El secretario de la CWU, Mark Baulch, calificó el 20 de septiembre, la decisión de despedir a Lockyer como «probablemente uno de los despidos más escandalosos por parte de Royal Mail y el veredicto del Tribunal sobre los que he oído hablar».
«No se equivoquen, este sindicato está apelando esta decisión legalmente y, mientras tanto, también abordaremos este caso con la compañía al más alto nivel posible», agregó.
Baulch aseguró que estaba comprobado que “el cartero llegó al local, un banco de la calle principal, cuatro minutos antes», de la hora límite de su entrega especial, las 1pm hora.
«Y la única razón por la que no pudo obtener la firma del recibo que necesitaba fue porque le dijeron que tenía que esperar en la cola junto con los otros clientes del banco», añadió.
Los datos de la llegada habrían quedado registrados en su dispositivo de control PDA y no fueron puestos en duda.
Lockyer estaba haciendo una entrega especial en un banco de Tannery Lane, Kent, el 12 de septiembre de 2018. Su empresa garantiza que los artículos de entrega especiales llegarán a las 9 a.m. o a la 1 p.m. del día siguiente, informó el medio Kent. El afirma que llegó a las 12:56 y fueron las 1:01 p.m. cuando pudo obtener una firma en su PDA.
El gerente de la oficina de entrega, John Peter, al observar su conducta lo despidió el 5 de octubre de 2018.
Cuando el empleado apeló, Knight Smith, gerente de casos independientes confirmó la decisión del despido por «incumplimiento continuo de seguir los procedimientos correctos».
«Sugerir que el despido fue por llegar un minuto tarde no era un reflejo verdadero de lo que realmente sucedió». Ella aseguró que Lockyer «eligió ignorar la alerta PDA del mediodía y dejó la entrega hasta el último momento» a pesar de estar al tanto de los protocolos bancarios.
Robert Lockyer was making a delivery to a bank, but a queue meant he missed his deadline by a minutehttps://t.co/mIbxjbx4rj
— The Daily Record (@Daily_Record) September 22, 2019
El caso llegó al Tribunal de Empleo el 22 de julio de 2019 y también desestimó el reclamo del empleado afirmando que la conducta en el trabajo de parte de Lockyer «no había sido del todo satisfactoria» y que estaba «claro por la evidencia, que el demandante era un empleado que desafiaba las normas».
El 31 de mayo del año pasado, Lockyer recibió una advertencia seria válida por 12 meses por no asegurar su vehículo y tres meses después, se le emitió una sanción de despido suspendida válida por 24 meses por no obtener una firma y no seguir los procedimientos que le habían asignado.
El empleador notificó en ese momento que «si seguía adelante con cualquier incumplimiento de las normas dará lugar a su despido».
«El Sr. Peter encontró al demandante culpable de haber hecho la entrega tardía, y luego descubrió que la combinación del delito disciplinario en cuestión junto con el historial disciplinario reciente condujo a un hallazgo de mala conducta grave», concluyó el Tribunal, según el medio Kent.
«También tuvo en cuenta la actitud del reclamante hacia la administración», en el sentido de desafiar las normas.
Lockyer dijo que está «amargamente molesto» por el trato «duro» que le dio la compañía, según Mirrow.
«No puedo creer lo que me pasó, todo lo que quería hacer era hacer mi trabajo”, añadió. “Realmente espero que el sindicato pueda corregir esto. Solo quiero volver al trabajo”.
El juez deberá considerar si se puede permitir a un empleado faltar a las normas de llegar con suficiente tiempo a una entrega o dar la razón a Lockyer.
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