La Casa Blanca defendió el 5 de mayo el derecho de los activistas de izquierda a favor del aborto a protestar en las casas de seis jueces conservadores de la Corte Suprema y evitó calificarlos de «extremistas». La secretaria de prensa saliente, Jen Psaki, pidió en cambio «una protesta pacífica».
Tras la filtración el lunes de un borrador del dictamen de la Corte Suprema que anularía el caso Roe vs. Wade, la sentencia de 1973 que legalizó el aborto en todo Estados Unidos, estallaron las protestas de los activistas progresistas a favor de la práctica, a los que Psaki describió como «indignados».
Alrededor de la Corte Suprema se levantaron barricadas y se reforzó la seguridad en torno a los jueces.
Además, la organización de izquierda Ruth Sent Us publicó las supuestas direcciones de seis jueces conservadores y convocó una protesta «a pie» el 11 de mayo.
«En las casas de los seis jueces extremistas, tres en Virginia y tres en Maryland. Si quiere unirse o liderar una protesta pacífica, háganoslo saber», afirma la página web del grupo.
El grupo también pidió y se ofreció a pagar a muralistas y artistas de la tiza para que se unan a las protestas.
Psaki transmitió los deseos del presidente Joe Biden de que las protestas fueran pacíficas y no llegó a calificarlas de extremistas. Esto es mientras que Biden el 4 de mayo caracterizó a una gama del GOP —la que llamó «multitud MAGA»— como la «organización política más extrema» en la historia reciente de Estados Unidos.
«El presidente, para todas esas mujeres, hombres, otros, los que se sienten indignados, que se sienten asustados, que se sienten preocupados, los escucha. Él comparte esa preocupación y ese horror por lo que vio en ese borrador del dictamen», dijo Psaki a los periodistas, señalando que no era un dictamen definitivo.
El mensaje directo de Biden a cualquiera que se sienta frustrado por el borrador del dictamen de la Corte Suprema, dijo Psaki, es que participe en una protesta pacífica.
«Asegúrense de que sea pacífica. Hagan oír su voz de forma pacífica. No debemos recurrir a la violencia de ninguna manera, forma o modo. Eso es, sin duda, lo que él estaría transmitiendo», dijo la secretaria de prensa de la Casa Blanca.
Psaki declinó decir si Biden también consideraba «extremistas» a los activistas de izquierda que están planeando protestas en las casas de los jueces.
«¿Protestas pacíficas? No. La protesta pacífica no es extrema», dijo Psaki.
«Nuestra opinión aquí hay protesta pacífica —hay una larga historia en Estados Unidos, en el país, de eso y ciertamente animamos a la gente a que sea pacífica y a que no recurra a ningún nivel de violencia», dijo a continuación en referencia a la protesta a pie.
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