Una portavoz de la Casa Blanca declinó este lunes comentar las acusaciones del abogado especial John Durham de que la campaña de Hillary Clinton en 2016 y el Comité Nacional Demócrata (DNC) espiaron las residencias del expresidente Donald Trump y la Casa Blanca cuando estaba en su cargo, con el objetivo de aportar una «narrativa» a las agencias del gobierno federal que lo vincularan con Rusia.
En una rueda de prensa, la corresponsal de Fox News, Jacqui Heinrich, le preguntó tres veces a la vicesecretaria de prensa de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, para que respondiera a las preguntas sobre las acusaciones.
Pero cada vez la portavoz de la Casa Blanca la remitió al Departamento de Justicia.
«¿Le preocupa al presidente que un candidato a la presidencia utilice a expertos informáticos para infiltrarse en los sistemas informáticos de los candidatos de la competencia, o incluso del presidente electo, con el objetivo de crear una narrativa?», preguntó Heinrich.
«Eso es algo de lo que no puedo hablar desde este podio, así que le remito al Departamento de Justicia», respondió inicialmente Jean-Pierre.
«Lo que se describe en ese informe —monitorear el tráfico de internet— ¿es espionaje?», preguntó Heinrich, a lo que Jean-Pierre respondió: «De nuevo, no puedo hablar de ese informe. Le remito al Departamento de Justicia».
Intentando de nuevo obtener una respuesta, Heinrich continuó: «Sin embargo, en términos generales, ¿la monitorización del tráfico de Internet sería…?», pero Jean-Pierre le interrumpió a mitad de la frase y respondió: «Jacqui, mi respuesta no va a cambiar. Le remito al Departamento de Justicia».
The Epoch Times se ha puesto en contacto con el Departamento de Justicia para que haga sus comentarios.
Por su parte, la exsecretaria de Estado, Hillary Clinton, se negó a responder a las preguntas sobre el supuesto espionaje cuando le hizo las preguntas un reportero del Daily Mail el 15 de febrero.
«¿Pagó usted para espiar la campaña de Trump», le preguntó a Hillary el reportero de Nueva York City. «¿Cuándo va a comentar las acusaciones de espionaje, Hillary?».
Clinton declinó responder a ambas preguntas y siguió caminando mientras saludaba al reportero.
El equipo del abogado especial John Durham alegó en una presentación judicial (pdf) el 12 de febrero que un ejecutivo de informática alineado al Partido Demócrata espió las residencias de Donald Trump y la Casa Blanca cuando Trump era presidente.
El equipo de Durham sostuvo que Michael Sussmann, un abogado que había trabajado a nombre del Comité Nacional Demócrata y de la campaña de Hillary Clinton en 2016, había «reunido y transmitido alegaciones al FBI en nombre de al menos dos clientes específicos, incluyendo un ejecutivo de informática (Tech Executive 1) de una empresa de Internet con sede en Estados Unidos (Internet Company 1) y la campaña de Clinton», según una sección de la presentación judicial titulada «Antecedentes de los hechos».
Los registros de facturación que obtuvo reflejan que Sussmann «facturó repetidamente a la campaña de Clinton por su trabajo de las alegaciones del Banco Ruso-1».
Sussmann está actualmente acusado de hacer una declaración falsa al FBI cuando entregó a la agencia documentos falsos que supuestamente vinculaban a la Organización Trump con un banco ruso.
El abogado se declaró inocente y está previsto que vaya a juicio en mayo.
«En relación con estas iniciativas, Tech Executive-1 aprovechó su acceso a los datos de Internet no públicos y / o de propiedad» privada, indicó la presentación de Durham. «Tech Executive-1 también consiguió la ayuda de investigadores de una universidad con sede en Estados Unidos que estaban recibiendo y analizando grandes cantidades de datos de Internet en relación con un contrato pendiente de investigación de ciberseguridad del gobierno federal».
El ejecutivo también «encargó a estos investigadores que extrajeran datos de Internet para establecer «una inferencia» y una «narrativa» que vinculara al entonces candidato Trump con Rusia», afirma la presentación, añadiendo que el empleador del ejecutivo «había llegado a acceder y mantener servidores dedicados» para la oficina ejecutiva de Trump.
El ejecutivo de informática no fue nombrado en la presentación.
Los abogados de Sussman, en respuesta a la presentación judicial de Durham, dijeron el 14 de febrero que la moción incluía «alegaciones prejuiciosas —y falsas— que son irrelevantes para su moción y para el delito imputado y que están claramente destinadas a politizar este caso, inflamar la cobertura de los medios de comunicación y manchar el grupo del jurado».
Ellos también argumentaron que la información que Sussmann proporcionó a las agencias del gobierno federal relacionadas con la Oficina Ejecutiva del Presidente se referían al período de tiempo en que el demócrata Barack Obama todavía era aún presidente, no Trump.
Trump también emitió una declaración en relación a la presentación no sellada. El 12 de febrero, el exmandatario afirmó que la presentación de Durham «proporciona pruebas irrefutables de que mi campaña y mi presidencia fueron espiadas por agentes pagados por la campaña de Hillary Clinton en un esfuerzo por desarrollar una conexión completamente fabricada».
Trump ha negado continuamente que tuviera intereses comerciales en Rusia o que estuviera en connivencia con funcionarios rusos durante las elecciones de 2016 y afirma que es el objetivo de una cacería de brujas.
Jack Phillips contribuyó a este informe.
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