La justicia catarí rechazó otorgar libertad bajo fianza a Manuel Guerrero Aviña, un hombre mexicano detenido hace 46 días por ser homosexual, informó este jueves desde México su hermano, Enrique Guerrero.
Se espera que Guerrero, quien se encuentra en prisión preventiva sin una acusación, reciba una respuesta la siguiente semana sobre la revisión de una impugnación de su defensa para que se le permita la libertad bajo fianza.
«El lunes esperamos tener la resolución, definitivamente se trata de un sistema que conoce poco de la expresión debido proceso», dijo su hermano al periodista Alejandro Dominguez de Milenio. «Manuel ha estado sin defensor, sin traductor, sin una explicación de las razones por las que fue detenido».
El Sr. Enrique explicó que debido a la movilización de la familia es que el Sr. Manuel cuenta con una abogada defensora.
Enrique detalló en una conferencia de prensa online que su hermano no recibe los medicamentos que necesita para el tratamiento contra el VIH que padece, a pesar de los reclamos hechos por su familia y por activistas a favor de la comunidad LGBT. Ellos piden a las embajadas de Reino Unido y México intervención urgente —debido a que Manuel cuenta con doble nacionalidad.
El hermano denuncia que Manuel es sometido a un «acto de tortura» al interrumpirle periódicamente el tratamiento de sus retrovirales contra el VIH para después hacerle interrogatorios clandestinos para que él diga con qué personas ha tenido relaciones sexuales.
Enrique señaló que no se tiene claridad de la acusación contra su hermano. También dijo que como mínimo el hombre permanecerá en prisión 30 días más.
Manuel Guerrero fue detenido en Doha, capital de Catar, el 4 de febrero tras acudir a una cita acordada a través de una aplicación donde la policía catarí lo recibió.
Las propias autoridades cataríes crearon un perfil falso y le dijeron a Manuel que acudiera con más personas de la comunidad LGBT. Un hombre marroquí que llegó poco después, también fue detenido y continúa encarcelado.
Además, a ambos les plantaron metanfetamina para inculparlos, según dijo Enrique.
La familia también denunció que mientras ha sido torturado psicológicamente, Manuel pasa largas horas sin agua ni alimento y no le dejan cortarse el cabello ni las uñas, porque dicen creer que con esto podrían contagiarse de VIH otras personas privadas de su libertad.
El Código Penal de Catar, en su artículo 285, castiga las relaciones sexuales extramatrimoniales, entre ellas las relaciones entre personas del mismo sexo, con hasta siete años de prisión, según Human Rights Watch.
El caso ha provocado que los grupos pro-LGBT y familiares exijan a los gobiernos de México y Reino Unido que intercedan por Manuel, quien cuenta con la ciudadanía mexicana y británica.
Con información de EFE.
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