Catorce senadores estatales demócratas en Nueva York emitieron una declaración conjunta para pedir la eliminación de los poderes de emergencia del gobernador Andrew Cuomo luego que un artículo revelara que su administración presuntamente encubrió la cifra de muertes en hogares de ancianos y se disculpara con los legisladores demócratas estatales en una conferencia telefónica privada.
“Si bien el COVID-19 ha puesto a prueba los límites de nuestra gente y nuestro estado, y, al comienzo de la pandemia, requirió que el gobierno reestructurara la toma de decisiones para emitir juicios de salud pública rápidos y necesarios, está claro que los poderes de emergencia ampliados otorgados al gobernador ya no son apropiados”, dijeron los 14 legisladores. “Si bien la autoridad del ejecutivo para emitir directivas vence el 30 de abril, instamos al Senado a avanzar y adoptar una derogación lo más rápidamente posible”.
Un artículo del New York Post, que incluía un audio, reveló que la secretaria de la gobernadora Melissa DeRosa, presuntamente les dijo a los legisladores demócratas que la administración de Cuomo retuvo las cifras del número de muertos en hogares de ancianos porque podrían ser «utilizadas en nuestra contra» por el Departamento de Justicia (DOJ) de la administración de Trump.
Cuando ellos se enteraron de la investigación, «nos quedamos paralizados», dijo DeRosa. «Así que nos disculpamos», agregó, según el NY Post. «Entiendo que estuvieron en (…) esa posición política con los republicanos».
DeRosa dijo el viernes por la mañana que sus comentarios que fueron publicados por el NY Post estaban «explicando que cuando recibimos la consulta del Departamento de Justicia, necesitábamos dejar de lado temporalmente la solicitud de la Legislatura para tratar primero la solicitud federal». Ella agregó: «Informamos a las cámaras sobre esto en ese momento».
DeRosa agregó: “Como dije en una llamada con los legisladores, no pudimos cumplir con su solicitud tan rápido como a cualquiera le hubiera gustado. Pero estamos comprometidos a ser mejores socios en el futuro, ya que compartimos el mismo objetivo de mantener a los neoyorquinos lo más saludables posible durante la pandemia”, según un tuit del portavoz de Cuomo, Rich Azzopardi.
El mes pasado, la procuradora general de Nueva York, Letitia James, publicó un informe que decía que los funcionarios del estado de Nueva York podrían haber subestimado las muertes en asilos de ancianos estatales hasta en un 50 por ciento.
“A medida que continúan la pandemia y nuestras investigaciones, es imperativo que entendamos por qué los residentes de hogares de ancianos en Nueva York sufrieron innecesariamente a un ritmo tan alarmante”, dijo James en un comunicado en ese momento. “Si bien no podemos recuperar a las personas que perdimos a causa de esta crisis, este informe busca ofrecer la transparencia que el público merece y estimular una mayor acción para proteger a nuestros residentes más vulnerables”.
Tras el informe de James, Cuomo se ha enfrentado cada vez más a pedidos para dimitir.
“¿A quién le importa [si] ellos murieron en el hospital, o si murieron en un hogar de ancianos? Murieron”, dijo Cuomo en una conferencia de prensa en enero en respuesta a la investigación, la cual generó más rechazo.
The Epoch Times se contactó con la oficina de Cuomo en busca de comentarios.
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