Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EE.UU. afirmaron esta semana que los informes de un trastorno del sistema nervioso conocido como síndrome de Guillain-Barré son «más comunes de lo esperado» en adultos mayores que recibieron las nuevas vacunas contra el VRS.
El jueves, la agencia afirmó que los elevados informes sobre el síndrome de Guillain-Barré, o SGB, «concuerdan con los de los ensayos», y se hace eco de un informe similar publicado por los CDC a principios de este año.
Desde principios de agosto, más de 10 millones de adultos mayores han recibido vacunas monodosis de Pfizer o GSK para protegerse contra el virus sincitial respiratorio, o VRS por sus siglas en inglés, que es una causa frecuente de síntomas similares a los del resfriado y puede ser peligroso para los lactantes y las personas mayores.
«La vacunación contra el VRS se sigue recomendando para adultos de [60 años o más] utilizando la toma de decisiones clínicas compartidas. Los CDC y la FDA están llevando a cabo evaluaciones activas de seguridad para evaluar los riesgos de SGB y otros eventos adversos de especial interés tras la vacunación contra el VRS. Los resultados de estos estudios ayudarán a orientar las futuras recomendaciones de los CDC sobre la vacuna contra el VRS», señalaron los CDC el jueves.
Tanto los CDC como la Administración de Alimentos y Medicamentos de EE.UU. afirman que están evaluando cualquier riesgo, pero no tienen planeado cambiar su recomendación sobre las vacunas contra el VRS, que consiste en que los pacientes a partir de 60 años hablen con su médico y luego decidan si se vacunan o no.
El nuevo informe de los CDC se centra en 28 casos del síndrome en personas vacunadas, y todos menos uno desarrollaron síntomas en un plazo de 21 días. Eso se tradujo en 1.5 casos por millón en personas que recibieron la vacuna GSK contra el VRS, y cinco casos por millón en receptores de la inyección de Pfizer.
En febrero, los CDC presentaron resultados similares sobre las vacunas contra el VRS y el síndrome de Guillain-Barré.
Según los CDC, entre 3000 y 6000 personas desarrollan cada año el síndrome de Guillain-Barré en Estados Unidos, ya sea tras haber sido infectadas por un virus o debido a una vacuna, y es más frecuente en personas mayores. La mayoría de las personas se recuperan totalmente, pero algunas tienen daño nerviosas nervioso permanente.
Se han notificado aproximadamente dos casos de SGB entre un millón de personas en las tres semanas siguientes al recibir la vacuna contra el VRS.
En mayo de 2023, la FDA autorizó el uso de dos vacunas diferentes, incluida la vacuna Abrysvo de Pfizer, contra el VRS, y las autoridades recomendaron una sola inyección para los adultos mayores de 60 años. Los CDC también recomendaron que las mujeres embarazadas recibieran la vacuna, ya que, según ellos, prevendría la infección entre los bebés.
A principios de este año, un portavoz de Pfizer emitió una declaración sobre el informe de los CDC, afirmando que: «La seguridad del paciente es nuestra máxima prioridad, y seguiremos controlando diligentemente todos los datos de seguridad notificados en los ensayos clínicos en curso sobre el VRS en adultos mayores y en los sistemas de farmacovigilancia posteriores a la comercialización».
The Epoch Times se puso en contacto con la empresa para hacer comentarios este viernes.
¿Qué es el síndrome de Guillain-Barré y el VRS?
El VRS es un virus muy común que puede causar infecciones en las vías respiratorias y los pulmones, y que suele aparecer en niños antes de los 2 años, según el sitio web de la Clínica Mayo.
Por lo general, los síntomas del virus son leves y se parecen a los del resfriado común, por lo que no requieren un tratamiento prolongado. Sin embargo, puede causar una enfermedad grave en ciertas personas, entre ellas los niños de 12 meses o menos, así como las personas con enfermedades cardíacas y pulmonares, las personas con un sistema inmunológico debilitado, los adultos mayores y los bebés prematuros, señala la clínica.
Los síntomas incluyen fiebre baja, tos seca, secreción nasal, dolor de cabeza o de garganta, aunque los casos graves pueden incluir respiración rápida o súbita, tos intensa, fiebre o coloración azulada de la piel por falta de oxígeno.
Mientras tanto las autoridades de salud describen el síndrome de Guillain-Barré como un trastorno neurológico en el que el sistema inmunológico ataca parte del sistema nervioso periférico. La enfermedad puede afectar al movimiento de los músculos y a los nervios que transmiten el dolor, las sensaciones táctiles y la temperatura, según el sitio web de la Organización Mundial de la Salud.
Los síntomas pueden incluir pérdida de sensibilidad en las piernas o los brazos, problemas para respirar o debilidad muscular, según dicen las autoridades. La enfermedad suele durar solo unas semanas, y la mayoría de los afectados se recuperan sin problemas a largo plazo.
Pero el EGB puede ser mortal. Según el sitio web, un pequeño número de pacientes «muere por complicaciones, que pueden incluir parálisis de los músculos que controlan la respiración, infección de la sangre, coágulos pulmonares o paro cardíaco».
«En raras ocasiones, las vacunas pueden aumentar el riesgo de que las personas contraigan el SGB, pero la probabilidad de que esto ocurra es extremadamente baja», afirma la OMS. «Los estudios demuestran que es mucho más probable que las personas contraigan el SGB por infecciones como la gripe que por la vacuna administrada para prevenir la infección, en este caso la vacuna contra la gripe. En ocasiones, la cirugía puede desencadenar el SGB».
Con información de Associated Press.
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