MANHATTAN, Nueva York— El ritual del mundialmente famoso descenso de la bola de cristal en Times Square que da la bienvenida al año nuevo se reanudó para recibir 2022. Los festejos de la víspera del año nuevo 2021 se habían cancelado debido al virus del PCCh (Partido Comunista Chino), fue la primera vez desde 1907.
La asistencia se redujo y todos los mayores de 5 años tuvieron que mostrar un comprobante de vacunación para poder participar en la fiesta.
Cualquier niño menor de 5 años que no estuviera vacunado debía ir acompañado de un adulto vacunado, declaró la oficina del alcalde.
El alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, dijo la semana pasada que además todo el mundo tenía que llevar una mascarilla, pero no fue así: muchas personas, incluida la policía, no llevaban mascarillas.
El alcalde electo, Eric Adams, elogió la decisión de de Blasio la semana pasada. «El alcalde ha hecho lo correcto al tomar medidas de precaución mientras aprendemos a vivir con COVID y luchamos contra la variante ómicron, y tanto los neoyorquinos como los visitantes pueden ahora disfrutar de Times Square y del resto de nuestra ciudad mientras damos la bienvenida a 2022».
Doug Stuart y su esposa, de Colorado, no se preocuparon demasiado por la nueva variante, ómicron.
«Estamos vacunados, llevamos mascarillas y hay cierto distanciamiento», dijo el Sr. Stuart riéndose un poco.
Su esposa dijo que el personal estaba haciendo un gran trabajo para controlar la multitud, y que ellos no asistieron el año pasado porque había «un poco de incertidumbre y no nos habíamos vacunado».
«Espero que la gente se vacune y lleve mascarillas si es necesario y haga lo necesario para que nuestro mundo vuelva a funcionar», añadió.
Stuart espera que el año que viene pueda venir más gente.
«Espero que haya más esfuerzos pacíficos en todo nuestro país y que se negocie por la paz», añadió.
Gwen Delfosse, de Francia, dijo que para sus hijos, que estaban presentes, era un sueño estar en Times Square para recibir el Año Nuevo.
Delfosse estaba muy preocupada por el virus del PCCh, «pero la vida sigue, así que tenemos que vivir y seguir adelante».
«Espero que el año que viene sea mucho mejor, porque hemos tenido catástrofes y esto no ha sido tan genial».
Victoria Christensen, espectadora por primera vez del descenso de la bola de cristal se mostró muy emocionada por participar en el evento. Ella está deseando terminar la escuela el año que viene.
En cuanto al virus, dijo que estaba «un poco preocupada», pero «hemos tomado las precauciones que el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades recomendó, nos vacunamos, recibimos la dosis de refuerzo, nos hacemos las pruebas de detección, [tenemos] nuestras mascarillas».
«Si yo pudiera decir una cosa al entrar en el año 2022, es que todo el mundo debería ser más amable con los demás y tener corazones más amables», dijo Morgan Price.
El año pasado «olvidamos que todos somos seres humanos y que todos tenemos sentimientos y emociones», opinó Price.
Price cree que hubo demasiados problemas relacionados con la raza, el cambio climático y la política.
«Deberíamos ser más amables los unos con los otros».
Austin y Christina Tretter también presenciaron el acto por primera vez. Ellos son trabajadores sanitarios de Minnesota. Su deseo para el nuevo año fue tener «más personal».
Los Tretter dijeron que han tenido escasez de personal durante los dos últimos años.
«La gente se va, es una locura. No tenemos suficiente personal», dijo Austin.
Christina cree que la razón por la que la gente se va es que están «agotados».
«No necesariamente por COVID, sino porque los hospitales están desbordados», aclara.
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