La comunidad de Chicago celebró una vigilia de oración el 7 de junio por el bebé que fue extraído a la fuerza del vientre de una madre adolescente antes de ser asesinada en Chicago, Illinois.
El bebé estuvo durante varias semanas luchando por su vida conectado a un sistema de soporte vital. La familia tuvo que pasar por un momento muy difícil.
A sus abuelos paternos se les concedió una extensión de su visa para que puedan permanecer en el país y puedan seguir ayudando al padre del niño, reportó Fox32.
????????SO SAD: baby Yovani’s prognosis remains grim as machines keep him breathing. He has suffered severe brain damage. https://t.co/nUYQx1i1DA
— Dolly Loretta Russo (@dolly19631966) 8 de junio de 2019
La familia del bebé, Yovani Yadiel López, se reunió en oración fuera del hospital y, por primera vez, su médico también se unió a ellos.
«Oramos por ellos no sólo ahora, sino por los muchos meses por venir», dijo el Dr. Brett Galley a Fox32.
De acuerdo con los médicos, cuando Yovani fue arrancado del útero de su madre su suministro de oxígeno quedó interrumpido causándole daño cerebral.
El padre del bebé estuvo todo este tiempo enfrentando la difícil decisión de si retirarle o no al niño el soporte vital. «Siento mucha presión, me siento triste», dijo Yovani López a Fox32.
El pasado 25 de mayo la familia celebró el funeral de Marlen Ochoa-López, madre del bebé.
Ochoa-López fue asesinada en abril. La policía dijo que la mujer de 19 años, que estaba embarazada de nueve meses, fue estrangulada hasta morir y que su bebé fue sacado a la fuerza de su cuerpo.
Lo joven había desaparecido el 23 de abril luego de dirigirse a una reunión organizada a través de Facebook, en una casa del Southwest Side, supuestamente para recoger artículos gratis de bebé.
Según informó la policía, Clarisa Figueroa, de 46 años, asesinó a Ochoa-López y luego le sacó al bebé de su vientre.
Después de sacar al bebé del vientre de su madre de 19 años, Figueroa supuestamente llamó al 911 para decir que acababa de dar a luz a un bebé que no respiraba, dijo la policía.
Los paramédicos transportaron a Figueroa al hospital de Oak Lawn, un suburbio de Chicago, donde, según se reportes, se sometió a un examen físico que determinó que no había dado a luz.
La policía comunicó el 16 de mayo que tres personas -Figueroa, su hija de 24 años, Desiree Figueroa, y el novio de Figueroa, Piotr Bobak, de 40 años- habían sido arrestados y acusados por la muerte de Ochoa-López.
Family Of Marlen Ochoa Wants To Know Why Alleged Killer Was Allowed To Stay With Baby At Hospital https://t.co/zJWQ93ISoO pic.twitter.com/rcjLPHYNHM
— CBS Chicago (@cbschicago) 21 de mayo de 2019
Funcionarios que no fueron alertados
Los fiscales dijeron que cuando Figueroa fue llevada al hospital junto al bebé, tenía sangre en la parte superior del cuerpo y en la cara, y que un empleado del hospital la limpió. También dijeron que Figueroa fue examinada en el hospital y que no mostraba signos físicos del parto.
La policía y la agencia de bienestar infantil de Illinois explicaron que el personal del Centro Médico Advocate Christ no los alertó después de comprobar que Figueroa no había dado a luz al bebé como ella decía.
El 18 de mayo, Jassen Strokosch, portavoz del Departamento de Servicios Infantiles y Familiares de Illinois, dijo que el 9 de mayo su entidad fue notificada de que existían interrogantes acerca de quién tenía la custodia del niño para poder entonces tomar decisiones médicas. Dijo que no podía especular sobre por qué no fueron contactados antes.
«No sabemos qué estaba pasando en el hospital», dijo.
Mimi Nguyen Ly contribuyeron a este informe.
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Historias de convicción:
Trabajó para la mafia y fue un adicto durante décadas, al fin se libera con ayuda de la meditación
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