Chicago planea distribuir USD 12.5 millones en subsidios de transporte a residentes de bajos ingresos para combatir el aumento de los precios de la gasolina en el estado, anunció la alcaldesa Lori Lightfoot el 31 de marzo.
El anuncio del programa, denominado Chicago Moves, se produce mientras los precios de la gasolina siguen subiendo en todo Estados Unidos, lo que hace que los estadounidenses tengan que pagar más en los surtidores.
Según datos del grupo automotriz AAA, el promedio nacional de gasolina al 1 de abril es de USD 4.21, frente a los USD 2.87 de hace un año, pero los residentes de Illinois están pagando un promedio de USD 4.46 en los surtidores, en comparación con el promedio nacional. La gasolina en el estado tenía un precio de USD 3.86 hace un mes y USD 3.08 hace un año.
“Los últimos dos años han sido sumamente difíciles para muchos de nuestros residentes, en particular para nuestras poblaciones más vulnerables”, dijo Lightfoot al anunciar el programa. “Durante la pandemia, hemos enfrentado colectivamente la tragedia, y muchos de nosotros hemos enfrentado las dificultades económicas que la acompañaron. Ahora, a medida que la inflación aumenta constantemente y el costo de la gasolina continúa aumentando, nuestros residentes desfavorecidos están soportando una carga financiera significativa”.
De los USD 12.5 millones destinados al programa, USD 7.5 millones se destinarían a 50,000 tarjetas de gasolina prepagas por valor de USD 150 y USD 5 millones a 100,000 tarjetas de transporte público por valor de USD 50.
Al anunciar el nuevo programa, Lightfoot citó datos de la AAA y del Centro de Tecnología Vecinal (CNT) que muestran que los habitantes de Chicago pagan ahora una media del 4.5 por ciento de sus ingresos anuales en gasolina, frente al 3.1 por ciento de sus ingresos anuales hace un año.
“Chicago Moves se esfuerza por brindar el alivio que tanto se necesita y aliviar parte de este dolor. Al subsidiar el costo de la gasolina y el tránsito, este programa permitirá a los participantes ahorrar sus recursos para otros gastos críticos”, dijo Lightfoot.
La ciudad se asoció con Fifth Third Bank y Onbe, una plataforma de emisión de pagos, para llevar a cabo el programa y entregar las tarjetas prepagadas e implementar el procesamiento de pagos sin cargos.
Para poder entrar al programa de las tarjetas de gasolina, los residentes deben tener 18 años o más, tener una calcomanía actual y válida de la ciudad con la información postal correcta para su vehículo y tener un ingreso familiar igual o inferior al 140 por ciento del ingreso medio del área de Chicago.
Por ejemplo, el ingreso máximo para un hogar de una sola persona es de USD 91,420 y para un hogar de dos personas es de USD 104,440.
Los residentes deben solicitar las tarjetas, que se distribuirán a través de un “sistema de lotería”, después del 27 de abril y serán válidas por un año.
Las tarjetas solo se pueden usar para la compra de combustible en estaciones de servicio ubicadas en Chicago y solo se otorgará una por hogar elegible.
De las 100,000 tarjetas de transporte público, 75,000 se darán prioritariamente a los residentes en vecindarios de bajos ingresos que dependen en gran medida del sistema de transporte público de la ciudad, dijeron las autoridades.
Mientras el coste de la gasolina se dispara en todo Estados Unidos, agravado por el conflicto entre Rusia y Ucrania, varios estados del país han puesto en marcha iniciativas similares para proporcionar a los estadounidenses un alivio financiero
Tanto los estados de Maryland como Georgia dejaron de cobrar impuestos a la gasolina.
A principios de marzo, el gobernador de California, Gavin Newsom, anunció que estaba trabajando con los legisladores para devolver dinero a los contribuyentes con el propósito de compensar el incremento de precios de la gasolina en el estado, que son los más altos del país.
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