En los últimos días, los principales medios de comunicación chinos han informado que la edad de jubilación podría elevarse dentro de poco tiempo, y los 65 años podrían convertirse en la nueva edad de jubilación tanto para hombres como para mujeres.
El Partido Comunista Chino (PCCh) incluyó por primera vez la política de elevar la edad de jubilación en su plan quinquenal de reformas, publicado el mes pasado tras su máxima reunión, el 3ra Sesión Plenaria. El PCCh dijo que el aumento sería «gradual» y se basaría en una «participación voluntaria con la flexibilidad adecuada». El cambio afectará directamente a más de 500 millones de ciudadanos chinos que componen la población activa del país.
Actualmente, la edad de jubilación en China es de 60 años para los hombres y de 50 ó 55 para las mujeres, dependiendo de su ocupación.
La población china mayor de 60 años pasó de 126 millones en 2000 a 297 millones en 2023, duplicando su proporción respecto a la población total, según datos públicos.
Según una proyección para 2021 del Fondo Monetario Internacional, la población china mayor de 65 años aumentará hasta casi 400 millones en 2049, lo que convertirá a China en una sociedad «rápidamente envejecida», mientras que la población china en edad de trabajar (de 15 a 64 años) ya ha empezado a disminuir.
Mientras tanto, la tasa de natalidad china continúa disminuyendo, alcanzando un mínimo histórico este año. Beijing teme quedarse pronto sin fondos de pensiones, ya que cada vez más jubilados necesitan ayuda y hay menos trabajadores jóvenes que aporten a los fondos de pensiones.
Con la atonía de la economía china y el aumento de la tasa de desempleo, los fondos de la seguridad social aportados por los jóvenes también han disminuido. El fondo estatal de pensiones de China se agotará en 2035, según un informe de la Academia China de Ciencias Sociales titulado «Informe actuarial de pensiones de China 2019-2050».
En cuanto al probable aumento inminente de la edad de jubilación, Li Hengqing, contable y economista del Instituto de Información y Estudios Estratégicos, declaró a The Epoch Times el 13 de agosto que el impulso para posponer la jubilación demuestra que la reciente situación socioeconómica no ha dejado otra opción al gobierno central del PCCh.
«La pandemia de tres años ha agotado los dos fondos: el de pensiones y el sanitario. Si no lo posponen ahora, muchas personas que deberían recibir pronto sus pensiones se encontrarán con que no reciben nada. Creo que por eso se ha vuelto a plantear y debe aplicarse rápidamente», afirmó Li.
Sun Kuo-hsiang, profesor de asuntos internacionales y empresariales en la Universidad Nanhua de Taiwán, también cree que el cambio es inminente, basándose en lo establecido en el nuevo plan quinquenal del PCCh.
«El plan dice que se aumentará la edad de jubilación gradualmente en los próximos cinco años, lo que significa que China introducirá un plan político más específico antes de 2025, y la aumentará año a año en los cinco años que van de 2025 a 2030».
La cuestión del desempleo
El PCCh informó oficialmente que la tasa de desempleo urbano de China era del 5% en junio y del 13.4% entre los jóvenes chinos de 16 a 24 años.
Los 447 millones de habitantes de las zonas rurales de China no están incluidos en las estadísticas oficiales de desempleo. El mundo exterior calcula que la tasa de desempleo global real en China es del 50 por ciento si se tienen en cuenta tanto la población urbana como la rural y el trabajo a tiempo parcial. Sólo el 48% de los licenciados universitarios han recibido ofertas de trabajo este año, según el importante sitio web de empleo chino Zhaopin.
Mientras tanto, muchas empresas chinas han despedido a un gran número de empleados por reducción de plantilla o quiebra, como informan con frecuencia los medios de comunicación chinos y se publica en las redes sociales chinas.
Sun dijo que retrasar la jubilación significa que los trabajadores de más edad permanecerán más tiempo en sus puestos de trabajo, y que en realidad disminuirán las oportunidades de empleo de los más jóvenes.
«Por eso China parece no atreverse a subirla [a 65 años] de golpe, lo que puede causar un gran impacto a corto plazo. Es decir, la tasa de desempleo actual aumentará significativamente. Por eso la elevarán de 60 a 65 años gradualmente año tras año», dijo Sun.
Li afirmó que el mercado laboral chino ya está agotado, y elevar la edad de jubilación ejercería más presión sobre el desempleo.
«La gente ya ve a su alrededor un gran número de desempleados. Y a los que podrían cobrar su pensión el mes que viene, de repente se les dice que se pospone un cierto número de años. No sólo tienen que volver a trabajar o ingeniárselas para ganar algo de dinero haciendo trabajos a tiempo parcial, sino que definitivamente no se atreverán a consumir sino a ahorrar para su propia jubilación. Esto significa que China ha entrado en un círculo extremadamente vicioso, por lo que es probable que la economía china siga empeorando», afirmó Li.
Sun afirmó que China se enfrenta a un problema cada vez más grave de envejecimiento de la población, unido al descenso de la tasa de natalidad y a la disminución de la población activa, «lo que ejerce una gran presión sobre el sistema de seguridad social y provoca el aumento de la carga de las pensiones y los gastos médicos. Podría ser imposible de soportar para China en el futuro».
Con información de Luo Ya y Reuters.
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