El primer ministro de Ontario, Doug Ford, dice que la atención debería centrarse en China como un mal actor en lugar de tener disputas comerciales entre los aliados Canadá y Estados Unidos.
Ford realizó estos comentarios en una aparición en Fox News mientras el presidente entrante de Estados Unidos, Donald Trump, sigue manteniendo su promesa de imponer aranceles a las importaciones canadienses y persiste en su discurso de fusionar Canadá con Estados Unidos, diciendo que puede usar la «fuerza económica» para lograrlo.
«China es el problema», dijo Ford durante una entrevista con Jesse Watters de Fox News el 7 de enero. «China está enviando piezas baratas a México, y luego a México, poniéndoles una etiqueta de ‘Hecho en México’ y enviándolas a través de Estados Unidos y Canadá, lo que les cuesta empleos a estadounidenses y canadienses. México tiene que tomar una decisión: con Beijing o con Washington».
En los últimos meses, Ford ha criticado a México, afirmando que el país actúa como una «puerta trasera» para las importaciones chinas, y ha instado a su gobierno a alinearse con los aranceles canadienses y estadounidenses sobre los productos chinos. En octubre pasado, Ottawa impuso un recargo del 100 por ciento a los vehículos eléctricos fabricados en China y un recargo del 25 por ciento al acero y al aluminio, después de aranceles similares introducidos por Washington.
Ford repitió sus críticas a China durante una conferencia de prensa el 8 de enero en Ontario, donde dijo que «China está estafando a los trabajadores estadounidenses secuestrando las cadenas de suministro globales para beneficiar injustamente a las empresas chinas a expensas de la industria y las comunidades estadounidenses».
Los comentarios del primer ministro se dieron después de la conferencia de prensa de Trump del 7 de enero, en la que el presidente entrante de Estados Unidos dijo que consideraría el uso de la «fuerza económica» para fusionar Canadá con Estados Unidos. Dijo que deshacerse de la frontera «trazada artificialmente» entre los dos países «sería mucho mejor para la seguridad nacional», y agregó que Estados Unidos «básicamente protege a Canadá».
Trump también reiteró su intención de imponer aranceles a Canadá y México, citando preocupaciones sobre los cruces fronterizos ilegales y el tráfico de drogas ilícitas y armas de fuego a Estados Unidos desde ambas fronteras.
Ford dijo que las declaraciones de Trump sobre hacer de Canadá parte de Estados Unidos no cuentan con el apoyo de los gobernadores, senadores y congresistas republicanos y demócratas con los que ha estado hablando.
«No están de acuerdo con lo que propone el presidente Trump», dijo Ford. «Nuestro país no está en venta. Nunca lo estará».
Dijo que muchos de los legisladores estadounidenses con los que ha hablado también ven a China como el problema número uno a abordar mientras continúa «secuestrando» las cadenas de suministro globales.
«Los legisladores estadounidenses están llevando a cabo uno de los cambios económicos y geopolíticos más ambiciosos en décadas, a medida que Estados Unidos se desvincula de China y sus representantes globales», dijo Ford. «Esto no será fácil. Requerirá una visión a largo plazo. Requerirá dedicación y, sobre todo, requerirá amigos y aliados. Canadá está aquí para ayudar».
Trump ha bromeado reiteradamente sobre convertir a Canadá en el estado «51» de Estados Unidos desde su reunión de noviembre de 2024 con el primer ministro Justin Trudeau, a quien ha llamado el «gobernador» de Canadá en múltiples ocasiones.
Además de absorber a Canadá, Trump expresó interés en que Estados Unidos controle el Canal de Panamá y Groenlandia. Criticó a Panamá por «abusar de ese regalo» al permitir que China opere el canal, que fue construido por Estados Unidos a principios del siglo XX. Beijing controla dos de los cinco puertos principales de Panamá –Balboa en el lado del Pacífico y Cristóbal en el lado del Atlántico– a través de Hutchison Port Holdings, con sede en Hong Kong.
Fortaleza Am-Can
En la conferencia de prensa del 8 de enero, Ford propuso una nueva alianza de sistemas energéticos entre Ontario y Estados Unidos en un intento de evitar una guerra comercial entre Canadá y su vecino del sur.
Ford dijo que la iniciativa de energía limpia, apodada «Fortaleza Am-Can», impulsará el crecimiento económico en ambos lados de la frontera.
Fortaleza Am-Can aprovechará los recursos de Ontario para construir la red integrada de energía y electricidad Am-Can para fomentar más exportaciones de energía y electricidad canadienses a Estados Unidos, lo que generará más empleos en ambos países, dijo Ford.
«Trabajando juntos, Canadá y Estados Unidos pueden ser los países más ricos, más exitosos, más seguros y más protegidos del planeta», dijo a los periodistas desde el complejo energético de Darlington en Courtice, Ontario.
«Trabajando juntos podemos marcar el comienzo de un nuevo siglo para Estados Unidos y Canadá, una época de crecimiento, creación de empleo, seguridad y prosperidad sin precedentes».
Ford destacó los beneficios para ambos países, diciendo que Canadá y Estados Unidos están mejor cuando son vistos como socios iguales con ofertas únicas en ambos lados de la frontera.
«Tenemos los minerales esenciales que necesitan, tenemos la energía que necesitan. Tenemos muchas cosas que necesitan», dijo Ford.
Fortaleza Am-Can se centraría en la energía de todo tipo e incluiría el desarrollo de nuevos oleoductos y gasoductos naturales y el refuerzo de los existentes entre Canadá y Estados Unidos para promover el flujo de energía a través de las fronteras, dijo el primer ministro.
También incluiría la agilización de la aprobación de nuevos reactores nucleares modulares pequeños y grandes, dijo Ford, haciendo hincapié en la infraestructura nuclear existente de Ontario y sus reactores modulares pequeños planificados.
A Ford también le gustaría que se fortaleciera aún más la Reserva Estratégica de Petróleo de Estados Unidos como parte de la iniciativa energética Am-Can para proteger a ambos países de la manipulación de los precios mundiales del petróleo.
El primer ministro también está sugiriendo el establecimiento de un grupo de trabajo transfronterizo con legisladores estadounidenses y canadienses y expertos en energía y seguridad para garantizar que ambos países se adhieran a las mejores prácticas para la seguridad del sistema eléctrico contra interferencias extranjeras, ataques cibernéticos, terrorismo y eventos climáticos extremos.
Ford ha estado promocionando los beneficios de unas relaciones más estrechas entre Canadá y Estados Unidos desde que Trump abordó por primera vez el tema de los aranceles en noviembre. Además de «hablar regularmente» con sus homólogos en Estados Unidos, Ford ha hecho varias apariciones en cadenas de televisión estadounidenses en las que destacó la importancia de la relación entre Canadá y Estados Unidos.
La última conferencia de prensa de Ford ocurre un mes después de que prometiera que Ontario cortaría las exportaciones de energía a Estados Unidos si Trump sigue adelante con aranceles del 25 por ciento sobre todos los productos canadienses.
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