La ciudad de Nueva York no enviará circulares de despido a 22,000 trabajadores el lunes como estaba previsto, anunció el alcalde Bill de Blasio en una conferencia de prensa en el ayuntamiento.
Los líderes del sindicato de trabajadores acudieron con el alcalde y lo convencieron de demorar las circulares mientras intentan convencer a los legisladores del estado de reunirse y aprobar una plan de préstamos a largo plazo que resuelva la crisis de presupuesto que llevará a los despidos a menos que se resuelva.
«Espero que esta pausa conduzca a un mayor progreso en Albany debido al intenso compromiso de los trabajadores para conseguirlo», dijo a los periodistas el demócrata de Blasio.
La aprobación del préstamo por los legisladores del estado «evitaría instantáneamente los despidos», añadió después.
Las circulares de despido están listas para ser impresas, dijeron los funcionarios de la ciudad. Los despidos entrarán en vigor el 1 de octubre.
Si nada sucede, 22,000 empleados serán despedidos, dijo el alcalde a los periodistas a inicios de este mes.
«Es un número enorme y doloroso. Se parece al tipo de cosas que teníamos que hacer hace décadas, pero el trabajo aquí es intentar evitarlo si podemos», dijo.
La perspectiva de tantos despidos se esbozó por primera vez en junio. En ese momento, los funcionarios de la ciudad dijeron que tenían un déficit de 1000 millones de dólares.
En los últimos días, los funcionarios dijeron que querían pedir prestados hasta 5000 millones de dólares.
Hay un apoyo creciente para la aprobación de un plan de préstamos a largo plazo, afirmó el alcalde, señalando las declaraciones en apoyo emitidas por grupos como la Asociación de Condados del Estado de Nueva York, el Comité de Ciudadanos por los Niños y el Comité Municipal de Trabajo.
Pero sin una prueba de progreso concreta por parte del estado, las circulares serán enviadas el martes, ya que los funcionarios de la ciudad reevalúan la situación a diario.
«Solo tenemos un poco de tiempo», dijo de Blasio. «Si no hay avance, entonces tendremos que proceder».
La ciudad de Nueva York tiene cerca de 327,000 empleados municipales, de acuerdo con la Comisión de Presupuesto de los Ciudadanos.
Los funcionarios de la ciudad han lamentado la falta de fondos de estímulo por parte del gobierno federal, recurriendo al estado para obtener un influjo de fondos. Al igual que otros estados, Nueva York se enfrenta a una crisis presupuestaria debido a una menor actividad económica, el aumento del desempleo y otros efectos derivados de las duras medidas impuestas para tratar de frenar la propagación del virus del PCCh (Partido Comunista Chino), que causa el COVID-19.
Los legisladores del estado han dado pocas indicaciones de que estén dispuestos a volver a reunirse para considerar las solicitudes de préstamo.
La líder demócrata de la Mayoría del Senado Andrea Stewart-Primos dijo a finales de junio que los senadores estaban «abiertos a aprobar la autorización de préstamos limitados, pero hay que trabajar más para desarrollar un consenso en torno a un enfoque sólido», pero instó a la «prudencia» en el desarrollo de un plan.
La mayoría del Senado no respondió a la solicitud de comentarios.
El gobernador demócrata de Nueva York, Andrew Cuomo, ha dicho que se opone a conceder a la ciudad la capacidad de préstamo. «Pedir prestado es fácil, pagar es difícil», dijo Cuomo a los periodistas a principios de este verano.
Las alternativas a los despidos masivos o a los fondos de emergencia incluyen el ofrecimiento de un incentivo de jubilación anticipada, han dicho algunos líderes sindicales.
El Comité Municipal de Trabajo dijo en una carta al alcalde la semana pasada que los movimientos a corto plazo incluyen la emisión de bonos a una tasa de interés más baja y la posibilidad de solicitar el Programa de Liquidez de Bonos Municipales de la Reserva Federal.
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