Coalición California-México ayuda a mujeres y niñas en una «zona de tolerancia» de comercio sexual

TIJUANA, México.  En una tarde cálida y luminosa de enero, las mujeres en las calles de una zona de tolerancia de Tijuana, Zona Norte, se apoyan en las paredes de los hoteles en ruinas o de los «clubes de caballeros».

Algunas están solas, mirando hacia sus teléfonos inteligentes entre los silbidos de los transeúntes. Algunas, sin máscaras, se paran juntas y conversan.

El negocio de la venta de sexo continúa de día o de noche (con o sin pandemia) en el área cuya extensión abarca tres cuadras.

Dentro de los clubes, hay mujeres adultas y menores de edad disponibles para cumplir con las solicitudes que les hacen, dijeron los miembros del Proyecto Rahab a The Epoch Times. El Proyecto Rahab es una coalición contra la trata de personas; la mayoría de sus miembros son de la parte norte del estado mexicano de Baja California y del sur de California.

Debido a que el viaje desde los condados de L.A. y Orange hasta el distrito la zona de tolerancia es bastante corto, muchos clientes vienen de California, aunque la clientela proviene de todo el mundo. En el camino desde la frontera con Estados Unidos, las vallas publicitarias promueven clubes de caballeros con imágenes sugerentes de mujeres.

El grupo está preocupado por la explotación que se lleva a cabo en la zona de comercio sexual, y ofrece ayuda a quienes buscan romper sus vínculos con ese lugar. Aunque la prostitución es ilegal en Tijuana, la policía la ignora en esta área. The Epoch Times vio a la policía parada junto a sus autos en la Zona Norte.

Los cárteles de la droga mantienen en funcionamiento el negocio de la trata de personas, dijeron los miembros del Proyecto Rahab a The Epoch Times. Es difícil recopilar datos sobre el alcance del problema debido a la amenaza de los cárteles, dijeron.

Hola Amiga

Una residente de Baja California, que ha ayudado a las mujeres en la Zona Norte durante más de cuatro años, habló con The Epoch Times, solicitando que usemos el seudónimo de María.

«Yo digo ‘Hola amiga, ¿Cómo estás?’. Les hablas como si fueran tu prójimo y estás tratando de mostrarles el amor de Jesús», dijo Mary.

“Las trato como me trato a mi o a mis amigas… Son como nosotras. Cuando hablas con ellas, cuando intentas conectarte con ellas, esa es la actitud que debes tener”.

Mary tiene una licenciatura en psicología y asistió a una institución de aprendizaje cristiano donde recibió formación en teología para establecer casas de culto. Se desempeñó como directora de un centro de acogida, en el sur de California, durante algún tiempo.

Acoge con regularidad a participantes en viajes misioneros de corta duración al estado mexicano de Baja California. Muchos de los participantes en su ministerio son de los condados de Orange, San Diego y Los Ángeles.

Mary dijo que su ministerio se unió primero para la adoración y para animar a quienes trabajan con personas necesitadas en esta área. El ministerio luego empezó a ayudar a las víctimas del comercio sexual en esta parte de Tijuana.

Actualmente proporciona elementos esenciales, como alimentos, productos femeninos y artículos para la salud. También brinda comidas, cortes de cabello y otros servicios. El asesoramiento y el estímulo espiritual son una parte importante de su misión.

Magdalene Hope

Doug Bennett, fundador del ministerio religioso sin ánimo de lucro, Magdalene Hope, facilita regularmente lo que él llama «contactos callejeros».

“El objetivo general es compartir un mensaje de esperanza y amor a través de Jesucristo y hacer saber a las mujeres que hay una salida”, dijo Bennett a The Epoch Times.

“Repartimos mochilas a las mujeres de la zona de tolerancia. Las mochilas consisten en todo lo que una mujer necesitaría durante el transcurso de un fin de semana mientras es víctima de la trata”.

Su ministerio está establecido en Bakersfield, California, y tiene un capítulo en el condado de Orange. Bennett dijo que ha estado ayudando a las mujeres, durante 11 años, a dejar voluntariamente el trabajo sexual forzado que ejercen.

Además de su trabajo en Tijuana, el ministerio de Bennett les brinda a las mujeres, que salen de la trata, un refugio seguro durante un año en Bakersfield. El refugio incluye asesoramiento, terapia y restauración en un entorno basado en la fe.

“Hemos conocido a mujeres en la zona de tolerancia de todas partes de México, incluida la Ciudad de México, que han sido traídas a Tijuana para venderlas”, dijo Bennett.

«Estos traficantes transportan a las mujeres por la Interestatal 5 de ciudad en ciudad, y no es raro que estas mujeres nos hayan visto [a Magdalene Hope] en una ciudad diferente porque los traficantes trasladan a las mujeres a diferentes regiones para venderlas y así mantener un producto fresco para que los hombres lo compren y mantener a las fuerzas de seguridad adivinando o confundidas sobre su paradero».

Su participación en Proyecto Rahab comenzó cuando el proyecto se formó por primera vez, hace tres años.

Proyecto Rahab

En febrero de 2018, el Proyecto Rahab reunió a unas pocas personas, en su mayoría sin capacitación y con pocos recursos, dedicadas a poner fin a la trata de personas, dijo en un correo electrónico el fundador del proyecto, Adam Stieve, a The Epoch Times.

El proyecto comenzó con solo un puñado de personas, casi exclusivamente mexicanas. Pero muchos estadounidenses finalmente se unieron, proporcionando más recursos y capacitación. Ahora incluye más de 25 organizaciones.

“La mayoría de los nombres de estas organización son poco conocidos”, dijo Stieve. Sin embargo “las organizaciones estadounidenses bien financiadas no están presentes allí. Lamentablemente, casi no se presta atención a esta área que se encuentra a pocas millas de San Diego. Hasta ahora, ha sido ignorada y olvidada en gran medida, excepto por algunas personas valientes».

Añadió: «Sólo con la unión de estos devotos servidores hay alguna posibilidad de combatir las fuerzas del mal, incluidos los poderosos carteles de México».

El 16 de enero, Proyecto Rahab inició el primero de una serie de seminarios de capacitación.

Este primer seminario fue para los cuidadores, los cuales pusieron su corazón en fortalecer y reintegrar a las víctimas, dijo Stieve. Asistieron unas 70 personas.

“El Proyecto Rahab se involucra en todas las áreas de la lucha contra la trata de personas, que incluyen prevención, protección, enjuiciamiento y asociación”, dijo Stieve.

El fundador del proyecto dijo que la capacitación de los cuidadores los ayudaría a identificar las diferentes etapas del trastorno de estrés postraumático en las víctimas y les brindaría los tratamientos adecuados para ayudar a estabilizarlas inicialmente.

La capacitación adicional incluirá identificar los signos de la trata de personas, trabajar con las autoridades para combatirla, cómo enseñar habilidades para la vida a las víctimas para que se reintegren en la sociedad, y cómo acceder y compartir recursos.

Entre los expertos que impartieron la capacitación en el primer seminario se encontraba un consejero de Fort Worth, Texas, que detalló la terapia aprobada por la Asociación Estadounidense de Psiquiatría que se adaptó a las víctimas de explotación sexual comercial, incluidos los niños.

Muchas víctimas solo han conocido el miedo y la desesperanza, dijo Stieve. La capacitación ayudará a los cuidadores a establecer un entorno seguro para ellas.

Además de ser víctimas de trata, muchas víctimas también se están recuperando de la adicción a las drogas y de traumas de violencia doméstica, dijo Stieve.

“El viaje comienza con la desintoxicación y termina con la propiedad de una vivienda y un trabajo real”, dijo.

Stieve también es el fundador de Las Aves del Paraíso, la primera casa segura en Baja California diseñada específicamente para mujeres adultas y sus hijos. Ha estado involucrado en iniciativas contra la trata de personas en California y ha trabajado en México desde 2016 ayudando a construir hogares, clínicas médicas y orfanatos; distribuir alimentos y otros productos básicos. Además, ha ayudado a proporcionar otras formas de atención.

Para la mayoría de los estadounidenses, Tijuana es una ciudad notoria por estar ubicada en la frontera, dijo Stieve. «Pero justo al otro lado del muro hay miles de víctimas atrapadas en una pesadilla sin fin».

“Los californianos deben ser conscientes de que el comercio del turismo sexual transfronterizo continúa impulsando esta industria ilícita. Un ‘viaje rápido’ a través de la frontera tiene consecuencias”.

Dijo que están trabajando para educar a las personas en México, con el propósito de evitar que se conviertan en víctimas, especialmente sus hijos.

“Este trabajo no es para los débiles de corazón, especialmente en un área controlada por el cartel”, dijo. “Pero este esfuerzo binacional está creciendo en fuerza y en números. La coalición está marcando la diferencia”.

Para obtener más información, envíe un correo electrónico a Adam Stieve [email protected].

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