George Conway, uno de los cofundadores del Proyecto Lincoln contra Trump, pidió el 16 de febrero cancelar el grupo tras las acusaciones de acoso sexual contra otro cofundador, John Weaver.
Conway, quien dimitió en agosto del año pasado, hizo las declaraciones en respuesta al exasesor principal del proyecto, Kurt Bardella.
«Simplemente cancélalo de una vez(…) se acabó», escribió Bardella en Twitter, en respuesta a un informe de los medios de comunicación según el cual varios fundadores del Proyecto Lincoln estaban al tanto de las acusaciones de acoso sexual contra Weaver ya en marzo de 2020.
«Es una pena y no debemos olvidar el duro trabajo de tanta gente y las cosas positivas que hizo la organización, pero sí, creo que esto es lo correcto», respondió Conway en la plataforma de redes sociales.
It’s a shame, and we shouldn’t forget the hard work of so many people and the positive things the organization did, but yes, I think this is right. https://t.co/To9dKcrigm
— George Conway (@gtconway3d) February 16, 2021
Al menos 21 hombres alegaron que fueron acosados sexualmente por Weaver a través de mensajes de texto. Algunos de los mensajes insinuaban que si los individuos correspondían a sus insinuaciones, sus carreras podrían ser impulsadas. Un individuo alegó que solo tenía 14 años cuando empezó a recibir los mensajes de Weaver.
En enero, Weaver admitió haber enviado mensajes «inapropiados» y pidió disculpas «a los hombres a los que hice sentir incómodos».
El Proyecto Lincoln es un comité de acción política dirigido por actuales y antiguos republicanos. El proyecto respaldó al demócrata Joe Biden para la presidencia y trabajó para evitar la reelección del expresidente Donald Trump.
Durante el ciclo electoral 2019-20, el grupo recaudó más de 87 millones de dólares y gastó más de 81 millones, según el Center for Responsive Politics. El Proyecto Lincoln sacó anuncios agresivos y contundentes hasta captar la atención de los estrategas demócratas, algunos de los cuales dijeron que los republicanos del grupo batallaban más contra Trump que algunos demócratas.
Horas antes, Conway, marido de la exasesora de Trump, Kellyanne Conway, pidió al grupo que «se limpie», diciendo que una investigación dentro del Proyecto Lincoln debería ser «exhaustiva» y «no un encubrimiento.»
«LA MENTIRA TIENE QUE PARAR», dijo Conway. «Ahora está claro que, desde el pasado *MARZO*, las personas que tenían el control operativo del Proyecto Lincoln fueron informadas de las depredaciones de Weaver. Ya es suficiente. LP tiene que renunciar a los acuerdos de confidencialidad y confesar».
Seis exempleados del grupo están luchando para que se les libere de sus acuerdos de no divulgación para poder hablar abiertamente de las acusaciones de acoso sexual contra Weaver.
En una declaración de la semana pasada, las seis personas dijeron que deseaban hablar sobre el «acoso perpetrado por John Weaver, el que hemos experimentado o presenciado», el conocimiento del «acoso de otras personas por parte de John Weaver» y sobre cualquier otra información «específica de la situación de John Weaver que pueda ayudar a la prensa, al público y a nuestros donantes en cuestiones relevantes para el interés público y para los intereses de los numerosos y leales seguidores y pequeños donantes del Proyecto Lincoln».
«Esperar que las víctimas y aquellas personas cercanas a las víctimas se pongan en contacto y se involucren con las personas y la organización acusadas de proteger al mismo depredador en cuestión es absurdo, irrazonable e insensible», decía el comunicado.
El Proyecto Lincoln no respondió inmediatamente a una solicitud de comentarios de The Epoch Times.
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