AUSTIN, Texas— Los abogados de los partidarios del «Tren Trump» demandados ante una corte civil, negaron las acusaciones según las cuales sus clientes acosaron o amenazaron a los ocupantes del autobús de la campaña de Biden-Harris que circulaba por una carretera de Texas en 2020.
Las declaraciones de apertura en la sala de la corte del distrito oeste de Estados Unidos el 9 de septiembre detallaron las denuncias respecto a que los acusados del Tren Trump planearon acciones «peligrosas e ilegales» para sacar al autobús de campaña de la ciudad.
Los abogados defensores rebatieron que el caso contra sus clientes no era más que una «guerra legal» y un intento de los demócratas de silenciar los derechos de la Primera Enmienda de los partidarios de Trump y castigar a sus oponentes políticos.
Los abogados de los demandantes mostraron al jurado videos del llamado «Tren Trump» —una caravana de activistas republicanos que exhibían banderas en sus vehículos en apoyo del expresidente Donald Trump— grabados por los demócratas en el autobús.
Entre los demandantes figuran David Gins, miembro del equipo de campaña de Biden; Wendy Davis, exsenadora por el estado de Texas, que en su día compitió con el gobernador Gregg Abbott; y Timothy Holloway, conductor del autobús.
Los solicitantes demandaron a varios miembros de la caravana, alegando que violaron la Ley del Ku Klux Klan de 1871 al conspirar para interrumpir la campaña del presidente Joe Biden para la presidencia en 2020 e intimidar a los que iban en el autobús.
«Los que conducían sabían que lo que hacían estaba mal», dijo al jurado el abogado demandante Samuel Hal.
Los videos compartidos en las redes sociales, incluidos algunos grabados por partidarios de Trump, muestran automóviles y camionetas que circulan junto al autobús de campaña mientras viajaba de San Antonio a Austin el 30 de octubre de 2020.
La demanda afirma que los partidarios de Trump encajonaron el autobús mientras lo ralentizaban y le impidieron salir de la autopista. El conductor del autobús supuestamente tuvo que hacer maniobras evasivas para evitar una colisión.
Los abogados de la parte demandante presentaron publicaciones de los acusados en las redes sociales, algunas con insultos y blasfemias por parte de los acusados en un intento de demostrar su intención y coordinación.
Además, los abogados de los demandantes dijeron que sus clientes sufrieron «angustia mental» y por lo tanto merecen una indemnización no especificada.
Los demandados que siguen en el pleito son: Steve y Randi Ceh, Eliazar Cisneros, Dolores Park y Joeylynn y Robert Mesaros. Diferentes abogados los representan.
Jason Geaves, abogado del pastor Steve Ceh y su esposa, Randi, de Canyon Lake, dijo que no participaron en el «Tren Trump» ese día porque estaban trabajando.
Steve Ceh declaró a The Epoch Times que cree que él y su esposa eran un objetivo porque son cristianos activos en política.
Hasta un par de semanas antes del juicio, la pareja, que vive en una casa rodante de 40 pies, se representó a sí misma porque ningún abogado quería hacerse cargo de su caso.
«Creo que esto es un acto de Dios. Él intervino para conseguirnos abogados», dijo Steve Ceh.
Los acusados Joeylynn y Robert Mesaros, de New Braunfels, dijeron a The Epoch Times que no hicieron nada malo.
«Creemos que ganaremos en el juicio, pero tememos que los demandantes sigan apelando porque para ellos el punto no es la verdad, es la intimidación», afirmó Joeylynn Mesaros. Agregó que ella y su esposo lanzaron una recaudación de fondos en www.FreeSpeechDefender.com para pagar sus honorarios legales.
«Mis clientes fueron injustamente difamados durante tres años porque estos demandantes y sus abogados sacaron deliberadamente fragmentos de video fuera de contexto. Como le dije hoy al jurado, ahora mostraremos toda la historia y las propias pruebas de los demandantes respaldarán nuestro caso», dijo su abogado, Jerad Najvar, a The Epoch Times.
Los videos de miembros del «Trump Train» rodeando el autobús mientras circulaba por la interestatal 35 cerca de Austin Texas se hicieron virales y suscitaron los elogios de Trump.
El FBI investigó el incidente, que concluyó con una colisión después que el vehículo blanco de un partidario de Biden pareciera cruzarse al carril de un camión conducido por un partidario de Trump. No se presentaron cargos.
Los abogados defensores argumentaron que la culpa era de los demandantes, acusando al conductor del autobús de desviarse para intimidar a los partidarios de Trump.
Un abogado defensor utilizó un video presentado por los demandantes para mostrar que el autobús pudo orillarse o salir en numerosas ocasiones de la carretera.
Otro abogado destacó lo que pareció ser una falta de miedo exhibida por los demócratas en el autobús.
Los abogados de la parte demandante también tienen la intención de llamar al estrado a un testigo experto en seguridad que testificará que los partidarios de Trump que escoltaban el autobús en la carretera ese día presuntamente violaron leyes penales y de vehículos motorizados.
Sin embargo, la defensa alegó que al testigo experto le pagan millones por testificar.
Se espera que el juicio dure tres semanas.
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