El Comité de Fuerzas Armadas de la Cámara de Representantes aprobó el miércoles una enmienda al proyecto de ley anual de política de defensa que, de ser aprobada por el Congreso, obligaría al Pentágono a volver a contratar a los soldados estadounidenses que fueron despedidos por negarse a recibir la vacuna contra el COVID-19.
La medida fue adoptada a última hora de la tarde del miércoles por los legisladores del grupo, que revisaron y aprobaron su versión del proyecto de ley anual de asignaciones, que autoriza un presupuesto de defensa de 849,800 millones de dólares.
El proyecto de ley de 2025, titulado Ley de Mejora de la Calidad de Vida de los Miembros del Servicio y de Autorización de la Defensa Nacional, servirá como texto base para el próximo debate a medida que avance en el Congreso.
El miércoles por la noche, la representante Nancy Mace (R-S.C.), que presentó la enmienda sobre la recontratación de veteranos despedidos en virtud de la política del mandato de vacunación, confirmó su aprobación.
Durante el debate, dijo que la medida ordenaría al Pentágono desarrollar una estrategia para contratar entre los miles de miembros del servicio que «fueron convertidos en veteranos de la noche a la mañana» durante el mandato de la vacuna contra el COVID-19.
«Esta enmienda pretende abordar la pérdida de personal cualificado y experimentado que estaba dispuesto y era capaz de servir a su país y superar la resistencia del Departamento a reclutar entre esta población», dijo la Sra. Mace antes de la votación del panel.
«Hasta ahora, el Departamento no ha reclutado a un número significativo de miembros del servicio separados en virtud del mandato por el COVID. Esto es inaceptable», añadió.
«Las vacunas salvan vidas»
Tras la intervención de la Sra. Mace, la representante Salud Carbajal (D-Calif.) contrapuso su punto de vista al hecho de que los miembros de las fuerzas armadas están obligados a recibir una amplia gama de vacunas, incluidas vacunas específicas para cada región, cuando son enviados a determinadas zonas.
«Las vacunas salvan vidas», dijo Carbajal a los legisladores.
«Debo decir que es desconcertante cómo la vacuna contra el COVID-19 se ha convertido en el hombre del saco, pero en realidad es una cuestión de preparación», añadió. «Actualmente vacunamos a nuestras fuerzas para protegerlas y para proteger a sus compañeros».
«Debo decir que es desconcertante cómo la vacuna COVID-19 se ha convertido en el hombre del saco, pero en realidad es una cuestión de preparación», añadió. «Actualmente vacunamos a nuestras fuerzas para protegerlas y para proteger a sus compañeros».
El Congreso puso fin al mandato de la vacuna contra el COVID-19 del Pentágono en 2022 y el año pasado ordenó al secretario de Defensa, Lloyd Austin, que creara un camino para que aquellos que fueron separados por negarse a la vacuna pudieran regresar.
El 30 de abril, el Sr. Austin dijo al panel que no sabía de ningún esfuerzo para reclutar a los miembros del servicio que habían sido previamente despedidos en virtud de los mandatos. La Sra. Mace dijo el miércoles que esto era «decepcionante».
La medida se enfrenta a un futuro incierto a finales de este año, cuando el comité se reúna con el Comité de las Fuerzas Armadas del Senado, liderado por los demócratas, para conciliar las diferencias en la Ley de Autorización de Defensa Nacional antes de su aprobación completa en el Congreso.
Según el Pentágono, durante el año fiscal 2023, los servicios militares incumplieron colectivamente los objetivos de reclutamiento en unos 41,000 reclutas. Esto se atribuyó a una «menor población elegible».
Otras razones expuestas fueron el atractivo de los empleos en el sector privado, la «escasa confianza» de las generaciones más jóvenes en las Fuerzas Armadas, que siguen otras trayectorias profesionales, y el hecho de que los más jóvenes tengan menos familiares que hayan servido, lo que disminuye su deseo de seguir su ejemplo.
El Comité aprueba el proyecto de ley de gastos de defensa
El presidente del Comité de la Fuerzas Armadas de la Cámara de Representantes, Mike Rogers (R-Ala.), dijo que el proyecto de ley de gastos de defensa para 2025 tiene en cuenta la calidad de vida de los miembros de las fuerzas armadas, el aumento de las indemnizaciones, la mejora de la vivienda, la ampliación de la atención médica y el acceso a guarderías, y otras cuestiones que afectan directamente a los soldados y sus familias.
Esto se suma al fortalecimiento de las fuerzas armadas para hacer frente a los desafíos planteados por China, Irán, Rusia y Corea del Norte, según el Sr. Rogers.
«Reforzando nuestras fuerzas armadas e invirtiendo en nuestra defensa es como enviamos a nuestros adversarios el mensaje de que no nos dejaremos intimidar», añadió.
Los legisladores autorizaron un presupuesto de defensa de 849,800 millones de dólares, en línea con el acuerdo sobre el techo de la deuda alcanzado a principios de este año.
«Por primera vez en décadas, el proyecto de ley que tenemos ante nosotros hoy lleva un título corto diferente. Se trata de la Ley de Mejora de la Calidad de Vida de los Miembros del Servicio y de Autorización de la Defensa Nacional. Lo hicimos para subrayar los enormes beneficios que este proyecto de ley hace hacia la mejora de la calidad de vida de todos nuestros miembros del servicio y sus familias», dijo Rogers en un comunicado.
«Ningún militar debería tener que vivir en condiciones miserables. «Ninguna familia militar debería tener que depender de cupones de alimentos para alimentar a sus hijos. Y nadie que sirva a este país debería tener que esperar semanas para ver a un médico o a un especialista en salud mental. Este proyecto de ley contribuye en gran medida a solucionar esos problemas».
Celebró la aprobación del proyecto en la comisión.
El proyecto de ley fue presentado el 18 de abril por Rogers y Adam Smith (D-Wash.) como texto de base para el proyecto de ley de gastos de defensa de 2025.
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