A los trabajadores de varias empresas se les está ofreciendo dinero si se vacunan contra el COVID-19, debido a la renuencia de algunos a recibir una de las vacunas.
Dollar General está dando a los trabajadores por hora que reciben una vacuna contra COVID-19 el equivalente a cuatro horas de salario. La compañía dijo que es una forma de eliminar las barreras para vacunarse. Los trabajadores asalariados están recibiendo horas adicionales de trabajo en la tienda.
Instacart, la plataforma de entrega de comestibles, está repartiendo un pago de 25 dólares a los trabajadores si se vacunan. «Nuestro objetivo con la introducción de nuestro nuevo Vaccine Support Stipend es asegurar que, cuando llegue el momento, los compradores de Instacart no tengan que elegir entre obtener ingresos como proveedor de servicios esenciales o vacunarse», dijo Apoorva Mehta, fundador de Instacart, en una declaración.
Y Trader Joe’s pagará a los empleados el equivalente a dos horas de trabajo por cada dosis de una vacuna que reciban. Las dos únicas vacunas COVID-19 autorizadas requieren dos dosis separadas por varias semanas. La compañía también promete cambiar los horarios para que los trabajadores puedan vacunarse.
El COVID-19 es la enfermedad causada por el virus del PCCh (Partido Comunista Chino).
Pocas empresas u otras instituciones han exigido hasta ahora las vacunas.
«Entendemos que la decisión de recibir la vacuna COVID-19 es una elección personal, y aunque estamos animando a los empleados a que se la pongan, no les estamos exigiendo que lo hagan», dijo Dollar General en un comunicado.
Pero los hospitales y otros también están animando a los empleados a vacunarse, a pesar del escepticismo generalizado sobre las vacunas, en parte debido a la rapidez con la que se desarrollaron.
A los empleados de Gracedale, un asilo para ancianos en el condado de Northampton, Pensilvania, se les dijo el mes pasado que recibirían 750 dólares si se aplicaban ambas dosis.
El consejo del condado dijo que los funcionarios de Gracedale creen que «puede haber cierta renuencia por parte de algunos miembros del personal a ser inmunizados con la vacuna COVID-19 debido en parte a la rapidez de su desarrollo».
Las encuestas muestran que una parte significativa de los estadounidenses no se pondrán la vacuna COVID-19 o se inclinan a no ponérsela. Las vacunas recibieron las autorizaciones más rápidas de la historia; la mayoría de las vacunas tardan 10 años o más en desarrollarse.
«Definitivamente me preocupa que los trabajadores de la salud estén eligiendo esperar para vacunarse. Y para mí, es sumamente importante que demos información correcta a los trabajadores de la salud y que rápidamente dejemos de lado los mitos y la información errónea», dijo a los periodistas la Dra. Nancy Messonnier, de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, en una llamada a principios de este mes, y agregó que los datos muestran que las vacunas son «seguras y eficaces» a pesar de que la tasa de reacciones adversas en las personas que se inyectan es mayor que la de las vacunas contra la gripe.
En Texas, los trabajadores del Houston Methodist Hospital se enteraron de que recibirían 500 dólares si se vacunaban.
«Los criterios de elegibilidad incluirán recibir la vacuna COVID-19, cumpliendo con nuestra obligación como trabajadores de la salud de liderar la comunidad», dijo Marc Boom, director ejecutivo del sistema hospitalario, en un memorando interno que circuló en internet.
El jefe de Bomberos de Los Ángeles, Ralph Terrazas, fue más creativo. Los bomberos que se vacunen, dijo en un memorándum, entrarán en una rifa que incluye premios como tarjetas de regalo de Airbnb, cámaras fotográficas Canary y bicicletas de piñón fijo Aventon.
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