Concentración en Filadelfia para acabar sustracción forzada de órganos en China

FILADELFIA- El 2 de junio se celebró una manifestación frente al Congreso Americano de Trasplantes (ATC) 2024 en Filadelfia, pidiendo el fin de la sustracción forzada de órganos.

La manifestación contó con representantes de Médicos Contra la Sustracción Forzada de Órganos (DAFOH), funcionarios electos, académicos y practicantes locales de Falun Dafa, sirviendo como un poderoso recordatorio de la lucha en curso contra la sustracción forzada de órganos en China.

Los participantes pidieron políticas internacionales más firmes, una mayor concienciación y una acción unificada para poner fin a estos abusos contra los derechos humanos. Las diversas voces presentes en la concentración pusieron de relieve la necesidad de continuar con la defensa y la educación para garantizar que se pone fin a estas atrocidades.

DAFOH solicitó su presencia en el ATC, pero le fue denegada. Según el subdirector de DAFOH, Weldon Gilcrease, el lenguaje utilizado en la denegación fue que la reunión era «para avanzar en otra dirección».

Líderes políticos exigen acciones

El representante estatal de Deleware Mike Ramone, líder de la minoría en la Cámara de Representantes y candidato a gobernador, expresó su firme apoyo a la concentración. «Es imperativo que llamemos la atención sobre estos actos atroces», declaró Ramone a The Epoch Times.

«No podemos quedarnos de brazos cruzados mientras continúan estas graves violaciones de los derechos humanos».

El Sr. Ramone inició la Resolución HCR 112 en la Cámara de Delaware, que condena las prácticas de sustracción forzada de órganos en China, declarando: «Este no es un tema político. Este es un tema de asesinato … Cuando ocurren cosas horribles en nuestro mundo, debemos utilizar la energía y los recursos de que disponemos para comunicar y actuar contra tales atrocidades».

También comentó la exclusión de DAFOH del ATC, diciendo: «No entiendo muy bien por qué se les ha hecho pasar como si no fueran relevantes. [El ATC] intenta dar excusas. En nuestro país no damos excusas, sino que actuamos». Ramone hizo además un llamamiento a la comunidad internacional para que presione a China, declarando: «enemos que poner fin a este comportamiento y a esta situación:

«Tenemos que detener el comportamiento y la práctica en su país. Lo hacemos en todas partes. Se supone que somos el faro de la humanidad; esta es nuestra oportunidad de hacer brillar esa luz».

Aaron Bashir, candidato al Congreso de Estados Unidos por el distrito 2 de Pensilvania, subrayó la necesidad de medidas legislativas para combatir la sustracción forzada de órganos. «Tenemos que asegurarnos de que nuestras leyes reflejan nuestros valores y de que adoptamos una postura firme contra tales atrocidades», afirmó.

Bashir pidió apoyo bipartidista para aprobar leyes que impidan la complicidad en estas prácticas y protejan los derechos humanos en todo el mundo. Declaró apasionadamente: «Estamos hartos de esta sustracción forzada de órganos humanos; hay que ponerle fin», y pidió al gobierno estadounidense que detenga toda financiación a los institutos implicados en estas prácticas negras.

Haciendo hincapié en la necesidad de un comportamiento ético dentro de la comunidad médica, el Sr. Bashir dijo que «la comunidad médica debería boicotear completamente a todas esas personas que vienen de China y luego vuelven para que el gobierno les obligue a involucrarse en estas prácticas».

Condenó la exclusión de DAFOH de la conferencia, calificándola de «vergonzosa» y de negación de la libertad de expresión. Bashir hizo un llamamiento a la responsabilidad internacional: «La comunidad internacional debe exigir responsabilidades al Partido Comunista Chino, porque este régimen ha matado a mucha gente, ha perseguido a mucha gente, y es necesario que más gente hable de ello».

Perspectivas académicas y médicas

Mark Thomas, profesor y director del departamento de Ciencias Políticas de la Universidad La Salle, comparó la sustracción forzada de órganos con atrocidades históricas. «Considero que lo que el gobierno chino está haciendo a los presos políticos y a Falun Gong, a los cristianos y a los uigures es equiparable a lo que Josef Mengele hizo a los judíos durante el Holocausto», señaló el Dr. Thomas.

El Dr. Thomas insistió en la falta de ética de estas prácticas y señaló: «Este tipo de prácticas socavan los fundamentos del juramento hipocrático de un médico de no hacer daño», y añadió: «Tenemos que conseguir que todos los países sancionen a China por lo que es una violación básica de los derechos humanos».

También destacó la importancia de la ubicación de la concentración: «Estamos frente a un congreso médico. Con suerte atraparemos a algunos médicos, enfermeras, profesionales de la medicina, quizá a algunas empresas que trabajan con los chinos y les diremos: ‘Eh, reconsideren de verdad lo que están haciendo'».

El Dr. Thomas instó a la comunidad médica a dejar de cooperar con el régimen chino: «Realmente tenemos que pedir a nuestro gobierno aquí en los EE.UU. que apruebe algunas leyes (…) Tenemos que empujar realmente a estos profesionales a utilizar su influencia con el Congreso y el Senado para detener esta práctica».

Dana Churchill, N.M.D., delegada de DAFOH para la costa oeste de EE.UU., habló apasionadamente sobre la responsabilidad moral de la comunidad médica. «Los médicos deben defender las normas éticas más estrictas y denunciar estos delitos». También destacó los recientes esfuerzos legislativos, mencionando: «Ahora mismo tenemos una resolución en el Congreso. El presidente Johnson dijo, creo, que la someterá pronto a votación, y mencionó específicamente a Falun Gong. Así que la soga alrededor del gobierno chino se está apretando cada vez más y más. Y pronto podremos obligarles a parar y llevarles ante la justicia».

El Dr. Churchill hizo hincapié en la necesidad de sensibilización y acción directa, diciendo: «Queremos que los cirujanos que no saben realmente lo que está pasando estén informados» También se refirió a la importancia de la colaboración internacional, instando: «Resoluciones, proclamaciones y proyectos de ley bloqueando a los ciudadanos de ir a China para obtener órganos son pasos necesarios».

Además, criticó el rechazo de su solicitud de stand por parte del congreso, que afirmó que «ahora intentan ir en otra dirección». El Dr. Churchill sospechaba que la verdadera razón podía ser la amenaza de boicot del régimen chino. «Sé que muchas de las empresas chinas están allí con sus números de stand… Eso es lo que suelen hacer, amenazan, amenazan a todo el mundo», afirmó.

Subrayó la importancia de educar a la comunidad médica: «Tenemos un folleto de 68 páginas que detalla desde el comienzo de la sustracción de órganos en 2001 hasta ahora, y hoy hemos repartido muchos de esos folletos».

Activistas y organizadores se manifiestan

El Dr. Alejandro Centurión, director asociado de asuntos médicos de DAFOH, aportó su punto de vista sobre el papel de la comunidad médica a la hora de abordar este problema. «Tenemos el deber de garantizar que las prácticas médicas se adhieran a las normas éticas y no contribuyan a las violaciones de los derechos humanos», afirmó el Dr. Centurión.

Destacó la importancia de la ética médica, afirmando: «Los médicos de todo el mundo deben unirse para defender las normas éticas y negarse a participar en prácticas que violen los derechos humanos». También instó a la comunidad médica a rechazar la cooperación con prácticas contrarias a la ética, afirmando: «Es esencial que no hagamos la vista gorda ante estas atrocidades y que hagamos rendir cuentas a los responsables».

El Dr. Centurion subrayó la urgencia de abordar la sustracción forzada de órganos y pidió la cooperación internacional para poner fin a estas prácticas. «El delito de sustracción forzada de órganos lleva más de 20 años produciéndose en China. Y es inconcebible que la comunidad mundial, la comunidad médica, no haya hecho lo suficiente para poner fin a estos delitos», afirmó.

«Las pruebas de lo que está ocurriendo en China son innegables y también la evidencia de que estos crímenes continúan hoy en día. No terminaron en 2015, como el gobierno chino quiere hacer creer al mundo. Esto simplemente no es cierto», añadió el Dr. Centurión.

Alex Luchansky, organizador de la manifestación y representante de la Greater Philadelphia Falun Dafa Association, hizo hincapié en la importancia del activismo de base. «Las acciones locales y globales son vitales en la lucha contra la sustracción forzada de órganos», señaló Luchansky. Explicó la importancia personal del asunto, afirmando: «Soy nieto de un superviviente del Holocausto… sin sensibilizar a la opinión pública no podremos detener estos crímenes contra la humanidad».

Luchansky instó a la comunidad internacional a aprender de países como Israel y Taiwán, que han prohibido el turismo de trasplantes, y a aplicar medidas similares en todo el mundo.

También hizo hincapié en la importancia de la manifestación para educar a los profesionales de la medicina, diciendo: «Nos gustaría que la gente lo sepa porque una vez que lo sepan su corazón les dirá qué hacer». El Sr. Luchansky animó a los médicos chinos a recordar sus obligaciones éticas, instándoles a «no participar ni ayudar, no obedecer al régimen». Hizo un llamamiento a una mayor cooperación internacional, declarando: «La comunidad internacional tiene que unirse, compartir los hechos y pruebas importantes, y desvincularse del régimen genocida».

Sensibilización pública e impacto

Larry Daigle, conductor de un camión de vallas publicitarias de York (Pensilvania), fue uno de los transeúntes a los que la concentración le abrió los ojos. «Estoy aprendiendo mucha información que no sabía que existía», dijo Daigle. «Me dieron información para que la leyera con tranquilidad, y estoy deseando saber más sobre lo que pasa en el mundo».

Hizo hincapié en la necesidad de una educación generalizada, afirmando: «Este tipo de programa tiene que llegar a todo el mundo, no sólo aquí. Tiene que ser para que aprendan los más jóvenes. No podemos aislarlos porque así es el mundo».

El Sr. Daigle se sintió profundamente conmovido por la información presentada, diciendo: «Los seres humanos no deberían ser utilizados para lo que están siendo utilizados [trasplante de órganos] … Necesitamos la paz, pero tenemos que empezar por algún sitio».

«En una escala del uno al diez, le daría un diez y más. Cuantos más conocimientos y más información puedan transmitir estos médicos a todo el mundo, mejor para todos».

El Dr. Centurión también comentó la eficacia de la manifestación para sensibilizar a la opinión pública. Señaló que muchos médicos, incluidos algunos de China, se habían detenido para pedir información, poniendo de relieve que numerosos profesionales de la medicina desconocían los delitos de sustracción forzada de órganos. «Esa es una de las razones por las que estamos muy preocupados», afirmó, explicando que la falta de sensibilización entre los médicos era alarmante.

Compartió el caso de un médico chino que no sólo tomó la información, sino que también firmó una petición, un acto que podría poner en peligro su vida si fuera descubierto por el régimen chino. El Dr. Centurion se mostró orgulloso de la valentía demostrada por este médico y creyó que este tipo de acciones podrían ayudar a sensibilizar a la opinión pública china. Animó a todo el mundo a crear conciencia hablando con colegas, amigos, familiares y funcionarios del gobierno para ayudar a exponer y combatir este delito.

«Porque se trata de la mayor violación de la ética médica, y debemos ponerle fin», afirmó el Dr. Centurion.

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