A medida que el Condado de Orange experimenta un aumento en las llamadas de violencia doméstica relacionadas con la pandemia de COVID-19, los locales se están uniendo para garantizar que los recursos estén disponibles para los necesitados.
Las órdenes obligatorias de confinamiento en casa aumentaron la amenaza para las posibles víctimas, dijo un director de un programa de ayuda local a The Epoch Times —y los niños corren un mayor riesgo, ahora que las escuelas están cerradas.
«Ahora, es más difícil que la gente se acerquen», dijo Andrea McCallister, directora de desarrollo de Laura’s House, un centro de consulta de violencia doméstica con sede al sur del Condado de Orange.
Pero si se acercan, Laura’s House estará allí para apoyarlos—y un grupo inspirador de estudiantes locales de secundaria está contribuyendo para ayudar a otros.
Acercarse
Antes de la orden de confinamiento en casa del 19 de marzo, las víctimas «podrían haber tenido la oportunidad de acercarse», dijo McCallister, «cuando estaban en el trabajo o cuando estaban comprando en la tienda de comestibles».
Pero ahora, «hay más situaciones donde hay más tensión en el hogar», agregó. «Tiene un gran efecto en los niños, y su estrés y ansiedad».
Según el Sheriff del Condado de Orange, Don Barnes, las llamadas de violencia doméstica han aumentado un 25 por ciento de 2019 a 2020, en lo que va del año.
«Las llamadas de servicio en general han disminuido, pero esa categoría particular de llamadas de servicio ha aumentado un 25 por ciento, para llamadas relacionadas con violencia doméstica», dijo Barnes en una conferencia de prensa el 16 de abril.
Él agregó que las llamadas por disputas familiares aumentaron 24 por ciento, y las llamadas por disputas de custodia de niños aumentaron 30 por ciento.
La tendencia es particularmente preocupante con respecto a los niños.
«Al menos cuando van a la escuela, se van por varias horas donde no están expuestos al abuso de su hogar», dijo McCallister.
Pero ahora que los niños no van a la escuela, hay «muchas más situaciones en el hogar», debido a la tensión adicional. El apoyo práctico, como el arte y la terapia de juego, se ha vuelto difícil de proporcionar para Laura’s House.
«La confianza se establece cuando tienes una reunión en persona con el niño», dijo. «Es más difícil hacer eso virtualmente».
Ayudando a las víctimas de abuso a dar un paso adelante
Laura’s House, fundada en 1994, ofrece refugio y servicios de apoyo para víctimas de abuso en todo el sur de California. La agencia, aprobada por el estado, también ofrece asesoramiento, asistencia legal, educación, talleres y alojamiento temporal para mujeres, hombres y niños maltratados.
McCallister dijo que las víctimas enfrentan «mucho estrés adicional», debido a que muchas citas de audiencia que las protegen han sido pospuestas debido a las medidas de distanciamiento social.
«Las cortes han extendido el período de tiempo que las órdenes de restricción son válidas antes de que expiren, ya que no pueden ir a una cita de audiencia», explicó McCallister. «Si no hay una cita de audiencia a la vista, necesitan esa orden de protección para ayudarlos».
Pero desafortunadamente, agregó, las víctimas cuyas citas de audiencia se han retrasado indefinidamente perderán su momento de empoderamiento–que es una gran parte de la defensa dentro de Laura’s House.
“Muchas veces, para nuestros clientes, ese es su primer paso adelante, donde dicen: ‘No voy a permitir que esto me vuelva a pasar nunca más. Ya no me vas a hacer esto’”, dijo McCallister. «Muchas veces, es la primera vez que se defienden».
Que ese momento de empoderamiento se retrase es «un poco desalentador para las personas que están listas para hacer un cambio», dijo.
Inspirados para ayudar
Uno de los patrocinadores de Laura’s House es » Inspire to Be«, un club del campus de San Clemente High School. El club, formado en 2017 por las estudiantes de último año Trinity Rose Acfalle-Carranza y Genavieve Koenigshofer, se dedica a «mejorar la vida e inspirar a los niños, las familias y los necesitados».
El club se asocia con otras organizaciones locales sin fines de lucro para realizar actividades de alcance comunitario y trabajo voluntario, incluyendo campañas de alimentos, registro de votantes jóvenes y programas de adopción.
Ellas se han asociado con Laura’s house desde el inicio del club, recaudando USD 4000 en bienes para la agencia solo en el primer año—mientras estaban paradas frente al mercado de Albertson en la Plaza Pacifica de San Clemente.
Ahora, han redoblado esfuerzos —al crear una página GoFundMe para ayudar a Laura’s House a recaudar USD 2500. El dinero se utilizará para ofrecer asesoría telefónica, servicios legales y para mantener una línea directa de soporte las 24 horas para las víctimas de abuso.
Koenigshofer dijo que sentía que era importante continuar el compromiso del club con Laura’s House y dar un paso adelante durante un momento en que los más vulnerables están en mayor riesgo.
«Pensamos que era importante apoyar a las personas atrapadas con parejas o cónyuges abusivos durante el confinamiento en casa», dijo a The Epoch Times. «Es especialmente importante que sigamos apoyando a esta organización que a menudo puede pasarse por alto».
El club ha vinculado la campaña a un «libro de cocina virtual» que han creado en YouTube que ofrece recetas para las comunidades en cuarentena.
«Estamos enseñando a las personas cómo cocinar sus recetas y postres familiares favoritos», dijo Koenigshofer.
«Todavía puede encontrar una manera de hacer una diferencia en su comunidad», dijo Acfalle-Carranza a The Epoch Times. «Ese es el mensaje que estamos tratando de enviarles, y con suerte les daremos una receta divertida para cenar en el camino».
Ella agregó que el aislamiento provocado por la pandemia desafortunadamente podría aumentar la necesidad de los servicios de Laura’s House.
«Las personas que regularmente están siendo sometidas a este trato, puede intensificarse debido a las circunstancias a las que están siendo sometidas», dijo. «Cada caso es muy único».
Los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley del Condado de Orange instan a los miembros de la comunidad a denunciar cualquier tipo de abuso —incluso si es solo una sospecha.
«Hoy les pido, como miembros del público, que denuncien el abuso», dijo el fiscal de distrito Todd Spitzer durante la conferencia de prensa del 16 de abril.
«Preferiría que llamaran e informaran sobre actividades sospechosas y se equivoquen, a que no lo hagan y ocurra algo terrible a uno de estos miembros de la comunidad».
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