La Junta de Supervisores del Condado de Orange votó a favor de detener la creación de registros digitales de vacunación después que más de 700 personas se congregaron en la reunión de la junta del 11 de mayo, para oponerse a la medida.
Una moción para detener cualquier plan de establecer registros digitales de vacunación fue aprobada durante una votación 4 a 1, con la supervisora Katrina Foley, recientemente elegida, como única disidente.
La moción fue creada por el presidente de la Junta, Andrew Do, después de que más de 740 personas hablaran durante la junta para oponerse a la creación de un sistema opcional de verificación de vacunas. Los oradores fueron limitados a 30 segundos cada uno debido al alto volumen de asistentes.
«Si alguien siguió a esta junta en los últimos 12 meses, puede observar una junta que ha trabajado muy duro para mantenerse dentro de lo que es el mandato del estado que tenemos que seguir y no más», dijo Do. «Nosotros somos respetuosos con la privacidad y los derechos privados de las personas. Este es un reto para equilibrar las necesidades de la salud pública y los derechos personales y creo que hemos hecho un buen trabajo de equilibrio».
«Pero sea como sea, hemos llegado a un punto en el que el revuelo en torno a todo esto del pasaporte de vacunas llegó a un punto en el que se está volviendo contraproducente».
En su lugar, propuso detener cualquier debate sobre el establecimiento de un registro digital de vacunas y en cambio utilizar la tarjeta impresa de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) como prueba de inoculación.
Ahora dependerá de los residentes llevar un registro de su tarjeta de papel de los CDC, dijo Do, porque si se pierde no habrá un equivalente digital para reemplazarla. Los que pierdan la tarjeta tendrán que pedir un duplicado a la persona que les aplicó la vacuna.
El supervisor, Don Wagner, apoyó enseguida la moción de Do, pero añadió que la idea nunca fue utilizar un registro digital de vacunas para restringir las libertades de los no vacunados.
«Yo quiero leer la referencia a los pasaportes que está en el documento que tenemos en frente», dijo Wagner. «Yo lo escribí. El comité ad hoc del contrato lo acordó. Esta es la única discusión de los pasaportes en nuestro contrato, ‘Considerando que las partes en virtud de este contrato, no tienen la intención de realizar ningún trabajo ahora o en el futuro para crear un pasaporte de vacunas para limitar los viajes o el acceso a los servicios del gobierno del condado’, esto no puede quedar más claro».
La supervisora Lisa Bartlett, dijo a The Epoch Times a través de un mensaje de texto que la reunión de la junta del 11 de mayo tuvo el mayor número de oradores públicos para cualquier reunión de la junta desde que fue elegida para el cargo en 2014.
Durante la discusión del tema, Foley dijo que no podía apoyar la moción porque consideraba que la «súper mayoría» de la comunidad sí apoya tener un registro digital.
«Es fundamental para nuestro motor económico aquí en el Condado de Orange, que realmente depende del turismo, los parques temáticos, los eventos deportivos y las salas de conciertos, los que ahora se verán perjudicados de poder tener la máxima capacidad porque la mayoría de las ventas son en línea y son digitales», dijo Foley, argumentando que los negocios no pueden comprobar la prueba de vacunación al vender entradas en línea si los residentes vacunados no tienen una opción digital.
«Estamos apaciguando a una facción muy pequeña de nuestra comunidad que, en realidad, no se va a vacunar. Ellos ya nos han dicho que no creen en las vacunas».
Foley dijo que muchas de las personas que hablaron en contra del pasaporte de vacunas durante la reunión del 11 de mayo eran los mismos individuos que se manifestaron en contra de las mascarillas frente a su casa el verano pasado.
«Muchos de ellos fueron al Capitolio y asaltaron nuestro más sagrado sistema de justicia y del capitolio», dijo Foley. «No debemos atender a personas que difunden información errónea y mentiras».
Wagner respondió más tarde al comentario, diciendo que su caracterización de los que están en contra de los registros digitales de vacunas no era correcta.
«Mi buena colega del Distrito Dos dice que solo tenemos una pequeña minoría de activistas de derecha, anti-vacunas, etc., que están aquí hablando con nosotros», dijo Wagner. «Ella sabe que eso no es cierto. Sé que no es cierto porque recibí algunos de los mismos mensajes de texto de la Cámara de Comercio Hispana que ella recibió. La Cámara Hispana, se lo aseguro, estaría muy sorprendida de que la caractericen como una pequeña minoría de antivacunas de derechas. Ellos representan en parte a una de las comunidades más desfavorecidas y que más necesita ser vacunada».
La junta directiva dijo que, dado que el contrato con la Composite Apps ya se firmó el 29 de abril, sus términos materiales no cambiarán. Sin embargo, el trabajo relacionado con el desarrollo de verificación de vacunas para su uso por parte de terceras entidades se detendrá.
Los que recibieron sus vacunas a través de la app Othena seguirán teniendo acceso a ver las fechas en las que se vacunaron.
Si alguna vez la junta decide considerar el uso de un registro digital o un código QR, tendrá que agendar el tema y abordarlo públicamente.
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