Un hombre del área de Memphis ha sido declarado culpable el 21 de julio de delitos graves y menores por sus acciones en medio de la irrupción en el Capitolio de Estados Unidos el 6 de enero de 2021.
Los legisladores se reunieron en el Capitolio de EE. UU. para una sesión conjunta del Congreso para contar y certificar los votos electorales para las elecciones presidenciales de 2020 el 6 de enero de 2021. Pero los procedimientos en las cámaras se interrumpieron temporalmente cuando un grupo considerable de manifestantes entró en el edificio del Capitolio y sus alrededores. Miles de manifestantes, en su mayoría pacíficos, permanecieron fuera.
Matthew Bledsoe, de Olive Branch, Misisipi, fue declarado culpable por un jurado del Distrito de Columbia de un delito grave de obstrucción de un procedimiento oficial, anunció el Departamento de Justicia (DOJ, por sus siglas en inglés) en un comunicado.
El hombre de 38 años también fue declarado culpable de cuatro delitos menores: entrar y permanecer en un edificio o recinto restringido; conducta desordenada y conflictiva en un edificio del Capitolio; conducta desordenada en un edificio del Capitolio; y pasear, manifestarse o formar piquetes en un edificio del Capitolio.
La acusación conlleva un máximo de 20 años de prisión y posibles multas. Los cuatro últimos delitos menores conllevan un máximo combinado de tres años de prisión y posibles multas.
Bledsoe, que anteriormente residía en Cordova (Tennessee), fue detenido el 13 de enero de 2021, justo una semana después de la irrupción en el Capitolio de Estados Unidos.
El 6 de enero de 2021, había entrado en el recinto del Capitolio poco después de las 14:13 horas y se dirigió al edificio del Capitolio, donde escaló un muro en la Terraza Superior Noroeste y entró por una puerta contra incendios en el ala del Senado, según el Departamento de Justicia.
El video del juicio mostró a Bledsoe diciendo: «En el Capitolio. Esta es nuestra casa. Nosotros pagamos por este [improperio]. ¿Dónde están esos pedazos de [improperio]?».
Pasó unos 22 minutos en el interior del edificio del Capitolio, donde se subió a una estatua y estuvo en el exterior del pasillo que lleva a la Cámara de Representantes y en los pasillos cercanos al vestíbulo de la presidenta de la Cámara de Representantes. Abandonó el edificio alrededor de las 14:47 horas.
«Sin embargo, al cabo de dos horas, Bledsoe regresó y se quedó fuera de las puertas de la Rotonda Este mientras los agentes de la ley trabajaban para asegurar el edificio y los terrenos», señaló el Departamento de Justicia.
La Oficina de Campo del FBI en Memphis ha estado investigando el caso, con la ayuda de la Oficina de Campo del FBI en Washington, la Policía del Capitolio de Estados Unidos y el Departamento de Policía Metropolitana.
Está previsto que Bledsoe sea sentenciado el 21 de octubre.
El Departamento de Justicia señaló que más de 850 personas han sido detenidas por cargos penales relacionados con la irrupción en el Capitolio de Estados Unidos. Entre ellas, más de 260 personas han sido acusadas de agredir u obstaculizar a las fuerzas policiales.
Un total de cinco muertes se registraron inmediatamente después del incidente del 6 de enero. De las muertes, se determinó que Ashli Babbitt, partidaria de Trump, murió por homicidio el 6 de enero, tras ser abatida por el teniente Michael L. Byrd.
Otras tres personas murieron por lo que finalmente se determinó que fueron causas naturales. Una de ellas era el agente de policía del Capitolio Brian Sicknick, que murió el 7 de enero; en un principio se creyó que había fallecido debido a las heridas causadas por los manifestantes, pero finalmente se determinó que había muerto debido a un accidente cerebrovascular. Las otras dos personas eran hombres de unos 50 años que murieron el 6 de enero debido a una enfermedad cardiovascular aterosclerótica.
La quinta muerte fue la de una mujer de 30 años, Rosanne Boyland. El médico forense del Distrito de Columbia dictaminó que su muerte fue un accidente por sobredosis de drogas. Pero un video revelado en diciembre de 2021 confirmó que Boyland fue aplastada y pisoteada cuando la multitud de manifestantes fue empujada fuera del túnel, y luego golpeada repetidamente por la policía mientras yacía inconsciente.
No se sabe cuántos manifestantes pueden haber resultado heridos como consecuencia de las acciones policiales de ese día.
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