El congresista Tom Tiffany (R-Wis.) ha visto crecer el apoyo republicano a una resolución que ha patrocinado para poner fin al llamado principio de «una sola China» y reconocer a Taiwán como país independiente.
El Sr. Tiffany presentó su resolución en enero y ha recibido el apoyo de docenas de copatrocinadores republicanos. La semana pasada, el representante Roger Williams (R-Texas) se convirtió en el 50º copatrocinador de la resolución.
«En el primer Congreso en el que estuve aquí, presenté esta resolución y fui el único patrocinador. En la última legislatura tuvimos 30 copatrocinadores, y ahora tenemos 50 en esta legislatura», declaró Tiffany al programa «Capitol Report» de NTD el miércoles. «Así que realmente demuestra que los miembros del Congreso son cada vez más conscientes de la amenaza de China».
Taiwán se gobierna como nación independiente, pero la República Popular China (RPC) considera la isla parte de su territorio. La RPC se refiere a esta postura como el principio de «una sola China». A lo largo de la historia de esta disputa por el control territorial, Estados Unidos ha mantenido una postura ambigua al respecto.
En 1972, el entonces presidente Richard Nixon declaró que la postura de Estados Unidos era «que todos los chinos a ambos lados del estrecho de Taiwán sostienen que sólo hay una China y que Taiwán es parte de China», pero no declaró explícitamente si el gobierno taiwanés o el de la RPC tenían derecho a reclamar el control sobre China. El presidente Nixon expresó además que la posición de Estados Unidos busca «una solución pacífica de la cuestión de Taiwán por los propios chinos».
En un comunicado posterior de 1979, el entonces presidente Jimmy Carter dijo que «Estados Unidos de América reconoce al Gobierno de la República Popular China como el único gobierno legal de China», pero afirmó que Estados Unidos continuaría sus lazos con Taiwán «a través de medios no gubernamentales». En el período transcurrido desde estas dos declaraciones, Estados Unidos ha seguido interactuando con Taiwán a nivel no oficial, incluida la venta de armas a Taiwán, pero no ha dejado claro si el ejército estadounidense intervendría en nombre de Taiwán en caso de que el régimen comunista chino intentara hacer valer sus reivindicaciones territoriales sobre Taiwán mediante la fuerza militar.
La resolución del Sr. Tiffany pide al presidente de Estados Unidos que abandone esta postura ambigua, reconozca a Taiwán como nación independiente separada de la RPC y restablezca las relaciones formales entre Estados Unidos y Taiwán.
«Necesitamos una administración que sea lo suficientemente fuerte como para dar la cara y decir que vamos a apoyar a Taiwán», afirmó Tiffany.
El republicano de Wisconsin elogió a la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi (D-Calif.), por su visita a Taiwán el año pasado y dijo que algunos demócratas «han mostrado cierta fortaleza» en la cuestión de Taiwán, pero expresó su incertidumbre sobre si el presidente Joe Biden se opondría a la RPC en esa cuestión.
Cierta cautela contra China
Aunque el Sr. Tiffany ha visto crecer el apoyo a su resolución de reconocer la independencia de Taiwán, algunos defensores de la actual política estadounidense sobre Taiwán afirman que es el mejor medio disponible para evitar un conflicto sangriento directo con China.
Durante su audiencia de confirmación el 20 de octubre de 2021, el embajador de Estados Unidos en China, Nicholas Burns, abogó por que Estados Unidos se ciña a las políticas sobre Taiwán y China que ha mantenido desde 1979, señalando que Estados Unidos mantiene la capacidad de proporcionar armas a Taiwán en virtud de estas políticas existentes. El Sr. Burns dijo que estas políticas «pueden tener éxito si las ejecutamos de forma coherente y con cierta firmeza».
Después de que Pelosi visitara Taiwán el año pasado, Doug Bandow, del libertario Instituto CATO, escribió que su viaje y otros movimientos que sugieren una postura más abierta de Estados Unidos hacia Taiwán sólo acercan a Estados Unidos y China a un conflicto armado por la isla. El Sr. Bandow señaló que después de que la Sra. Pelosi anunciara su visita, el ejército chino intensificó su presencia en torno a Taiwán y realizó ejercicios militares cerca de la isla.
«En lugar de disuadir a la RPC de actuar, Pelosi casi con toda seguridad ha acelerado lo que probablemente se convierta en una crisis política y económica, y que fácilmente podría convertirse en una crisis militar», escribió el Sr. Bandow. «Washington no puede esperar que Beijing dé marcha atrás: Taiwán importa mucho más a China, tanto a su pueblo como a sus dirigentes, que Estados Unidos. En consecuencia, la RPC gastará y arriesgará mucho más».
Los republicanos presionan para endurecer su postura ante China
Además de la resolución del Sr. Tiffany de declarar claridad estratégica sobre la cuestión de Taiwán y reconocer plenamente la independencia taiwanesa, otros republicanos que hablaron recientemente con NTD News pidieron que Estados Unidos esté más dispuesto a desafiar a China en una serie de cuestiones.
En declaraciones a «Capitol Report» el jueves, el representante Don Bacon (R-Neb) dijo que Estados Unidos debería «modernizar sus fuerzas nucleares» y «reforzar sus alianzas» para contrarrestar el creciente poder militar de China.
El Sr. Bacon dijo que Estados Unidos no debería buscar una guerra con China y predijo que una desvinculación económica completa entre las dos naciones es poco probable, pero dijo que Estados Unidos podría hacer más para «reducir el riesgo» en las relaciones comerciales entre Estados Unidos y China y advertir a las empresas estadounidenses que tengan cuidado con el robo de propiedad intelectual cuando trabajen con China.
«Tenemos que recordar que no son un Estado que comparta nuestros valores, y tenemos que ser claros al respecto con ellos y con el mundo. Quieren ampliar el comercio con sus vecinos, pero tenemos que recordar a sus vecinos lo que China está haciendo a su propio pueblo», dijo Bacon.
En otra entrevista con «Capitol Report», la representante Harriet Hageman (R-Wyo.) criticó específicamente al presidente Joe Biden, diciendo que pareció débil en su reunión de esta semana con el líder del Partido Comunista Chino, Xi Jinping.
«No estoy muy impresionada con la forma en que nuestro presidente se está comportando ahora mismo. Es bastante sorprendente para mí lo débil que parece», dijo Hageman a «Capitol Report» el miércoles.
Dijo que el presidente Biden debería haberse enfrentado más fácilmente a Xi en cuestiones como el robo de propiedad intelectual china y el flujo de fentanilo producido en China hacia Estados Unidos.
Según un informe de la Casa Blanca sobre la reunión del Presidente Biden con el Sr. Xi, los dos discutieron de hecho la reanudación de los esfuerzos bilaterales «para combatir la fabricación y el tráfico mundial de drogas ilícitas, incluidas las drogas sintéticas como el fentanilo». La Casa Blanca dijo que el presidente Biden también planteó su preocupación por los abusos de los derechos humanos en China y por las políticas comerciales de EE. UU. y China que perjudican a las empresas estadounidenses.
De NTD News
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