Los representantes republicanos de la Cámara expresaron el martes su preocupación por la seguridad de los jueces de la Corte Suprema de Estados Unidos y los funcionarios de las cortes inferiores tras el intento de asesinato contra el expresidente Donald Trump, y anunciaron que iniciaron una investigación al respecto.
En una carta, el presidente del Poder Judicial de la Cámara de Representantes, Jim Jordan (R-Ohio) y el representante Darrell Issa (R-California) enviaron una carta al fiscal general Merrick Garland solicitando una sesión informativa a nivel de personal sobre las medidas que se están tomando para mejorar la seguridad en torno a los nueve jueces.
«A la luz de la retórica exacerbada y el reciente intento de asesinato contra el presidente Trump, seguimos preocupados por la seguridad y la protección de todos los funcionarios del poder judicial, incluida y especialmente la seguridad de los jueces de la Corte Suprema», decía la carta.
Los legisladores exigen ahora una reunión informativa del Departamento de Justicia (DOJ), que supervisa la división de los U.S. Marshals que proporciona seguridad a los jueces de la Corte Suprema. La reunión informativa, dicen, debería «producirse lo antes posible, pero no más tarde del 6 de agosto de 2024».
Los jueces no están protegidos por el Servicio Secreto de Estados Unidos, una agencia dependiente del Departamento de Seguridad Nacional que se encarga de proteger a los presidentes actuales y anteriores, así como a los vicepresidentes y a los miembros de sus familias.
Ni el Departamento de Justicia ni la Corte Suprema han respondido a las solicitudes de comentarios ni han hecho declaraciones públicas tras el envío de la carta.
La carta menciona al incidente de junio de 2022, en el que un hombre se presentó en la casa del juez de la Corte Suprema Brett Kavanaugh con armas y supuestamente trató de matarlo por un borrador de opinión de la Corte Suprema, que se había filtrado y estaba a punto de ser publicado, anulando la sentencia Roe vs. Wade.
Los fiscales dijeron que el acusado Nicholas Roske fue a la casa del juez Kavanaugh con una pistola, municiones, un cuchillo y otros pertrechos y trató de matarlo. El señor Roske se declaró inocente.
Según un informe del Departamento de Seguridad Nacional de 2022, la filtración del borrador del dictamen de la Corte Suprema, en mayo, desató una oleada de amenazas contra los funcionarios y otras personas y aumentó la probabilidad de violencia. El dictamen filtrado también provocó protestas de la izquierda frente a los domicilios del juez Kavanaugh y otros magistrados.
En junio de 2022, el presidente Joe Biden firmó un proyecto de ley para dar protección de seguridad las 24 horas del día a las familias de los jueces de la Corte Suprema.
Aparte del incidente del juez Kavanaugh, los representantes republicanos de la Cámara también hicieron referencia en su carta del martes a un legislador demócrata de la Cámara de Representantes que presentó artículos de impugnación contra los jueces de la Corte Suprema, Clarence Thomas y Samuel Alito. Los legisladores del GOP dijeron que ese legislador hizo «declaraciones inexactas o intencionalmente engañosas para afirmar que la corte no tiene legitimidad».
«Todas estas tácticas están destinadas a intimidar a los jueces conservadores por sus acciones oficiales», escribieron los legisladores.
El 13 de julio, el expresidente Trump recibió un disparo en la oreja, un asistente al mitin murió y otros dos resultaron heridos. El FBI identificó como sospechoso a Thomas Matthew Crooks, que fue abatido por las fuerzas del orden poco después de abrir fuego.
Tras el intento de asesinato, surgieron preguntas sobre cómo el Servicio Secreto manejó la seguridad y si denegó las solicitudes de la campaña de Trump de más seguridad en los eventos.
La directora Kimberly Cheatle dimitió el martes ante las demandas bipartidistas para que dejara su cargo por no haber evitado el intento de asesinato.
El mismo panel judicial escuchó el testimonio del director del FBI, Christopher Wray, el miércoles.
El Sr. Wray declaró que el FBI creo una línea de tiempo de la actividad en línea y los movimientos del Sr. Crooks antes del tiroteo, añadiendo que su motivo aún no está claro.
«Muchos de los repositorios habituales de información no han arrojado nada notable en términos de motivo o ideología», dijo Wray.
También señaló que el joven Crooks se había interesado por los funcionarios públicos y tenía fotos en su teléfono de políticos prominentes. En los días anteriores al tiroteo, había parecido particularmente consumido por Trump, el candidato republicano a la Casa Blanca.
Con información de The Associated Press
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