El senador Marco Rubio (R-Fla.) y el representante Tony Gonzales (R-Texas) presentaron el jueves una ley que castiga la distribución de fentanilo que provoque muertes con cargos federales de asesinato.
Esto se produce mientras la crisis en la frontera sur sigue asolando el país durante la Administración Biden.
El proyecto de ley, conocido como Ley de delito de asesinato por distribución de fentanilo con resultado de muerte (pdf), modifica el código estadounidense para castigar la distribución de fentanilo que resulte en muertes como un delito de asesinato. Este delito equivale a un asesinato premeditado.
«Quien sea culpable de asesinato en primer grado por distribuir fentanilo será castigado con la pena de muerte o con cadena perpetua», dice el proyecto de ley.
El proyecto de ley llega en un momento en el que este opioide sintético se ha convertido en la principal causa de muerte por sobredosis entre los estadounidenses de 18 a 45 años y en el que los traficantes de drogas apuntan cada vez más a los niños y jóvenes con pastillas de fentanilo de colores, pero potencialmente mortales. Este analgésico altamente adictivo es hasta 50 veces más potente que la heroína, ya que solo 2 miligramos pueden ser mortales dependiendo del tamaño del cuerpo de la persona, su tolerancia y su uso anterior.
Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, las sobredosis de fentanilo supusieron más de 71,000 muertes en 2021, frente a las cerca de 58,000 de 2020, y se espera un aumento aún mayor en 2022.
«El fentanilo está matando a los estadounidenses a un nivel récord. Esta droga mortal está extendida por todo nuestro país y no ha dejado a ninguna comunidad intacta. Este proyecto de ley hará que los traficantes de drogas paguen el precio por vender fentanilo mortal», dijo Rubio en un comunicado de prensa del 15 de septiembre.
Ese mismo día, en Los Ángeles, un joven de 15 años fue arrestado como sospechoso de homicidio involuntario por la presunta venta de una droga con fentanilo a un par de estudiantes del Bernstein High School —uno de los cuales murió— mientras que un joven de 16 años fue arrestado por la presunta venta de drogas a un estudiante en un parque cercano.
También se unen a Rubio 13 copatrocinadores republicanos, entre los que se encuentran los senadores Tom Cotton (R-Ark.), Bill Hagerty (R-Tenn.), Rick Scott (R-Fla.), Roger Wicker (R-Miss.), John Cornyn (R-Texas), Bill Cassidy (R-La.), Joni Ernst (R-Iowa), Mike Braun (R-Ind.), Ted Cruz (R-Texas), Josh Hawley (R-Mo.), Marsha Blackburn (R-Tenn.), Steve Daines (R-Mont.) y Cindy Hyde-Smith (R-Miss.).
Seguridad fronteriza
La mayor parte del fentanilo se fabrica en China o se sintetiza a partir de precursores químicos suministrados desde China. A continuación, se introduce de contrabando en Estados Unidos directamente o a través de la frontera entre Estados Unidos y México.
«El fentanilo se está introduciendo de contrabando a través de nuestra frontera sur a niveles récord», dijo el representante Tony Gonzales (R-Texas), que presentó una legislación complementaria en la Cámara de Representantes, señalando que los cárteles tienen en el punto de mira a los jóvenes.
«Dado que la Administración Biden no ha resuelto esta crisis de seguridad nacional, es hora de que el Congreso tome cartas en el asunto», dijo.
Mientras el presidente Joe Biden presidía el mayor número de aprehensiones de inmigrantes ilegales en la frontera, los datos de la Oficina de Aduanas y Protección de Fronteras de Estados Unidos muestran que los agentes fronterizos incautaron 2130 libras de fentanilo en julio, más del triple de lo interceptado en junio, y superando el anterior récord mensual de casi 1300 libras establecido en abril.
Casi iguala la cantidad total de fentanilo confiscado a lo largo de 2019.
Los senadores denunciaron el fracaso de la Administración Biden en la seguridad de la frontera que condujo a la «epidemia de fentanilo».
«Durante demasiado tiempo, la gente ha sufrido adicción y muerte a causa de esta malvada droga que está atravesando la frontera sur abierta de Joe Biden», dijo Scott en un comunicado, instando a «la aprobación inmediata» del proyecto de ley.
El mes pasado, los agentes de la patrulla fronteriza detuvieron a dos ciudadanos estadounidenses y se incautaron de 340 paquetes de píldoras de fentanilo cerca de Gila Bend, Arizona, con un peso total de 187 libras, que pueden matar hasta 42 millones de personas.
Los funcionarios de la Casa Blanca no respondieron inmediatamente a una solicitud de comentarios.
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