El Congreso de Guatemala decidió este jueves no aprobar el estado de Calamidad que había decretado el presidente, Bernardo Arévalo de León, para atender la crisis provocada por los incendios forestales en el país centroamericano.
Con el voto de 84 diputados de oposición, que cuestionaron la falta de transparencia e inviable el estado de Calamidad, se rechazó la medida de emergencia decretada el miércoles por Arévalo de León.
La bancada oficialista no logró conseguir los votos para aprobar esta medida, pese a que el mandatario la calificó como la mejor alternativa para activar los mecanismos necesarios para hacer frente a los incendios que afectan a todo el territorio nacional.
Ante la negativa del Legislativo, la Presidencia aseguró que seguirán buscando las vías para atender esta situación que afecta a la población guatemalteca.
Durante 2024, Guatemala ha registrado más de 1400 incendios, se han perdido 7376 hectáreas de bosque y más de dos decenas de estos se mantienen activos a nivel nacional.
Arévalo de León pretendía activar un estado de Calamidad en los departamentos (provincias) de Guatemala, Sacatepéquez, Escuintla y Petén.
La decisión había sido tomada después de que un incendio provocado dentro de un basurero, ubicado al sur de la Ciudad de Guatemala, provocara una severa contaminación en el aire del área metropolitana esta semana.
De acuerdo con las leyes guatemaltecas, un estado de Calamidad es un mecanismo que le permite acceder a fondos de emergencia de las instituciones responsables de atender crisis de diferente índole.
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