Los medios estatales de Corea del Norte dijeron el jueves que Pyongyang probó un nuevo tipo de misil balístico intercontinental (ICBM) cuando el líder Kim Jong Un ordenó a la nación ermitaña que se preparara para una “confrontación a largo plazo” con Estados Unidos.
El Hwasong-17 fue disparado desde el Aeropuerto Internacional de Pyongyang el 24 de marzo y voló 681 millas a una altitud máxima de 3905 millas antes de alcanzar un objetivo en el mar, dijo la agencia estatal Korean Central News Agency (KCNA).
El Hwasong-17 es el misil más grande de Corea del Norte , que los expertos describieron como un «misil monstruoso» capaz de atacar cualquier lugar de los Estados Unidos y más allá.
KCNA afirmó que Kim tiene como objetivo fortalecer la disuasión de la guerra nuclear para contrarrestar la «tensión militar que aumenta diariamente en la península de Corea» y la «inevitabilidad de la confrontación a largo plazo con los imperialistas estadounidenses acompañada de la amenaza de una guerra nuclear».
La agencia de noticias citó a Kim diciendo: “Es necesario dejar en claro que quien intente infringir la seguridad de nuestro estado lo pagará muy caro”.
Japón y Corea del Sur detectaron el misil el 24 de marzo. Japón dijo que el misil aterrizó a unas 93 millas al oeste de la península de Oshima dentro de su zona económica exclusiva, informó Kyodo News.
Estados Unidos dijo el 24 de marzo que impuso nuevas sanciones a dos empresas rusas, una rusa y una norcoreana, así como a la Oficina de Asuntos Exteriores de la Segunda Academia de Ciencias Naturales de Corea del Norte por transferir elementos sensibles al programa de misiles de Corea del Norte.
“Estas medidas son parte de nuestros esfuerzos continuos para impedir la capacidad de la RPDC de avanzar en su programa de misiles y resaltan el papel negativo que juega Rusia en el escenario mundial como proliferador de programas de interés”, dijo el Departamento de Estado de EE. UU., utilizando el acrónimo oficial para Corea del Norte.
El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas se reunirá públicamente el viernes a las 3 p.m. para discutir el lanzamiento del misil balístico intercontinental de Corea del Norte. El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, también instó a Pyongyang a “desistir de tomar cualquier otra acción contraproducente”.
“Esta es otra violación de la moratoria anunciada por la RPDC en 2018 sobre lanzamientos de esta naturaleza y una clara violación de las resoluciones del Consejo de Seguridad. El lanzamiento del misil de largo alcance corre el riesgo de una escalada significativa de las tensiones en la región”, dijo el portavoz de Guterres en un comunicado.
Corea del Norte ha estado realizando una serie de pruebas de misiles desde principios de 2022. El 11 de marzo, Corea del Sur advirtió que Pyongyang parece estar restaurando partes del sitio de pruebas nucleares de Punggye-ri, que el régimen de Kim arrasó en mayo de 2018 como una señal de su compromiso de poner fin a los ensayos nucleares.
Estados Unidos ha instado a que se retorne al diálogo, un llamado que Pyongyang ha ignorado debido a lo que dice son las políticas hostiles de Estados Unidos y sus aliados.
Con información de Reuters.
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