Un tribunal de Nueva York ha confirmado la ley estatal de «bandera roja», que permite a la policía confiscar temporalmente las armas de fuego de las personas consideradas una amenaza.
El fallo unánime fue emitido la semana pasada por el Segundo Departamento de Apelaciones del Tribunal Supremo de Nueva York, anulando la sentencia de un tribunal inferior que consideró que la ley era inconstitucional. El máximo tribunal consideró que la ley, firmada por el entonces gobernador Andrew Cuomo en 2019, no va en contra de la Segunda Enmienda de la Constitución.
«Esta regulación es consistente con la tradición histórica de la nación de regulación de armas de fuego para evitar que individuos peligrosos porten armas y, por lo tanto, es presuntamente legal», dictaminó el tribunal.
Corey Monroe, el demandante, había impugnado su legalidad después de que se le retiraran sus armas de fuego en 2023 en virtud de la ley. El hombre, de Middletown, en el condado neoyorquino de Orange, fue acusado de hacer comentarios amenazadores a un vecino y de blandir supuestamente una escopeta, según se informó.
Un juez emitió el 20 de enero de 2023 una orden de protección de riesgo extremo, también conocida como orden de «bandera roja», contra Monroe, informó Newsday. Permitía a la policía confiscar dos escopetas de su propiedad.
Un juez del Tribunal Supremo del condado de Orange accedió a su petición de desestimar la orden, informó el medio.
Pero la División de Apelaciones del Tribunal Supremo escribió que la ley es constitucional e «impone una restricción del derecho de un individuo a poseer o tener un arma de fuego cuando existe una causa probable para creer que es posible que se involucre en una conducta que podría resultar en un daño grave para sí mismo o para otros, que luego es apoyada por pruebas claras y convincentes en una audiencia».
«Esta normativa es coherente con la tradición histórica de la nación en materia de regulación de armas de fuego para impedir que individuos peligrosos porten armas», escribieron los jueces en la sentencia por 4-0. Se referían a un precedente del Tribunal Supremo de EE.UU. establecido en 2022 en el caso New York State Rifle & Pistol Association, Inc. contra Bruen, que reafirmaba que el derecho a llevar una pistola en público es un derecho constitucional garantizado por la Segunda Enmienda.
Un abogado de Monroe declaró a los medios de comunicación locales que está intentando apelar la decisión.
«Creemos firmemente que la ley de bandera roja de Nueva York sigue careciendo de las protecciones procesales suficientes y constitucionalmente requeridas para las personas que podrían encontrarse en el extremo receptor de una orden de este tipo», dijo su abogado, Derek Andrews, en un comunicado.
Al igual que las leyes de bandera roja de otros estados, la ley neoyorquina permite a un familiar o a otra persona con vínculos estrechos con el propietario de un arma pedir a un juez que emita una orden de protección de riesgo extremo, dando a la policía la autoridad para confiscar armas de forma temporal.
Los partidarios de estas leyes, incluido el gobierno de Biden, afirman que pueden salvar vidas al impedir que personas inestables se maten a sí mismas o maten a otros. Pero sus detractores afirman que violan la Segunda Enmienda y permitirán a la policía confiscar armas que pueden utilizarse en situaciones de defensa propia.
En declaraciones al Newsday, Andrews se mostró crítico con la ley y dijo que se basa en «un estatuto mal redactado» que puede «arriesgar la incautación de armas de fuego por actos de defensa propia, que es lo que ocurrió en el incidente subyacente alegado en apoyo de la orden temporal de protección de riesgo extremo».
La decisión se produce cuando el Departamento de Justicia de EE.UU. (DOJ) acaba de anunciar un nuevo programa para ayudar a los estados a aplicar las leyes de bandera roja, lo que ha suscitado las críticas de los principales republicanos de la Cámara de Representantes.
El Fiscal General Merrick Garland dijo en un comunicado el 24 de marzo que el programa del DOJ proporcionará «valiosos recursos para mantener las armas de fuego fuera del alcance de individuos que suponen una amenaza para sí mismos o para otros».
«¡Merrick Garland acaba de anunciar una operación masiva de Bandera Roja que el DOJ llevará a cabo utilizando TODAS las herramientas de espionaje que el gobierno de EE.UU. tiene con el fin de violar la Segunda Enmienda de los estadounidenses!» La representante Marjorie Taylor Greene ( R-Ga.) escribió en X, antes conocido como Twitter. «¡Esto llega justo después de que [el presidente de la Cámara Mike] Johnson financiara totalmente el DOJ usado como arma por [el presidente Joe] Biden!».
«Un centro de Bandera Roja Federal; Nosotros no autorizamos esto», escribió el representante Thomas Massie (R-Ky.) en X. El legislador de Kentucky señaló que el anuncio se produjo después de que el Senado lograra aprobar un proyecto de ley de financiación para el gobierno en una votación anticipada el 23 de marzo.
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